Los organismos de derechos humanos entraron en alerta frente a los datos que comenzaron a circular en las últimas horas respecto de las condiciones en que se encuentra la penitenciaría federal de Marcos Paz. Sin agua ni calefacción desde hace cuatro días, advierten que los internos han tenido que comenzar a “tomar agua del extintor de incendios”, entre ellos, el exministro de Planificación Federal, Julio De Vido, actual preso político del gobierno de Mauricio Macri.
Los datos cobraron relevancia tras la divulgación de alerta durante la tarde de ayer por parte de la abogada Alessandra “Lali” Minnicelli –esposa del exministro–, quien advirtió sobre las condiciones de los internos en diferentes foros.
«Supe que desde el fin de semana estaban sin agua en algunos sectores, y que sólo por momentos podían tomar un poco del agua que tienen de emergencia para incendios»
“Supe que desde el fin de semana estaban sin agua en algunos sectores, y que sólo por momentos podían tomar un poco del agua que tienen de emergencia para incendios. Hay una bomba que no funciona que provee a todo el complejo”, dijo a Contexto la propia Minnicelli, quien ayer por la mañana recibió la información de que tampoco estaba funcionando la calefacción en los pabellones.
“En un contexto de hacinamiento, y ahora de frío, el riesgo es grande. Uno imagina la potencialidad del riesgo en una población de 1.500 personas”, expresó la abogada respecto de la situación que atraviesa el pabellón 7 del módulo 5 desde el fin de semana.
En tanto, entidades como la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos o la Liga por los Derechos del Hombre en Argentina ya habían tenido contacto con la situación que atraviesa la penitenciaría, que ya presentaba estos problemas desde el sábado. En esta misma línea se plegó el Comité por la Libertad de los Presos Políticos, que también se pronunció al respecto.
“En estas condiciones que fueron señaladas también se encuentra el militante preso Daniel Ruiz. Esto es algo que se reitera cada dos por tres en las cárceles, pero que se agudizó en estos días”, dijo a Contexto la gremialista y referente del Comité, Estela Díaz, en referencia al dirigente petrolero apresado por protestar contra la reforma previsional en 2017. “Más allá de la injusticia bajo la que están detenidos los presos políticos, también corre para el resto de los presos, que están sufriendo la desidia del sistema penal”, agregó Díaz.
“No hay expectativas de cuándo arreglen las bombas de agua, porque no hay presupuesto. Siguen tomando agua de un extintor. Ante la violencia que hay por hacinamiento, si llegara a haber un motín, que puede provocar un incendio, no se va a poder apagar”, alertó ayer Minnicelli a través de un mensaje a los foros de derechos humanos, donde aclaró que buscaría la manera de presentar un recurso de habeas corpus ante la situación.
Cabe destacar que en el penal de Marcos Paz también se encuentran alojadas figuras como el exreferente de la organización Quebracho, Fernando Esteche, implicado en la causa que vincula el mentado pacto de entendimiento con Irán con una presunta obstrucción a la investigación por el atentado a la AMIA; causa en la que también se conectó al dirigente Luis D’Elía, quien luego también fue a parar a Marcos Paz.
«En estas condiciones que fueron señaladas también se encuentra el militante preso Daniel Ruiz. Esto es algo que se reitera cada dos por tres en las cárceles»
El propio cuñado de De Vido, Claudio Minnicelli, también detenido en Marcos Paz, incluso sufrió un infarto mientras se encontraba alojado en el penal a mediados de abril, por lo que debió ser trasladado de urgencia a un hospital de General Rodríguez.
“El escenario de no tener calefacción ni agua, en un lugar donde hay hacinamiento, y mi marido estando ahí, no puedo más que pensar el enorme riesgo. Esperemos que haya una determinación judicial que pueda revisar y resolver de inmediato este problema”, aseguró la abogada.
