Blanqueando los fuertes vínculos con la Sociedad Rural Argentina (SRA), Mauricio Macri designó a Miguel Etchevehere como titular de la cartera de Agroindustria, en reemplazo de Ricardo Buryaile. Representante del agronegocio y uno de los referentes de la Mesa de Enlace que logró frenar a base de cortes en ruta la Resolución Nº 125 de retenciones móviles, el ahora ministro Etchevehere atiende de los dos lados del mostrador.
Gobernando en beneficio de unos pocos, al asumir, Macri avanzó rápidamente con una de sus promesas de campaña: la quita de retenciones al trigo, maíz, sorgo, y la reducción de cinco puntos para la soja (del 35 al 30%), generando así el apoyo de la SRA. “El campo ya arrancó. A partir del cumplimiento de la medida de campaña que había prometido Macri, se generó una gran confianza, y eso se ve reflejado en el sector agropecuario con inversión y generación de empleo”, consideró en su momento Etchevehere.
Los Etchevehere, conocidos radicales aliados al macrismo, tienen un prontuario extenso con su empresa Las Margaritas S.A., integrada por cinco estancias en Entre Ríos, sumando más de 5 mil hectáreas. En el libro De patrones y peones, el periodista Sebastián Premici detalla las diferentes causas que tiene la familia del ahora ministro. La primera de ellas es la explotación laboral rural donde dos hermanos, Sergio y Antonio Cornejo, estuvieron prácticamente esclavizados durante 38 años.
Las otras causas incluidas en el libro de Premici por las que Etchevehere está imputado, en una de las cuales tiene pedido de indagatoria, son las de evasión tributaria y de administración fraudulenta, tanto en la Justicia entrerriana como en la federal, por el mismo hecho vinculado con Las Margaritas. Esto, “por la toma de préstamos (otorgados por el Banco Nación bajo la gestión de Carlos Melconián) subsidiados para la exportación agropecuaria que terminaron en sus cuentas personales y que fueron derivados a un financista como forma de pago de una estructura que había puesto dicho financista para el vaciamiento de una sociedad y lograr la evasión del fisco”, explicó a Contexto el autor de De patrones y peones.
Desde la Corriente Agraria Nacional y Popular (CANPO) apuntaron a la designación del nuevo ministro: “Esto significa que la sociedad rural vuelve a tener un rol que hacía muchísimo tiempo que no tenía. De hecho, la sociedad rural puso todos los ministros de Agricultura en todo el modelo agroexportador y la década infame. Ahora vuelve a tener ese rol”, explicó a Contexto Sergio Dumrauf, referente de CANPO, quien consideró que Etchevehere va a profundizar las medidas tomadas por su predecesor.
Cabe recordar que en su paso por el Ministerio, Buryaile (quien ahora fue premiado con el cargo de embajador de la Unión Europea) se encargó de avanzar con la Secretaría de Agricultura Familiar, convirtiéndola en una subsecretaría, disminuyendo así recursos y presupuesto, al tiempo que modificó las condiciones del Cambio Rural, dejando así a los trabajadores de la tierra sin asesoramiento técnico.
El nuevo ministro no da demasiadas esperanzas a este sector, que ya salió a criticar su designación. “Esto para nosotros es un pelotazo en contra; funcionarios de este tipo son los que han ninguneado toda la vida la agricultura familiar”, dijo a Contexto el referente Néstor Villacorta de la Mesa de Pequeños Productores de la región.
La Sociedad Rural tiene “una lógica más oligárquica, más del negocio, más del patrón de estancia, esto claramente va a poner a los trabajadores rurales y a los pequeños productores en un lugar mucho más desfavorecido de lo que viene siendo hasta ahora”, consideró Dumrauf. “Para decirlo en criollo: nosotros somos los negros y ellos son los grandes terratenientes y los patrones de estancia”, agregó Villacorta.