En una nueva maniobra para profundizar la persecución política iniciada con el encarcelamiento de Milagro Sala hace más de dos años, el Poder Judicial de Jujuy decidió esta vez ordenar la detención del exgobernador de la provincia, Eduardo Fellner, como parte del supuesto entramado fraudulento entre la organización social Tupac Amaru y la ejecución de un plan de viviendas durante la anterior gestión.
La orden, enmarcada en la llamada “Megacausa”, posee carácter arbitrario, ya que no se conocen los motivos ni existen pruebas concretas para privar de su libertad al exmandatario. La causa por la que son detenidos fue abierta en 2016 y los acusados se atuvieron a derecho desde entonces. Si se computan los cargos por los que tanto Fellner como varios actores más fueron imputados, la pena daría como resultado 105 años de prisión. Ninguno abandonó la provincia y el propio Fellner ayer viajó desde Buenos Aires, donde estaba participando de reuniones por la intervención del PJ, y fue trasladado a la Unidad N° 7 del Penal de Alto Comedero.
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Por su parte, desde el sector político disidente sostienen que este episodio es un eslabón más en la cadena de persecución política que se ha desatado en la provincia desde la llegada de Gerardo Morales al poder.
“A la tribuna radical, a la tribuna de votantes de Cambiemos, esto les agita el corazón. Esto no es más que una cortina de humo gigante para tapar todos los problemas por los que atraviesa la provincia”, dijo a Contexto el legislador jujeño de Unidos y Organizados Juan Manuel Esquivel. Y sostuvo: “En salud ha desestructurado la prestación de centros de atención, a los trabajadores públicos apenas les han aumentado un 5% del sueldo, la obra pública está parada, el plan Belgrano –prometido por Nación– está totalmente desdibujado porque no ha llegado ni un peso. En ese escenario, qué mejor que montar todo este show para distraer”.
En esta misma línea, al tomar repercusión pública, varias voces reaccionaron contra la orden de detención. “El juez de Jujuy Isidoro Cruz utiliza como argumento contra Fellner que, según Migraciones, viajó varias veces a Panamá, ‘que, como se sabe, es un paraíso fiscal’. Con ese criterio va todo el gobierno preso. No le encontró sociedad ni cuenta”, expresó el periodista Raúl Kollman a través de las redes sociales.
Asimismo, el diputado de Unidad Ciudadana y referente de la CTA Hugo Yasky agregó: “El juez sospecha que Fellner desvió dinero a Panamá y por eso lo detiene. Con ese criterio, el gobierno nacional quedaría acéfalo”.
El juez sospecha que Fellner desvió dinero a Panamá y por eso lo detiene.
Con ese criterio, el gobierno nacional quedaría acéfalo. pic.twitter.com/3WcGXbQi5h— Hugo Yasky (@HugoYasky) April 12, 2018
La denuncia fue presentada por el dirigente de la Coalición Cívica de Jujuy, José María Albizo, por presuntos delitos de “encubrimiento agravado e incumplimiento de los deberes de funcionario público, asociación ilícita y fraude a la Administración pública por administración infiel”. La denuncia habla de una supuesta complicidad del entonces gobernador en el manejo de fondos públicos destinados a la construcción de viviendas con la organización Tupac Amaru.
Se pidió la captura también de su exministro de Tierra y Vivienda, Luis Cosentini, el extitular del Instituto de la Vivienda, Lucio Abregú, la escribana de la organización Tupac Amaru, Claudia Trenque, y los integrantes de la Unidad Ejecutora Provincial Héctor Carrizo y José Mercado.
Cabe destacar que la persecución a cualquier actor involucrado con la militancia política disidente al oficialismo es constante. Esta semana, el dirigente de la Tupac Amaru Santiago Hamud fue hostigado por la policía en el marco de un operativo del que no se tienen razones concretas. Un grupo de efectivos que decían ser de la Policía Federal se presentó en el domicilio de Hamud exigiendo su presencia; al no encontrarlo, se dirigieron a las casas de familiares en distintas partes de la región. Al conocer la situación, el militante de la Tupac se presentó en la sede de la Policía Federal y no encontraron ninguna orden de detención en su contra.
Santiago fue custodiado hasta no hace mucho tiempo debido al testimonio de su abuelo, Hugo Condori, testigo clave en un juicio por crímenes de lesa humanidad.
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