Por Pablo Pellegrino
La Oficina de Presupuesto del Congreso de la Nación (OPC) presentó el informe sobre ejecución presupuestaria del cual se desprende que la jubilación mínima perdió desde julio del pasado hasta el mismo mes de 2019 un 13,1% de poder adquisitivo. El registro de ese mes fue una retracción del 8%.
El informe destaca que las caídas de junio y julio son más reducidas que las de meses anteriores, ya que se registraron picos de -19,7% en el mes de noviembre del año pasado. Sin embargo, la baja sigue siendo altísima, más si se tiene en cuenta que la mínima (49% de los jubilados la perciben) no llega a cubrir la canasta básica.
“Si se analiza el comportamiento del haber mínimo jubilatorio ($11.528), se advierte que registró en el mes de julio una pérdida del poder adquisitivo del 8,0% respecto a igual mes del año pasado»
“Si se analiza el comportamiento del haber mínimo jubilatorio ($11.528), se advierte que registró en el mes de julio una pérdida del poder adquisitivo del 8,0% respecto a igual mes del año pasado, dando lugar a una contracción interanual del 13,1% en el acumulado de los últimos 12 meses. No obstante, junio y julio presentan un recorte en la reducción registrada en los meses anteriores”, sostiene en ese sentido la OPC.
La Anses ya informó que para septiembre, en el reajuste del haber jubilatorio trimestral, la mínima aumentará en un 12,2% que, de mantenerse la diferencia que persiste hasta hoy o reducirse, podría llegar a empardar el aumento de precios.
De todas maneras, a pesar de las posibilidades de empatar un partido en el que hace rato pierden, la mínima está todavía lejos de poder cubrir la canasta de jubilados. Según el último informe de la Defensoría de la Tercera Edad de la Ciudad de Buenos Aires, la canasta se ubicó por encima de los 30.000 pesos, por lo que un matrimonio que percibe el haber mínimo (actualmente en $11.528) no llega a cubrir los gastos calculados por la defensoría para vivienda, medicamentos, alimentos y transporte.
El caso de los medicamentos también tiene una incidencia mayúscula en el caso del sector pasivo. Un informe del Centro de Economía Política Argentina (CEPA) señala que ese rubro tiene sucesivos aumentos por encima del promedio general del IPC, y en el acumulado desde diciembre de 2015 cuando asumió la gestión de Mauricio Macri, tuvo incrementos del 340% promedio.
La fuerte caída del consumo que afecta sobre todo a los sectores más vulnerables, entre ellos, los beneficiarios de jubilaciones y pensiones, llevó al gobierno a renovar el programa de créditos con la tarjeta Argenta. El programa, que originalmente comenzó en 2017 (previo a las elecciones) se relanzó a comienzos de este año y, según el CEPA, se incrementó sensiblemente la cantidad de créditos solicitados por los jubilados. “Las y los jubilados y pensionados incrementaron sensiblemente su endeudamiento, pasando de 14% (935 mil casos) a 22% (1,6 millones) de beneficios endeudados”, advirtieron.