La Cámara de Senadores de la provincia de Buenos Aires votó la creación del Comité de la Cuenca Hídrica Arroyo San Francisco-Las Piedras, un ente autárquico que permitirá la ejecución de obras para morigerar los riesgos producidos por las inundaciones.
El plan hídrico incluye los distritos de Presidente Perón, Almirante Brown, Florencio Varela, Quilmes y Avellaneda. También apunta a controlar la calidad del agua.
Se trata de una iniciativa presentada por el exdiputado y actual intendente de Almirante Brown, Mariano Cascallares, y que fue aprobada en la primera sesión de la Cámara Baja, con el acompañamiento de Unión por la Patria, el PRO, la UCR+Cambio Federal, la Coalición Cívica, Acuerdo Cívico UCR+GEN y el bloque de la Libertad por Siempre.
En este marco, el senador de Unión por la Patria Emmanuel González Santalla celebró la medida: «Este proyecto que se viene trabajando hace tiempo es muy importante, porque nosotros no vamos a caer en el consignismo bobo del Estado presente que resuelve todo, porque sabemos que no es así», dijo, y agregó que «este es un problema que lleva muchas décadas».
En este marco, el legislador provincial resaltó la figura de la intendenta de Quilmes, Mayra Mendoza, «para impulsar finalmente un proyecto como este. Muchos que fueron invisibles durante muchos años en esta cuenca, que esto se haya podido motorizar finalmente, sin sacarle ningún mérito al resto de los intendentes, fue lo que se comprometió cuando caminaba con sus vecinos. Y qué importante es que la dirigencia empiece a achicar la brecha que hay entre lo que le dice a la gente en campaña, y lo que hace finalmente cuando le toca asumir las responsabilidades».
«Nobleza obliga, el exintendente Martiniano Molina, hoy diputado provincial, acompañó el proyecto, firmó el proyecto, lo votó, porque también sabe, por su experiencia en el municipio, que este es un problema muy serio».
El proyecto permite además buscar financiamiento internacional para llevar adelante las obras necesarias, sobre todo en un contexto en el que el Gobierno de Javier Milei decidió frenar la obra pública y retirar los fondos nacionales a las provincias y municipios.
«Se calcula que las obras que hacen falta, aliviadores, reservorios, estaciones de bombeo y demás, que están en el plan estratégico que hay que buscarle financiamiento, son cerca de 1.000 millones de dólares, el 2 % de lo que se tomó como deuda del FMI», explicó Gónzalez Santalla, y apuntó: «Hubiese sido muy bueno que la guita que se tomó del Fondo se hubiese invertido en la gente y lo hubiesen visto estos argentinos y argentinas que viven a la vera de la cuenca».