Por un cortocircuito en una bomba que abastece los tanques de agua, todos los sectores del Hospital San Roque de Gonnet permanecieron sin agua desde las siete de la mañana de este viernes hasta entrada la noche.
Los trabajadores que allí se desempeñan salieron de urgencia a buscar bidones para abastecer a los internados. Las emergencias continuaron funcionando, pero el resto de la atención se vio suspendida, incluso las cirugías.
Georgina López, delegada general de ATE en el hospital, afirmó a este medio que a las 19 hs de este viernes el agua todavía no había vuelto. La empresa de mantenimiento se encontraba haciendo las reparaciones e investigando los motivos del corto.
«Nos dijeron que el cortocircuito se produjo por un factor externo, derivado de los generadores ubicados en esta zona para abastecer a la población por el apagón»
«Nos dijeron que el cortocircuito se produjo por un factor externo, derivado de los generadores ubicados en esta zona para abastecer a la población por el apagón», indicó, en base a la información que dieron los técnicos a última hora de ayer. La delegada detalló que el hospital posee dos bombas. Una de estas se quemó y la restante no dio abasto.
Ante la falta del servicio, los propios trabajadores en función socorrieron la situación. Lo mismo hicieron otros empleados del hospital que se encontraban en sus casas y asistieron para ayudar.
«Esto generó trastornos por salubridad en los baños y también en el sector de rayos, donde se reprogramaron los turnos incluso también para las urgencias», dijo a Contexto Maxi Egea, médico de la guardia presente en su puesto mientras no había agua en el San Roque.
«Por la falta de respuesta de la gobernadora, los hospitales funcionan con lo que tienen. La salud pública la sostenemos entre los trabajadores y la buena predisposición desde adentro, porque desde afuera no tenemos respuestas. Hay falta de personal porque no hay nombramientos. Este hospital triplicó su atención por problemas de otros hospitales», concluyó la gremialista.
