Por Alejandro Palladino
La educación pública superior del país se amplía con la creación de dos nuevas Universidades nacionales. En su último discurso en la ex Esma, la presidenta Cristina Fernández de Kirchner promulgó las leyes aprobadas por el Congreso de la Nación para la creación de la Universidad Nacional Scalabrini Ortiz, en la ciudad de San Isidro, y la Universidad Nacional de San Antonio de Areco (Unsada), y elevó a diecinueve las nuevas casas de estudio superior en todo el territorio nacional en los últimos doce años.
La particularidad en común de las nuevas instituciones son la relación de sus propuestas educativas con las posibilidades laborales de la región, con las fuentes productivas que tienen esos territorios del país, y con la inclusión de jóvenes al trabajo y al estudio sin que tengan que abandonar sus pueblos.
“Comenzamos con este proyecto educativo ni bien asumimos en 2011 –dijo a Contexto Francisco Durañona, intendente del municipio bonaerense de San Antonio de Areco–, en el marco del objetivo de contribuir en el proceso de industrialización de la ruralidad en San Antonio de Areco y alrededores. Para esto es fundamental la formación de los jóvenes sin que tengan que viajar distancias largas para poder estudiar (más del 40% no vive en San Antonio de Areco), y que a su vez esa formación tenga que ver con el potencial productivo de la zona y la demanda de trabajo”.
La Universidad de San Antonio de Areco tiene como antecedente la puesta en marcha desde 2013 del Centro Regional de Educación Superior, espacio de estudio que articuló las propuestas de las Universidades de La Plata, Tres de Febrero, Lanús y Quilmes. En sus inicios contó con setenta estudiantes y hoy son 1.500, con un edificio propio y la inminente ampliación de la infraestructura.
“Ante la gran demanda de estudiantes con horizontes de estudio, trabajamos con el fin de convertir una Universidad nacional que apunte a generar valor agregado a la producción agroindustrial para fortalecer el mercado interno, el trabajo y el consumo como círculo virtuoso a consolidar con el tiempo. Esta Universidad es la concreción de ese objetivo”, sostuvo Durañona.
Las carreras ya vigentes del Centro Regional de Educación Superior están aplicadas a la ingeniería en producción de alimentos de la cadena vacuna, ovina y porcina (de altísima calidad), la administración de haras, la producción equina (una de las más importantes del mundo). Estas actividades, características de esta zona productiva, requieren una mano de obra numerosa y calificada, y para esto una formación acorde a dichas necesidades.
Por otro lado, la carrera en enfermería y en turismo de la Universidad de San Antonio de Areco viene a buscar soluciones a la gran demanda de trabajo que hay en esta región con respecto a esas áreas.
La Unsada cubrirá un área de 600 mil personas, contando los municipios de su cercanía que no tienen Universidad nacional: Capitán Sarmiento, San Andrés de Giles, Baradero, San Pedro, Exaltación de la Cruz y Arrecifes.
Otro territorio, otro perfil educativo
Por su parte, la Universidad Nacional Scalabrini Ortiz tendrá un perfil “fuertemente vinculado a la producción y al comercio”, informaron sus promotores. Esta institución tendrá su sede en la ciudad de San Isidro. Su creación fue consecuencia del trabajo de una Comisión por la Universidad compuesta por organizaciones sociales, sectores de la industria, del comercio y de la producción, llamados al proyecto por la CGT Regional Zona Norte, que dio comienzo a la propuesta en 2006. Su zona de influencia integra los partidos de Vicente López, San Isidro, Tigre, Escobar y San Fernando.
Con un alcance de 70 mil jóvenes, la Universidad Scalabrini Ortiz comenzará a funcionar en 2017 con un enfoque dirigido a generar profesionales de tecnicaturas y licenciaturas relacionadas con la administración de empresas, el turismo, el ambiente y la educación.
Los avances en cuanto a la organización de las dos Universidades se llevarán a cabo una vez que reciban la aprobación de sus proyectos institucionales por parte del Ministerio de Educación de la Nación.