La senadora nacional por la provincia de Buenos Aires, Juliana Di Tullio, se presentó ante la Justicia Federal para constituirse como Amicus Curiae de la medida cautelar presentada por el abogado querellante Pablo Llonto de la megacausa ESMA.
En los últimos días se dio a conocer la noticia de una orden de traslado del Archivo General de la Armada Argentina que habilita la selección y trituración de información allí reservada durante los últimos 150 años. Entre los documentos se encuentran legajos personales, partes informativos, memorias anuales, expedientes de “Justicia Militar”, “documentación histórica” sin especificar, y partidas de nacimiento, casamiento y defunción.
“El intento de triturar 100 años de un plumazo alarma a nuestra sociedad y puede obstaculizar las investigaciones judiciales vigentes”, señaló Di Tullio.
“Esta decisión podría comprometer documentos vinculados no solo a la última dictadura militar, sino también a las causas del hundimiento del Submarino ARA San Juan o al espionaje ilegal practicado a los familiares de las víctimas”, detalló la senadora que sostiene en su escrito que uno de los destinatarios de la orden de traslado es el contralmirante Enrique Antonio Balbi, quien ofició como ‘Vocero’ de la Armada Argentina durante la crisis político-militar derivada del hundimiento del Submarino ARA San Juan.
Según la Corte Suprema de Justicia, el Amicus Curiae (“amigo del tribunal”) es un instrumento que tiene por objetivo permitir la participación ciudadana en la administración de justicia en causas de trascendencia colectiva a fin de resguardar el más amplio debate como garantía esencial del sistema republicano democrático.