Ex militares y policías de la Bonaerense acusados por los delitos de lesa humanidad perpetrados en las Brigadas de Investigaciones de Lanús y de Banfield, dejaron en claro su desprecio por la justicia durante la lectura de ampliación de cargos e indagatorias por los nuevos casos incorporados al juicio que lleva adelante el TOF Nº1 de La Plata. Un ex policía de la Bonaerense se sumó como imputado. Se negaron a declarar, excepto Wolk que responsabilizó a Etchecolatz y dijo no conocer ni a Bergés, ni a Minicucci.
Por Gabriela Calotti
Por primera vez casi desde el inicio del juicio, allá por octubre de 2020, volvieron a verse en la “sala virtual” los rostros de los 11 imputados que llegaron a este juicio oral y público –de los 18 iniciales que fueron murieron en el camino, entre éstos Miguel Osvaldo Etchecolatz, símbolo de la represión genocida- pues tienen obligación de presenciar y escuchar la ampliación de cargos en su contra. Sin embargo, fue más que evidente su desdén hacia el Tribunal y hacia las querellas y el Ministerio Público Fiscal.
A varios se los veía conversar con alguna persona que estaba cerca, otros se dormitaban, otros se levantaban inclusive durante la lectura de los cargos en su contra, otro argumento que “justo a esta hora tengo que ir al baño por mis problemas de salud”, y así sucesivamente, y otro como Jaime Lamont Smart se dispuso comodamente a leer el diario, hasta el que el presidente del Tribunal, el juez Ricardo Basílico le llamó la atención. En otro tramo intervino ante el magistrado una de las abogadas de la querella de Justicia Ya para solicitar atención por parte de los imputados.
“¡Durante la audiencia no puede leer el periódico!”, le llamó la atención Basílico, quien tras la solicitud de Luz Santos Morón agregó: “Lo que dije respecto del señor Smart va para todos los imputados”, sostuvo Basílico en el marco de la audiencia número 94.
El secretario del Tribunal, Julio César Díaz, fue el encargado de leer la extensa ampliación de cargos elaborada por el Ministerio Público Fiscal con las firmas de Ana Oberlín y Juan Martín Nogueira, pese a algunas dificultades técnicas de sonido.
A los 11 imputados que llegaron a esta etapa del debate oral y público se sumó uno más. Se trata de Luis Horacio Castillo, oficial inspector que cumplió tareas en las Brigadas de Investigaciones de Banfield y en la de Lanús, conocidas como Pozo de Banfield y “El Infierno” de Lanús.
Once de los imputados aparecieron en sus domicilios, pues gozan del beneficio de la prisión domiciliaria. Sólo uno, Jorge Héctor Di Pasquale, apareció desde la Unidad Penitenciaria Nº 34 donde también cumplía condena Etchecolatz, fallecido en julio de 2022.
La sensación de impunidad volvió a recorrer la sala virtual cuando el secretario leyó primero la nómina de los 12 imputados, con datos filiatorios, cargos en su contra y la responsabiliad de cada uno de ellos, y luego dio lectura a una lista interminable de víctimas de los represores que llegaron a este juicio.
Desde el inicio del juicio la impunidad biológica benefició de alguna forma a otros tres represores: Miguel Angel Ferreyro, Carlos Hidalgo Garzón y Emilio Herrero Anzorena.
- Jaime Lamont Smart, ex ministro de Gobierno de la provincia de Buenos Aires. Está acusado de los delitos de privación ilegítima de la libertad y aplicación de tormentos en el Pozo de Banfield. Violaciones, reducción a servidumbre, homicidio calificado, desaparicion forzada de las victimas y/o homicidio. Por El Infierno también se lo responsabiliza de la aplicación de tormentos, privación ilegitima de la libertad, abuso sexual y violacion…Eludió mirar a la cámara durante la lectura de los cargos.
