El primer equipo femenino de Villa San Carlos recibió un numeroso apoyo de figuras del ambiente futbolero en su pelea por continuar jugando en la máxima categoría. En este marco, ayer enviaron una nota a la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) donde solicitaron una prórroga para inscribirse y tener así margen de tiempo para conseguir los sponsors necesarios antes de que empiece el torneo, el 1° de septiembre.
El pedido ahora está en manos de la AFA, que tendrá que responder si confirma la prórroga por cuatro días más. Para las jugadoras ahora el objetivo es conseguir el dinero necesario para el pago de cargas sociales y aportes de las ocho profesionales reglamentarias. Hasta ahora son tres los sponsors confirmados, aunque los montos no son suficientes.
“Estamos haciendo lo posible para llegar a una solución, sabemos que no se haría descender de esta manera a un equipo masculino”
Fue luego de que el presidente y vicepresidente de la institución de Berisso, Juan Carlos Tocci y Marcelo Molina, respectivamente, decidieron la semana pasada hacer descender al club a la segunda división con el pretexto de “no poder solventar los gastos económicos que conlleva la profesionalización del fútbol femenino” y porque “ciertas jugadoras pueden ocasionar problemas a futuro”, según expresaron las futbolistas en un comunicado que distribuyeron en redes.
“Estamos haciendo lo posible para llegar a una solución, sabemos que no se haría descender de esta manera a un equipo masculino”, dijo a Contexto Magdalena Alberti, arquera del equipo que comenzó a participar en los torneos de AFA en 2013, ascendió en 2016, y en la última temporada, con la base de su equipo de reserva, consiguió mantener la categoría a pesar de que sus anteriores titulares y cuerpo técnico emigraron para conformar el plantel de Gimnasia y Esgrima de La Plata.
El fútbol femenino se profesionalizó este año. Los clubes deben hacerse cargo de pagar las cargas sociales y aportes de ocho profesionales y el cuerpo técnico. De los sueldos se encarga la AFA. Mientras que las jugadoras ponen de su bolsillo -tanto en la A como en la B- los gastos operativos, esto es, personal policial y médico, ambulancias y transporte.
“El presidente nos dijo que podrían dar marcha atrás si nosotros conseguíamos la manera de solventar los gastos, ya que el club no puede hacerse cargo. Hasta ahora conseguimos tres sponsors chicos, pero no son suficientes”, señaló Alberti. “A pesar de la inexperiencia que teníamos, mantuvimos la categoría. Nos costó muchísimo como para que nos bajen el pulgar así y nos quieran hacer descender desde afuera de la cancha”, añadió la arquera.
“Por el esfuerzo humano y deportivo realizado, estamos frente a una injusta decisión. Hoy pedimos la colaboración de nuestros hinchas, socios y toda la comunidad»
“Por el esfuerzo humano y deportivo realizado, estamos frente a una injusta decisión. Hoy pedimos la colaboración de nuestros hinchas, socios y toda la comunidad para que entiendan el sueño que estamos buscando hace mucho tiempo y que es permanecer en la máxima categoría del fútbol femenino”, afirmó por su parte Leila Encina, capitana del equipo, a través de Twitter.
Las jugadoras recibieron el apoyo de reconocidas jugadoras, como Macarena Sánchez, que integra el primer equipo de San Lorenzo de Almagro y cuya pelea fue clave para la profesionalización; Ruth Sánchez, que se desempeña en el fútbol español; los jugadores de Estudiantes y Gimnasia Mariano Andújar y Lucas Licht; y los exjugadores Gastón Sessa y Pablo Lugüercio.