Por Ana Streitenberger y Luciana Aon
Un nuevo BAFICI (Buenos Aires Festival Internacional de Cine Independiente) comenzó este miércoles con una función gratuita y al aire libre en el Anfiteatro del Parque Centenario de El cuento de la princesa Kaguya, una animación dirigida por Isao Takahata. En paralelo se realizó la apertura oficial en el complejo Village Recoleta con la proyección del estreno mundial de El cielo del Centauro, el esperado retorno de Hugo Santiago, quien se convirtió en un director de culto después de haber filmado junto a Jorge Luis Borges y Adolfo Bioy Casares.
Hasta el 25 de este mes se presentarán en el 17° BAFICI más de cuatrocientas películas, organizadas en secciones ya clásicas, como la Competencia Oficial Internacional, con 18 títulos. Se destaca el estreno nacional de La mujer de los perros, película codirigida por la platense Laura Citarella y la actriz y protagonista Verónica Llinás que ya se exhibió en el Festival Internacional de cine de Rotterdam.
El BAFICI es una pantalla imprescindible para el cine argentino. Es el momento en que las películas argentinas ¡agotan entradas!, ¡en venta anticipada! En la difícil relación del público argentino con el cine nacional, el BAFICI demuestra cada año que las pantallas alternativas son fundamentales para muchas de esas películas que se producen cada año con o sin el financiamiento del INCAA (Instituto de Cine y Artes Audiovisuales).
En la Competencia Oficial Argentina, entre otros, cinco directores nacionales estrenarán sus óperas primas. Aquí lo encontramos a Rosendo Ruiz, el realizador oriundo de la provincia de San Juan, que después de sus películas De caravana (2010) y Tres D (2014), presentadas ambas en el BAFICI, se convirtió en uno de los referentes del movimiento que se ha dado en llamar Nuevo Cine Cordobés. En esta oportunidad llega con Todo el tiempo del mundo (2015), una película filmada junto a los alumnos, docentes y no docentes de la escuela cordobesa Dante Alighieri. También compite en esta sección Victoria, la nueva película del director y productor Juan Villegas que con Sábado (2001) se consagró dentro del Nuevo Cine Argentino; y por primera vez en BAFICI, luego de participar en reiteradas oportunidades en el Festival Internacional de Cine de Mar del Plata, José Celestino Campusano estrena su sexto largometraje: Placer y Martirio.
Luego encontramos la programación más arriesgada y novedosa del festival, en esa nueva competencia que se creó hace tres años con el inicio de la dirección artística de Marcelo Panozzo: Vanguardia y Género. En el marco de la Competencia DDHH habrá tres funciones para Walsh entre todos (2015), documental dirigido por Carmen Guarini, que registra el proceso de producción de una gran obra de arte colectiva que nucleó a artistas de diferentes generaciones para recuperar la imagen de los detenidos y desaparecidos durante la última dictadura cívico-militar. Esta sección se completa con títulos latinoamericanos, orientales y europeos en los que se aborda el acceso a los derechos humanos básicos en lugares y contextos muy disímiles.
Más allá del rotundo encanto de las distintas competencias, es central en el BAFICI la gran sección Panorama, que presenta cada año las películas que vienen recorriendo el circuito de los grandes y pequeños festivales de cine del mundo y que nos permiten reencontrarnos con directores reconocidos, con filmografías urgentes, con temáticas imprescindibles. En esta edición se podrá ver allí The look of silence, de Joshua Oppenheimer, quien hace un par de años dejó a todos anonadados con su película The act of killing; aquí continúa con aquella historia de los responsables del exterminio comunista en Indonesia en los años sesenta, pero después de aquella ficción en la que los mismos asesinos recreaban las escenas del horror va a enfrentar a un familiar de una víctima con sus asesinos. Otros nombres que se destacan en la sección son el chileno Patricio Guzman, el portugués Pedro Costa y el coreano Hong Sang Soo.
Otra de las secciones preferidas del BAFICI es Retrospectivas y Focos, en la que se podrá ver por primera vez en nuestro país varias películas de origen peruano. Entre estas se destacan Días de Santiago (2004) de Josué Méndez, en la que se retrata a un ex combatiente contra el Ecuador a quien la ciudad de Lima le parece un nuevo campo de batalla. Otro de los títulos que integrará la programación de Perú: radiografía fílmica de un país será Nadie especial (2013), en la que Juan Alejandro Ramírez ahonda en los interrogantes de las nuevas generaciones de peruanos sobre su identidad en relación con los pueblos originarios.
Por otro lado, el BAFICI se destaca por establecer diálogos imprescindibles entre directores, productores, críticos de cine y diferentes representantes de la industria del cine y del INCAA. Así, entre las varias charlas, presentaciones y seminarios de acceso libre y gratuito, se destaca, el viernes 17, el seminario sobre la restauración y la preservación del material fílmico en Argentina que el director Luis Puenzo compartirá con gerentes de Cinecolor. El caso de estudio será la La historia oficial (1985), una de las películas más emblemáticas de la filmografía argentina sobre el pasado reciente. Para sumar a la agenda, el jueves 23 a las 18.30hs habrá una mesa con Jorge Furtado, el director de O mercado de noticias, que propone un debate sobre el periodismo y el panorama de medios de comunicación en Brasil.
De esta manera y en esta vorágine de una programación explosiva, se desarrollará durante diez días uno de los principales eventos nacionales que nuclea y muestra nuestra industria cinematográfica en diálogo con el cine independiente mundial.
El BAFICI es ese clásico que marca el inicio del recorrido de muchas películas nacionales, que luego continuarán presentándose en los más de cien festivales que se organizan anualmente y en los espacios INCAA de nuestras provincias. Muchas de ellas, por ejemplo, se exhibirán en septiembre y octubre en el FESAALP (Festival de Cine Latinoamericano de La Plata) y FestiFreak (Festival Internacional de Cine Independiente La Plata), respectivamente.
Año tras año, atravesando distintas gestiones, ha ido afirmándose en el otoño porteño como una fiesta para los cinéfilos, que se internan diez días en las distintas sedes del festival para ver ¿tres?, ¿cinco?, ¿siete? películas por día y debatir apasionadamente en los pasillos, las filas, los cafés.
En días en los que la mayor parte de las salas de cine comerciales ofrecen la última superproducción norteamericana (Rápido y Furioso 7, que se estrenó al mismo tiempo en más de la mitad de las pantallas argentinas), espacios como el BAFICI cobran aún mayor importancia, como otras ventanas masivas de las producciones que los argentinos somos capaces de hacer y ver.
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#BAFICI
#Sedes: Village Recoleta, Centro Cultural San Martín, Malba Cine, Planetario, Fundación Proa, Arte Multiplex Belgrano, Alianza Francesa, Village Caballito, Anfiteatro del Parque Centenario, Sala Leopoldo Lugones.
#Entradas: $30 / $25 para estudiantes y jubilados que acrediten su condición.
#LaCharlas: son gratuitas, pero se retira la entrada 30 minutos antes.
#ElDato: los estudiantes con libreta/certificado que acredite su condición pueden ingresar de manera gratuita a las funciones de prensa (se desarrollan en el Village Recoleta entre las 10 y las 14hs y se descarga la programación de la web oficial del festival).
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