- Juan Miguel Wolk, comisario inspector de Seguridad y jefe de la division de Delitos contra la Propiedad y contra las Personas que dependía de la Dirección de Investigaciones. Fue señalado como el jefe del Pozo de Banfield. Se lo acusa de privación ilegítima de la libertad y aplicación de tormentos. Desaparición forzada y/o homicidio agrabado. Posibilitó abuso sexual en El Infierno. Mientras leían el nombre de las víctimas, Wolk hablaba con alguien a su lado.
- Jorge Antonio Bergés, era médico de la policía de la Provincia de Buenos Aires y cumplió funciones para la Dirección de Investigaciones que dirigía Etchecolatz. Se le atribuye privación ilegal de la libertad, aplicación de tormentos en el Pozo de Banfield. Desaparicion forzada y de manera alternativa homicidio agravado. Berges fue señalado por testimonios de sobrevivientes por “asistir” a partos de mujeres cautivas en condiciones infrahumanas. Esposadas a una camilla o a una mesa y obligadas luego a limpiar. Y como si fuera poco intervino en la apropiación de esos bebés. Su cara sólo se veía por la mitad. Al inicio del juicio se había negado a declarar.
- Federico Minicucci teniente coronel, jefe del Regimiento de Infanteria Mecanizada numero III de La Tablada (RIM III). Los cargos que se le imputan son privación ilegal de la libertad, aplicó tormentos en el Pozo de Banfield. Desaparición forzada y/o homicidio. Minicucci tenía la más alta calificación de sus superiores. Su papel fue decisivo, afirmó la Fiscalía. Era el jefe del área 112. Gran Buenos Aires. Mientras Díaz le leía los cargos y el nombres de las víctimas, Minicucci se levantó del sillón sin ningún miramiento.
- Roberto Armando Balmaceda, teniente primero y luego capitán, fue jefe de contrainteligencia y del grupo de actividades especiales del destacamento 101 de La Plata. Los cargos son privación ilegal de la libertad, aplicó tormentos en Pozo de Banfield. Homicidio agravado, abuso sexual en El Infierno. Considerado “sumamente eficiente” por sus superiores. Fue profesor en la Escuela de la Policía de la Provincia de Buenos Aires. Tenía un rol preponderante, según el Ministerio Público Fiscal. No estuvo presente en la lectura de ampliación de cargos porque según su abogado defensor ‘no estaba bien’.
- Enrique Augusto Barre , fue comisario de Seguridad y segundo jefe de la division Delitos contra la Propiedad. Por su papel en el Pozo de Banfield se le atribuyen los cargos de privación ilegal libertad y aplicación de tormentos. Homicidio calificado. Su superior, Juan Miguel Wolk lo había calificado como “sobresaliente” al firmar su ascenso. Era un “eslabón importante en la cadena de manos del personal policial que funcionaba a sus órdenes”, afirmó el MPF.
- Jorge Héctor Di Pasquale, capitán de artillería y jefe de sección de Operaciones Especiales del Destacamento de Inteligencia 101 de La Plata. En ese esquema privó ilegalmente de la libertad y aplicó tormentos en el Pozo de Banfield. Luego paso a la Escuela Superior de Guerra. Este resumen de la Fiscalía incluye una serie de reclamos que años atrás hiciera Di Pasquale con afirmaciones tales como: “todos tuvimos participación en la guerra”. Lo ideal sería una postura firme de la fuerza ante el poder político (…) sin detenidos ni procesados”.
- Guillermo Alberto Dominguez Matheu, capitán del Ejército y jefe de Actividades Psicologicas del Destacamento 101 de La Plata. Privacion ilegal de la libertad y aplicación de tormentos en Pozo de Banfield. Abuso sexual y homicidio calificado. Los mismos cargos respecto de El Infierno. Su papel fue decisivo para la detención de las víctimas que fueron llevadas al Pozo de Banfield. Escuchó los cargos en su contra sentado en un sillón y absolutamente lúcido y atento.
