Por Maximiliano Ceci
El Tribunal Oral Federal de Bahía Blanca condenó a prisión perpetua a dieciocho represores e impuso penas de entre 8 y 18 años de prisión a otros cuatro imputados. «Fue una sentencia increíble, muy importante y con todas las expectativas cubiertas. El Tribunal, que en las dos causas anteriores también había dictado sentencias ejemplares, no perdió su lineamiento y prácticamente falló en favor de todo lo pedido por las partes acusatorias”, explicó a Contexto Alejandra Santucho, integrante de H.I.J.O.S. Regional Bahía Blanca, tras conocerse la histórica sentencia. Además, los jueces hicieron lugar al pedido de los fiscales para que todos los delitos sean declarados de lesa humanidad, y, en un hecho inédito, ordenaron que el fallo condenatorio sea publicado en el diario La Nueva Provincia, un medio que durante la dictadura funcionó como difusor de la propaganda genocida.
Los condenados a perpetua son el ex vicealmirante Eduardo Rene Fracassi; el ex capitán de corbeta Luis Alberto Pablo Pons; los ex capitanes de navío Enrique de León, Oscar Alfredo Castro, Alberto Gerardo Pazos, Leandro Marcelo Maloberti, Tomás Hermógenes Carrizo y Edmundo Oscar Núñez; los ex prefectos Luis Ángel Bustos, Néstor Alberto Nougues y Francisco Manuel Martínez Loydi; el ex capitán de fragata José Luis Ripa; el ex coronel Carlos Andrés Stricker; los ex tenientes coroneles Óscar Raúl Otero y Guillermo Julio González Chipont; el ex suboficial mayor del Ejército Víctor Raúl Aguirre; los ex suboficiales Felipe Ayala y Raúl Artemio Domínguez.
Además, los magistrados otorgaron dieciocho años de prisión para el ex prefecto Pedro Alberto Pila; ocho años para el ex oficial Alejandro Lawless; ocho años para el ex jefe de la Unidad Penal Nº 4, Héctor Luis Selaya; y ocho años para el ex comisario mayor Víctor Oscar Fogelman.
El Tribunal, integrado por los jueces Jorge Ferro, José Mario Triputti y Martín Bava, también juzgó los delitos sexuales cometidos por los imputados. “Los fallos sobre los delitos sexuales son muy importantes. Durante la lectura del veredicto, había mujeres que habían padecido esos abusos y que tan valientemente pusieron su testimonio en este juicio. Creemos que esto fue sumamente reparador para ellas, sus familiares y todos nosotros”, contó Santucho. Y agregó: “Los sobrevivientes realmente son un orgullo y el sostén de estos juicios. En este caso, las mujeres que pudieron contar las aberraciones a las que fueron sometidas, las reivindicamos enormemente”.
“Los sobrevivientes realmente son un orgullo y el sostén de estos juicios. En este caso, las mujeres que pudieron contar las aberraciones a las que fueron sometidas, las reivindicamos enormemente.”
Este Tribunal estuvo a cargo de los tres juicios que se llevaron a cabo en Bahía Blanca por los crímenes de lesa humanidad cometidos por la última dictadura militar. Esta última causa puso el foco sobre el accionar de la Armada, que tuvo a la base naval Puerto Belgrano como centro de operaciones. “Los jueces dispusieron como sitio de memoria la Batería Séptima de la base de Puerto Belgrano. Si bien la justicia punitiva es reparadora, es aun más importante una justicia que marque la memoria. Aquellos que tuvimos la posibilidad de conocerlo sabemos que es un lugar muy siniestro”, indicó a Contexto Anahí Junquera, integrante de H.I.J.O.S. Regional Bahía Blanca.
En la antesala de la lectura de la sentencia, los organismos de derechos humanos se manifestaron y realizaron actividades en memoria de las víctimas del terrorismo de Estado. “El desenlace del juicio es un ladrillo más en la construcción del fin de la impunidad, pero es una coyuntura compleja por la asunción de un gobierno que no aseguró la continuidad de la política de Memoria, Verdad y Justicia”, dijo Eduardo Hidalgo, secretario general de la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos de Bahía Blanca.
De las 66 víctimas tenidas en cuenta en la causa, doce siguen desaparecidas, cinco fueron asesinadas y las restantes sobrevivieron al secuestro y torturas que sufrieron en centros clandestinos del área de Puerto Belgrano, el mayor emplazamiento de la Armada en la Argentina.
De las 66 víctimas tenidas en cuenta en la causa, doce siguen desaparecidas, cinco fueron asesinadas y las restantes sobrevivieron al secuestro y torturas que sufrieron en centros clandestinos del área de Puerto Belgrano, el mayor emplazamiento de la Armada en la Argentina. Algunos de esos centros clandestinos funcionaron en el ya desaparecido crucero 9 de Julio, mellizo del Belgrano, y en la Base de Infantería de Baterías, ambos de la Armada, y en dependencias del V Cuerpo del Ejército en Bahía Blanca.
En las páginas de La Nueva Provincia
«Disponer, para el momento en que se encuentre firme la sentencia, que en el plazo de diez días, el diario ‘LA NUEVA’ de esta ciudad (ex ‘La Nueva Provincia’) publique la rectificación, como acto moralmente reparatorio y de reconstrucción de la memoria, de la información oportunamente vertida en ese periódico donde se comunicaba a la ciudadanía que Edgardo Carracedo, Rodolfo Canini, Néstor Giorno, Hugo Mario Giorno, Aedo Héctor Juárez, Héctor Ramón Duck, Cristina Coussement y José Luis Peralta fueron detenidos o abatidos en enfrentamientos militares, cuando quedó debidamente acreditado en este proceso que fueron objeto de secuestro, tortura y en su caso, fusilamiento por parte del personal militar de la época, haciendo expresa mención de la fecha, página y sección en la cual fueron vertidas tales noticias», señaló el Tribunal, tal como lo había pedido la Unidad Fiscal integrada por José Nebbia y Miguel Ángel Palazzani.
“Todo aquel que fue ejecutado, asesinado y que aparecía muerto en un enfrentamiento va a haber reparado su biografía en las páginas del diario», dijo Palazzani. Y agregó: «El Tribunal ha dado un paso más en ese derecho a réplica colectivo que habíamos planteado, en la dimensión de la reparación total de las biografías de las víctimas, que alivia un poco lo vivido».
Por su parte, Santucho destacó la importancia de esta medida: “Es muy importante y no sólo simbólicamente. Se repara la memoria de las víctimas y el diario debe reconocer que lo que publicó en su momento era mentira. Realmente es inédito, no hay otro fallo igual”.
“Es muy importante y no sólo simbólicamente. Se repara la memoria de las víctimas y el Diario debe reconocer que lo que publicó en su momento era mentira. Realmente es inédito, no hay otro fallo igual”. Alejandra Santucho (H.I.J.O.S.)
“Nosotros seguiremos por la unificación de lo que queda (Armada y Ejército) y esperando que este nuevo gobierno que asuma dé señales claras de qué va a hacer con los juicios y las políticas de derechos humanos. Hasta ahora no lo han hecho, y no alcanza con sólo decir que van a continuar. Es necesario que digan si seguirán siendo políticas de Estado”, concluyó Santucho.