Mientras Mauricio Macri pelea por mejorar una imagen cada vez más asfixiada por la economía y el descontento social, volvió de dejar su huella en una de las tantas empresas que visitó para felicitarlos y desearles “éxito”. Se trata de la firma Noroghi, visitada por Macri en septiembre y cerrada por su dueño en enero. Tras prometer aumentar la planta de empleados, el empresario dejó de pagar los sueldos y ahora todos están virtualmente despedidos.
Desde entonces, los trabajadores y trabajadoras de la planta de Nueva Pompeya comenzaron a difundir el caso de esta empresa que, bajo sospechosas circunstancias, comenzó a acumular deudas, a no cumplir objetivos laborales y, finalmente, cerrar sus puertas y dejar a sus empleados en la calle. Muchos de ellos debieron cobrar sueldos atrasados, indemnizaciones en partes, y algunos todavía siguen a la espera de compensaciones.
«Cuando nos vino a visitar el Presidente en septiembre, ya nos estaban pagando los sueldos tarde»
“Desde hace dos meses nos vienen diciendo que ‘va a entrar una plata, que la situación se va a regularizar’, pero lo cierto es que no hay ningún avance. Cuando nos vino a visitar el presidente en septiembre, ya nos estaban pagando los sueldos tarde, después en diciembre nos dimos cuenta de que no estaban pagando los aportes porque nos cortaron la obra social a todos”, dijo a Contexto Agustina Pereyra Núñez, una de las tantas trabajadoras en vilo por la situación de la empresa.
La firma Noroghi, vigente desde hace unos cinco años, se dedicaba al ensamble de productos chinos para ser vendidos a marcas locales. En octubre pasado, el presidente estuvo en el lugar como parte de sus recorridas «relámpago» para difundir en medios, donde prometió que «sería un éxito». El fundador de la empresa, Fabián Colussi, aseguraba que también exportarían a México y que aumentarían la dotación de empleados de 132 a 200. Dos meses más tarde dejó de pagarles el sueldo.
https://www.facebook.com/mauriciomacri/videos/nada-m%C3%A1s-lindo-que-tener-un-trabajo-que-genere-ganas-de-participar-y-aportar/879098058962923/
“En enero cortamos la producción porque ‘querían solucionar los problemas para empezar a trabajar diez puntos’. A partir de ahí no volvimos a trabajar, ni nos pagaron y no nos comunicaron nada”, sostuvo Pereyra Núñez. Sólo los operarios de planta, que representan la mitad, se encontraban bajo convenio sindical a través de la UOM.
Por otro lado, las sospechas crecen alrededor de esta firma, que anunció falsas exportaciones y cuyo nombre se vio asociado con un equipo de fútbol de Carlos Casares patrocinado por el empresario de la soja Gustavo Grobocopatel. Todos estos elementos fueron negados por la firma.
No es la primera vez que Macri se muestra en videos y fotos con entusiasmo en empresas y comercios de dudosa estabilidad que, a corto o mediano plazo, terminan siendo víctimas de la cruda realidad económica argentina. Lo sucedido en Noroghi es similar a lo ocurrido a “Puerta de Hierro”, un microemprendimiento de calzados situado en La Matanza que fue visitado por María Eugenia Vidal y Juliana Awada, la primera dama.
“En enero cortamos la producción porque ‘querían solucionar los problemas para empezar a trabajar diez puntos’. A partir de ahí no volvimos a trabajar»
Días después de la visita, una investigación de Infocielo.com evidenció que tal taller no figura en ningún tipo de buscador y tampoco es conocido por los comerciantes más antiguos de la zona. Las sospechas crecieron alrededor de una posible “puesta en escena” para la visita de Vidal y Awada.
De la misma manera sucedió con el famoso video de Raúl, el empresario pyme rosarino que se volvió viral a través de las redes sociales de Macri, cuando mencionaba su apoyo a la gestión “a pesar de no estar vendiendo desde hace cuatro meses”. Días después, Raúl dijo estar arrepentido del video y que su figura fue sacada de contexto y utilizada.