- Carlos Gustavo Fontana, capitán del Destacamento de Inteligencia 101 de La Plata. Privación ilegal de la libertad, aplicación de tormentos, homicidio calificado por el Pozo de Banfield. Respecto de El Infierno también privacion de la libertad, aplicación de tormentos, posibilitó abuso sexual. Escuchó los cargos sin mirar a la cámara y como si leyera algo sobre su escritorio.
- Carlos Maria Romero Pavón, capitán de Infantería y jefe de la sección Reunion Interior del Destacamento de Inteligencia 101 de La Plata. Los cargos: privación ilegal de la libertad y aplicación de tormentos. Violación, reduccion a la servidumbre en el Pozo de Banfield. desaparicion forzada de las víctimas y de manera alternativa su homicidio agravado. También privacion libertad y tormentos en El Infierno. Posibilito el abuso sexual simple en El Infierno. Fue docente ad honorem en la Escuela de Policia de la provincia de Buenos Aires. Cuando se leyó la lista de víctimas, bajó la vista.
- Julio Alberto Candioti, teniente primero y luego capital del Destacamento 101 de Inteligencia del Ejército. Acusado de los cargos de privación ilegal de la libertad, tormentos, abuso sexual y violacion en Pozo de Banfield. En El Infierno también privacion libertad, aplicación detormentos. Integró la plana mayor del Destacamento 101. “Era uno de los pocos sobresalientes para su grado”, según sus superiores. Fue Jefe de sección, de comando y de servicio. Luego se le sumó oficial de operaciones, oficial de personal y de logística. Prestó “auxilio imprescindible” en los hechos perpetrados en las Brigadas de Banfield y de Lanús.
- Horacio Luis Castillo, oficial inspector de la Bonaerense cumplió funciones en el Pozo de Banfield. Los cargos: privación ilegal de la libertad y aplicación de tormentos. Abuso sexual, retencion y sustraccion de un menor de 10 años, y de otros menores de edad como el hijo o hija de Gabriela Carriquiriborde, María Clara Ciochini, Claudio De Acha, Francisco Lopez Muntaner, Horacio Ungaro, entre otros. Desaparicion forzada de las victimas y/o homicidio agravado. También privacion ilegal y tormentos en El Infierno. Desaparición forzada/homicidio agravado. Posibilitó abuso sexual. Constancias en su legajo personal y testimonios. En varios momentos se lo vio sonreir y mover la cabeza en sentido negativo a medida que se leían los cargos y pruebas.
Las nuevas indagatorias
El último tramo de la audiencia estuvo destinado a tomar las nuevas declaraciones indagatorias a cinco de los imputados Jorge Antonio Berges, Jaime Lamont Smart, Carlos María Romero Pavón, Guillermo Alberto Domínguez Matheu y Juan Miguel Wolk, de los cuales sólo éste último accedió a prestarla, y en parte, pues terminó negándose a responder preguntas de las partes.
Jorge Antonio Bergés, se limitó a indicar durante las preguntas de rigor acerca de sus datos filiatorios y causas previas, que “había sido absuelto por todas estas causas” y hasta se atrevió a señalar al ex juez Carlos Rozanski a quien dijo que denunció “ante el consejo de la magistratura”.
Bergés se negó a prestar declaración indagatoria y dijo que lo hará “después de que declaren todos los testigos”.
Jaime Lamont Smart, mencionó las condenas a las que ya fue sentenciado en otras causas y dijo que dos de ellas fueron recurridas ante la Corte Suprema y una tercera en la Sala I de Casación Penal. También se negó a prestar declaración. “No voy a presentar declaración por ahora en esta causa”, respondió.
Juan Miguel Wolk, aceptó declarar para referirse a “detalles inconclusos de la investigación de los fiscales que están en desacuerdo con la realidad”, empezó diciendo al Tribunal, antes de asegurar que “al doctor Bergés, no lo conozco”.
Tras afirmar que “estoy cansado de tantos improperios, de recibir tantas acusaciones”, Wolk intentó descargar toda la responsabilidad en Miguel Osvaldo Etchecolatz, muerto hace unos meses y por lo tanto ya ausente del juicio.
