Luego de que Capuchetti negara el pedido de recusación de la causa que investiga el atentado contra Cristina Fernández de Kirchner, la vicepresidenta publicó un duro video cuestionando el accionar en la causa. «En este video de 4 minutos 4 segundos, vas a conocer las nuevas y muy graves irregularidades de la no investigación de la jueza Capuchetti», señaló.
Con la voz de la periodista Julia Mengolini y una serie de imágenes que acompañan el relato, el video publicado por la vicepresidenta pone el foco en diversas aristas de la investigación en las que Capuchetti no avanzó, al igual que en los errores que cometió, como la pérdida de pruebas en el celular de Sabag Montiel. «La investigación comenzó muy mal», señala en relación con este hecho, y suma como otros primeros errores la demora en la detención de Brenda Uliarte y Nicolás Carrizo y «la paralización de la causa ni bien aparecieron pruebas que vinculan a dirigentes de la oposición con el atentado».
En la enumeración de hechos que cuestiona, la vicepresidenta pone el foco en Hernán Carroll, a quien Sabag Montiel designó como «responsable» de su situación y de elegir a sus abogados, y que tiene vínculos con el diputado Gerardo Milman y con Patricia Bullrich. «Cuando lo citó a declarar ya era tarde. El día anterior Carroll había borrado todo el contenido de su celular», destacó.
En línea con el escrito que presentó en el pedido de recusación de Capuchetti, el video pone el foco en otros elementos. Primero en «la obsesión de Milman con la seguridad de Cristina», quien días antes del hecho había advertido de un posible «falso atentado» contra la vicepresidenta y había realizado un pedido de informes sobre la custodia de CFK. «¿Para qué quería tener acceso a esa información tan sensible sobre la información de Cristina? Aún no lo sabemos porque Capuchetti nunca lo investigó», cuestiona.
Asimismo, pone el foco en una «pista fundamental» que no fue investigada por la jueza, que tiene que ver con la «nota manuscrita sobre la regla Tueller» encontrada en el domicilio de Uliarte, es decir, «una doctrina de seguridad que calcula el tiempo que tiene una persona para sacar un arma y lograr dispararla sin que se la saquen». Esta doctrina fue traída de Estados Unidos «como una novedad por Bullrich cuando Milman era su viceministro». «¿A Capuchetti le parece normal que una persona como Uliarte tuviera en su casa una referencia a una técnica tan específica y sofisticada?», se pregunta y agrega: «Al parecer sí y por eso la jueza nunca investigó quién escribió esa nota».
Por otro lado, el video pone en cuestión el pasado de la jueza Capuchetti, que, previo a ser designada, «era una asidua visitante de la Agencia Federal de Inteligencia» durante la gestión de Mauricio Macri, cuando estaba a cargo de Gustavo Arribas y Silvia Majdalanis, hoy procesados por espionaje ilegal al Instituto Patria. La hermana de Capuchetti, además, trabajó en el área de escuchas durante esta gestión.
Finalmente, pone el foco en la relación de la jueza con Comodoro Py y el Grupo Clarín. En ese sentido, señala que Capuchetti «habría recibido indicaciones respecto de cómo debía tratar mediáticamente el caso y las posibles líneas de investigación» por parte de un grupo de magistrados, quienes le habrían gestionado una reunión privada con el editor en jefe del diario, Ricardo Roa. «¿Para qué eran necesarias esas instrucciones? ¿Alguien digita u opina por detrás de las autoridades judiciales el curso de la causa?», concluye.