Por Roberto Álvarez Mur
El vaciamiento financiero que atraviesa el programa de recolección de residuos “Ciudad Verde” puso a la gestión en medio ambiente de Mauricio Macri en el ojo de la tormenta ante los reclamos que desde hace meses viene realizando la Dirección General de Reciclado (DGREC).
A comienzos de año, el organismo sufrió el traslado indiscriminado de varios de sus trabajadores y recortes de presupuesto. La semana pasada, un reclamo realizado por delegados gremiales y empleados fue reprimido con dureza por efectivos de la Policía Metropolitana.
El gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires insiste con retirar la gestión estatal de las cooperativas de trabajo encargadas del reciclado de residuos. Luego de reiteradas jornadas de reclamo por parte de la junta interna de la DGREC, el Ministerio de Ambiente y Espacio Público decidió echar al ahora ex director general del organismo, Agustín Casal.
Santiago Galeano, delegado de la DGREC, explicó a Contexto: “Después de no tener ningún tipo de diálogo, en este gobierno que se presenta siempre como el gobierno del consenso y la pluralidad, nos mandaron a la Metropolitana para reprimir y no dar lugar ni siquiera a una posición intermedia”.
«el Gobierno de Macri busca el fracaso de las cooperativas para poder llevar la gestión a las empresas privadas.”
Un comunicado emitido por la Junta Interna de Ambiente y Espacio Público, compuesta por Galeano y referentes de ATE y CTA, informó: “Se suspendió la colocación unilateral de campanas verdes cerradas en la vía pública hasta rediscutir con las cooperativas nucleadas en la Federación Argentina de Cartoneros y Recicladores cómo sigue la puesta en funcionamiento del sistema de reciclado con inclusión social”.
En tanto, Galeano afirmó que “un sector del gobierno de la Ciudad mantiene una mirada apuntada a la idea de que las cooperativas tienen que andar solas, autogestionarse, y que no deben tener un acompañamiento estatal”. Y agregó: “Necesitamos un plan de trabajo y una política pública que venga desde el Estado”.
“Nosotros consideramos que se puede pensar a mediano plazo que el servicio público de recolección diferenciada esté en manos de las cooperativas, pero aún no es el momento y la forma. Lo único que está buscando el Gobierno de Macri es el fracaso de las cooperativas para poder llevar la gestión a las empresas privadas”.
En la actualidad, la discusión se encuentra en cuarto intermedio por el porvenir de la Dirección General de Reciclado, como también en la reubicación de empleados trasladados a otras direcciones. La comisión de delegados informó que continuarán exigiendo “la necesidad de que los diecisiete trabajadores que aún no comenzaron a ejercer sus funciones en la otra dependencia continúen en la DGREC, reactivando y fortaleciendo nuestras respectivas áreas a la espera de la designación de la nueva autoridad con la perspectiva de que la Dirección General vuelva a funcionar, pero manteniendo el estado de alerta y cautela ante cualquier giro de la gestión que implique continuar con el conflicto”.
Desde comienzos de año las autoridades del Ministerio insisten en avanzar con la estrategia del vaciamiento. Al comienzo fueron veinte empleados, y luego intentaron con diecisiete más. Por ello se iniciaron las asambleas, movilizaciones y paros que, de no prosperar esta etapa de negociación, continuarán su curso.