“Fuimos un numerario más en Banfield. (…) Dependía directamente de la Direccion General de Investigaciones a cargo de Miguel Osvaldo Etchecolatz. Nosotros no teniamos nada que ver con los detenidos que había, nunca tuvimos nada que ver con delitos ideológicos, nunca nos mandó a hacer averiguaciones por delitos ideológicos”, sostuvo luego de dar a entender que si “Etchecolatz lo permitía era porque buscaba un ascenso a jefe de la Policía de la provincia”.
“Nunca fui jefe en Banfield. Si había un jefe tenía que ser de la dirección de Seguridad o de Investigaciones”, agregó.
También dijo que tampoco conocía a Minicucci, otro de los imputados en este juicio. “Minicucci era el jefe responsable de todo el personal del Ejercito en Puente 12, en La Tablada. Por qué dicen que actuaba con la policia de la provincia de Buenos Aires. Nunca yo… ni lo conozco. No conozco a los hombres que han estado prestando declaracion en este encuentro que tenemos”, afirmó, como si estuviera en una charla de amigos.
“No conozco a nadie. Entonces por qué me relacionan con los hechos vandálicos contra la gente esta que se dice torturada”, dijo para luego entrar en contradicción acerca de si iba o no a responder preguntas como sí había aceptado al inicio de su indagatoria.
Carlos María Romero Pavón, se presentó como militar y luego dijo retirado. “Concretamente prefiero no declarar”, respondió a Basílico ante quien reconoció sus causas anteriores en las que fue condenado a cadena perpetua.
Guillermo Alberto Dominguez Matheu, que se presentó como militar retirado y “veterano de Malvinas”, indicó que no tiene “ninguna causa señor”. “Llevo diez años procesado sin ninguna condena y sin acusaciones, excepto esta que estamos tratando”. Domínguez Matheu tampoco acepto prestar declaración indagatoria. “Provisoriamente no voy a prestar declaración”, sostuvo y agregó “voy a ratificar la declaracion indagatoria que hice en marzo de 2022 ante el Tribunal Federal Nº3 de La Plata”.
Los restantes imputados “quedan ya citados para las indagatorias” en la próxima audiencia, que tendrá lugar el martes 28 de febrero a las 8.30 hs, indicó Basílico antes de concluir la audiencia.
El presente juicio por los delitos perpetrados en las Brigadas de la policía bonaerense de Banfield, de Quilmes y de Lanús, conocida como “El Infierno”, con asiento en Avellaneda, es resultado de tres causas unificadas en la causa 737/2013 con sólo 15 imputados y con apenas uno de ellos en la cárcel, Jorge Di Pasquale. Inicialmente eran 18 los imputados, pero desde el inicio del juicio, el 27 de octubre de 2020, fallecieron tres: Miguel Angel Ferreyro, Emilio Alberto Herrero Anzorena y Miguel Osvaldo Etchecolatz, símbolo de la brutal represión en La Plata y en la provincia de Buenos Aires.
Este debate oral y público por los delitos cometidos en las tres Brigadas, que se desarrolló básicamente de forma virtual debido a la pandemia de Covid-19, ha incorporado en los últimos meses algunas audiencias semi-presenciales.
Por esos tres CCD pasaron 442 víctimas tras el golpe cívico-militar del 24 de marzo de 1976, aunque algunas de ellas estuvieron secuestradas en la Brigada de Quilmes antes del golpe. Más de 450 testigos prestarán declaración en este juicio. El Tribunal está integrado por los jueces Ricardo Basílico, que ejerce la presidencia, junto a Esteban Rodríguez Eggers, Walter Venditti y Fernando Canero.
Las audiencias pueden seguirse por las plataformas de La Retaguardia TV (https://bit.ly/2T1S06P) o el Facebook de la Comisión Provincial por la Memoria. https://fb.watch/66cTGFRqGP/. Más información sobre este juicio puede consultarse en el blog del Programa de Apoyo a Juicios de la UNLP https://bit.ly/3coDVqV.