Por Alejandro Palladino
La agrupación H.I.J.O.S. provincia de Buenos Aires, que desde hace veinte años milita por los Derechos Humanos en la construcción de la Memoria, la Verdad y la Justicia, dio otro paso en su propósito de ser parte de la Comisión Provincial por la Memoria, mediante la creación de una página web en la que recopila firmas de apoyo para adquirir un carácter más estructural y organizado en su trabajo.
Actores protagonistas de los juicios a los genocidas de la última dictadura cívico-militar, en los que han participado como querellantes, desde H.I.J.O.S. entregaron en agosto de 2015 y en febrero de este año sendos petitorios en los que manifestaron su deseo de ser parte de la Comisión, a partir de la incorporación de un integrante de ese organismo. Ante la falta de respuestas, la tercer medida fue crear una plataforma web compartida en las redes sociales para sumar firmas en un petitorio y presentar luego en la Comisión Provincial.
En ese sitio, que tiene “una respuesta impresionante”, dijeron desde la agrupación que nuclea hijos de desaparecidos y asesinados durante la dictadura, han firmado, entre otros, Guido Carlotto, Cristina Camaño (fiscal del caso Mariano Ferreyra), Pablo Llonto (periodista y abogado de derechos humanos) y los periodistas de Página/12 Sebastián Premici y Carlos Rodríguez.
“Nos corresponde formar parte de ese espacio porque somos una organización que hemos tenido un rol fundamental en el proceso de terminar con la impunidad”, sostuvo a Contexto Lucía García Itzigsohn, integrante de H.I.J.O.S La Plata, quien también contó que desde la organización de La Plata han articulado el interés de formar parte de la comisión con H.I.J.O.S de La Matanza, Lomas de Zamora, Almirante Brown, Bahía Blanca, San Vicente, Campana y Zárate.
“Nos corresponde formar parte de ese espacio porque somos una organización que hemos tenido un rol fundamental en el proceso de terminar con la impunidad”. Lucía García Itzigsohn, H.I.J.O.S. La Plata.
Muchos organismos se acercan a H.I.J.O.S. para solicitarles su participación para trabajar casos de violencia institucional –de género, presos torturados, personas que tienen dudas sobre su identidad–, lo que en algunas situaciones genera dificultades para responder a las demandas. “Nuestra militancia es a pulmón, a través de lo que nosotros mismos generamos”, dijo García Itzigsohn. De aquí que el ingreso de esa agrupación a la Comisión le daría un status más sólido a la militancia de la organización.
“Uno de los tópicos que podemos sumar para oxigenar a la Comisión es nuestra presencia en los juicios de lesa humanidad”, considerando que “la comisión no es litigante en los juicios”, dijo a Contexto Ramón Baibiene, miembro de H.I.J.O.S. La Plata.
Cuando H.I.J.O.S. provincia de Buenos Aires creó la plataforma para sumar firmas, muchos lectores de la página web se sorprendieron al saber que no formaban parte de la comisión de notables encargada de llevar adelante el ente autárquico de la provincia de Buenos Aires, Comisión Provincial por la Memoria.
La CPM es un organismo de derechos humanos que es conducido por una mesa de notables que preside el Nobel de la Paz, Adolfo Pérez Esquivel.
Otro punto que tiene en cuenta desde H.I.J.O.S. provincia de Buenos Aires, es que las comisiones provinciales por la memoria de Córdoba y Chaco, sí tienen como integrantes a referentes de H.I.J.O.S. Incluso en la de Chaco han precedido el organismo en reiteradas ocasiones.
Por último, destacan los militantes de H.I.J.O.S. que la comisión tiene mecanismos de incorporación “ a los que les falta democratización”, teniendo en cuenta que “los honorables”, como se los denomina a los miembros, no tiene caducidad en sus mandatos, por ejemplo. “Estas cosas las pensamos desde afuera y queremos plantearlas desde adentro”, cerró Baibiene.
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Un miembro cuestionado
Uno de los integrantes de la conducción de la CPM es el ex rector de la Universidad de La Plata, Luis Lima, duramente cuestionado por su rol en el 20 de febrero de 1996, cuando militantes estudiantiles y sociales fueron secuestrados en el marco de su movilización contra la Ley de Educación Superior menemista que cambió el estatuto de la Universidad. Ese día fueron detenidos por integrantes de la fuerza de seguridad y encerrados en el cuartel de caballería donde durante la dictadura funcionó un centro clandestino de detención. “Y los que no fuimos detenidos fuimos reprimidos afuera mientras esperábamos la liberación de los compañeros”, dijo Baibiene.
Por otra parte, Luis Lima era dueño de la casona donde funcionaba durante la última dictadura el Destacamento de Inteligencia 101 de La Plata a cargo de Alejandro Agustín “El Gato” Arias Duval, jefe de ese destacamento desde diciembre de 1976 hasta 1979, quien alquilaba la propiedad. Falleció en 2012 y la justicia no llegó a condenarlo por su responsabilidad en 10 homicidios, en la sustracción de menores en tres casos y la privación ilegal de la libertad en 127 casos como caoautor mediato.
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