Por Gabriela Calotti
Durante una masiva asamblea celebrada en el Ministerio de Salud de la provincia, trabajadores contratados y de planta reclamaron la reincorporación de unos cuarenta compañeros despedidos en dos programas sanitarios y en tres hospitales bonaerenses y solicitaron una vez más una reunión con la titular de la cartera, Zulma Ortiz, a quien le recordaron que “a la salud pública la sostienen los trabajadores”, y que “su responsabilidad es preocuparse por los pacientes” afectados por sus políticas de ajuste.
Más de una docena de trabajadores de ambos programas que tenían contrato hasta fines de septiembre o hasta fines de diciembre, recibieron una notificación por correo electrónico sobre la rescisión de los mismos o la no renovación. Delegados gremiales advirtieron que también se están produciendo despidos en tres reconocidos hospitales bonaerenses a los que acuden ciudadanos de toda la provincia, como el Hospital de Niños, el San Juan de Dios y el San Martín. En situaciones precarias están también trabajadores del programa PROFE (ahora Incluir Salud).
“El miércoles 21 fuimos despedidos por la ministra Zulma Ortiz sin justificación alguna. Nos declaramos en estado de asamblea permanente para recuperar nuestros puestos de trabajo y los proyectos que construimos”, afirmaba un locutor desde la radio abierta instalada en un ancho corredor del Ministerio al que se accede por calle 17.
Los integrantes de la junta interna denunciaron durante la asamblea “aprietes” y “amenazas” a los trabajadores para evitar que concurran a las asambleas, y por ello distribuyeron un volante en el cual precisan que la participación es un “derecho constitucional” contemplado en el artículo 39 de la Carta Magna provincial y en el artículo 14 bis de la Constitución nacional.
Laura Muñoz, integrante de la junta interna de ATE, una de las primeras despedidas del RESAPRO (Registro Sanitario de la Provincia), subrayó durante esta tercera asamblea en menos de una semana el respaldo que están recibiendo de trabajadores de planta permanente “para no dar el brazo a torcer frente a esta decisión tan injusta”.
Trabajadores capacitados
“Están diciendo que somos contratos basura y que no servimos para nuestra tarea”, explicó a Contexto Muñoz, mientras cada vez eran más los trabajadores que se sumaban a la asamblea.
Licenciada en Economía, especializada en salud y con una maestría en su recorrido académico, Muñoz, que trabajaba desde hace cuatro años como Coordinadora del Área Estratégica del citado Registro, aseguró que como ella, todos sus compañeros tienen estudios y muchas maestrías.
El desmantelamiento de programas como el RESAPRO, el vaciamiento del Programa SUMAR o el achicamiento en hospitales y centros de salud son una constante desde el inicio del Gobierno neoliberal de Mauricio Macri y de María Eugenia Vidal.
“Esta política de ajuste y vaciamiento es la política que lleva adelante María Eugenia Vidal en la provincia”, sostuvo Mara Di Bernardi, otra trabajadora despedida del RESAPRO, socióloga de profesión, luego de precisar que el viernes siete compañeros cuyos contratos vencían a fines de diciembre recibieron “un mail” anunciándoles que se les rescindía el contrato al 15 de octubre.
Vanina Rodríguez, secretaria progremial de ATE provincia, aseguró ante la nutrida concurrencia entre la cual no faltaron bombos y puteadas de viva voz contra los despidos, que “con esta gestión podemos esperar cualquier cosa. Nadie tiene el trabajo asegurado y le puede tocar a cualquiera”.
Según fuentes gremiales, más de 2.000 trabajadores del Ministerio de Salud en toda la provincia están en situación precaria, aseguró Carolina D’Agostino, delegada general de la junta interna, trabajadora de planta del Ministerio.
Lo mismo ocurre con muchos trabajadores de la salud de las veinte Unidades de Pronta Atención (UPA), varias de las cuales han dejado de funcionar, como la flamante de General Madariaga en cercanías de Pinamar y Villa Gesell, que para este Gobierno era “inviable”, pese a ser necesaria para la población trabajadora de la zona que vive allí de forma permanente.
Coordinador del RESAPRO, Santiago Fresi, también cesanteado, que al igual que sus compañeros llevaba un cartel de color en el que podía leerse “Estoy despedid@”, defendió el trabajo que llevaron adelante en estos años en el marco de las políticas públicas en materia de salud.
Fresi hizo hincapié en el trabajo desarrollado desde 2013 para poner en marcha el Sistema de Información Sanitaria que supone una nueva modalidad para la distribución de drogas oncológicas en la provincia, que se puso en marcha el 8 de agosto pasado.
“Que Zulma Ortiz no nos venga a correr con amenazas. Que se preocupe por su responsabilidad hacia los pacientes. Porque no hay mayor irresponsabilidad que bajar en una semana un registro de drogas oncológicas para pacientes que no tienen obra social en la provincia.”
“Que Zulma Ortiz no nos venga a correr con amenazas. Que se preocupe por su responsabilidad hacia los pacientes. Porque no hay mayor irresponsabilidad que bajar en una semana un registro de drogas oncológicas para pacientes que no tienen obra social en la provincia”, fustigó Fresi antes de leer una carta de agradecimiento por la implementación de ese registro que le envió la oncóloga Marta Viniegra, coordinadora general del Plan Provincial de Control del Cáncer.
“En nombre del equipo del Plan Provincial de Control del Cáncer y del Banco de Drogas de la PBA, quiero expresarles mi más profundo agradecimiento por el arduo trabajo realizado”, afirma esa misiva a la que accedió Contexto.
“No puedo dejar de destacar el gran aporte que representa la herramienta que ustedes han desarrollado para avanzar hacia un cuidado adecuado y oportuno de pacientes con cáncer”, destacó la responsable de dicho Plan de lucha contra el cáncer en la provincia.
Según datos del propio ministerio de Salud bonaerense, se estima que en la provincia de Buenos Aires se producen, anualmente, más de 47.000 nuevos casos de cáncer, y más de 22.400 personas mueren por esa causa. Para 2016, el Programa Provincial de Control de Cáncer, a cargo de Viniegra, calcula que 6.650 mujeres contraerán cáncer de mama; 1.750, cáncer cervicouterino; 3.850 hombres padecerán tumores de próstata; mientras que 4.725 personas de ambos sexos contraerán cáncer de colon y 4.160 de pulmón.
“La ministra está muy mal informada. De nuestro registro depende que a muchos pacientes les llegue la medicación” en diversos puntos de la provincia, sostuvo Fresi, antes de asegurar que en el equipo trabajan compañeros desde hace ocho años “que tienen conocimiento del territorio” frente a una gestión “que en nueve meses no lo conoce”.
Varios de los integrantes de la junta interna advirtieron a los presentes que “Ortiz va a tratar de desacreditarnos, pero sepan que los trabajadores del RESAPRO veníamos a trabajar los fines de semana para poner en marcha el nuevo registro”, aseguraron, mientras algunas voces comentaban que “la ministra no viene los viernes y muchos lunes tampoco… Hoy tenía una reunión con ONG y la suspendió”.