Según el organismo de las Naciones Unidas para las Infancias (Unicef), más de un millón de chicos se va dormir sin comer en Argentina, mientras que un millón y medio se saltea una comida por día. Además, aseguró que 4,5 millones de adultos no completan las comidas días por la falta de ingresos y explica que «priorizan que sus hijos puedan alimentarse».
Desde Unicef señalaron que «el aumento de los precios y el estancamiento económico desde hace más de una década han incidido en la capacidad de generación de ingresos de millones de hogares con niñas y niños». A esta realidad se le suma que «10 millones de chicas y chicos en Argentina comen menos carne y lácteos en comparación al año pasado por falta de dinero».
Vale recordar que la última Encuesta Permanente de Hogares (EPH) publicada por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC), precisó que la pobreza aumentó del 44 al 54,8 % durante el primer trimestre de 2024. Según la EPH hubo un marcado incremento de la indigencia, que subió del 13,8 % en el cuarto trimestre de 2023 al 20,3 % en los primeros tres meses de este año.
Dentro de esos números también se desprende que la pobreza infantil escaló al 69,7 % y la indigencia infantil al 30 %, lo que significa que 7 de cada 10 menores de catorce años viven en hogares pobres y 3 de cada 10 no cuentan con la canasta elemental de alimentos.
El exponencial aumento de hogares y niños pobres muestra el impacto de la devaluación del 118 % y el ajuste de shock implementados por el Gobierno de Javier Milei.
Para poder enfrentar esta realidad marcada por el ajuste, la inflación y la pérdida de poder adquisitivo del salario, desde Unicef afirmaron que se necesita «una combinación de políticas y la protección de los recursos presupuestarios que se asignan a la niñez, que permitan a su vez sostener y mejorar los esquemas de protección de ingresos destinados a familias en mayor situación de vulnerabilidad».