A veintiséis días de comenzado el mes, la Municipalidad de La Plata aún no cargó las tarjetas alimentarias, una herramienta central para miles de familias en situación de vulnerabilidad y para los cientos de comedores comunitarios de la ciudad. La denuncia de las organizaciones sociales advierte que los fondos para las tarjetas ya fueron depositados por Provincia, por lo que responsabilizan directamente al intendente Julio Garro por la demora.
«Las tarjetas deberían cargarse entre el 5 y el 10 a más tardar, y al día de hoy no las han cargado. Desarrollo Social nos plantea ya desde hace casi diez días están en su despacho para firmar», explicó a Contexto Edgardo Jalil, referente de la Agrupación Evita y de la Confederación de Trabajadores de la Economía Popular (CTEP). «Nuestros comedores están por colapsar», destacó.
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Las organizaciones que a nivel nacional fueron las impulsoras de la declaración de la emergencia alimentaria, exigen en este contexto que el jefe comunal sea coherente con la sanción y que no solo dé su firma, sino que también les brinde una reunión para garantizar un aumento en las tarjetas ante la fuerte escalada inflacionaria.
«estamos comprando menos de la mitad de lo que comprábamos los meses anteriores producto de la devaluación y el aumento de los precios de los alimentos. Por ende, pedimos una reunión urgente»
«Necesitamos poder discutir de qué forma se va a poder resolver el aumento producto de la inflación: estamos comprando menos de la mitad de lo que comprábamos los meses anteriores producto de la devaluación y el aumento de los precios de los alimentos. Por ende, pedimos una reunión urgente: esta situación no puede esperar», sostuvo Jalil. «Necesitamos que el intendente deje de mirar para otro lado, porque son situaciones de extrema urgencia», agregó.
Dos estudios recientes dan cuenta de la delicada situación alimentaria que atraviesa La Plata. Esta semana, el movimiento Somos Barrios presentó su informe sobre el Indicador Barrial de Salud Nutricional, en el que detalla que el 48,45% de los niños y niñas de la región padece cuadros de malnutrición, entre bajo peso y sobrepeso, superando por seis puntos la media provincial.
Días atrás, el Consejo Social de la Universidad Nacional de La Plata adelantó datos del Relevamiento de Sitios de Distribución de Alimentos (SDA) de la región. Las cifras dejan entrever un escenario preocupante para la ciudad, con cada vez más personas recurriendo a merenderos y con comedores comunitarios desbordados ante la alta demanda y la falta de productos.
Según detalla la investigación, que pone el ojo en 116 comedores y merenderos de catorce organizaciones que forman parte del Consejo Social de la UNLP, en 2018 brindaban comida para 7.615 personas por día. Si bien los números finales de 2019 aún no están cerrados (el informe está en ejecución), nueve de cada diez instituciones, en agosto de 2019, vieron incrementada fuertemente su demanda, encontrándose desbordadas.
Otro dato llamativo es la emergencia de comedores y merenderos relevados. El 67% de estos sitios comenzó sus actividades a partir de 2016, mientras que de 2010 a 2015 data el 15%, y de 2009, el 18,3%. Es decir que la mayoría de los SDA abrieron bajo el gobierno de Julio Garro en La Plata, María Eugenia Vidal en provincia y Mauricio Macri en nación.
En este marco, las organizaciones sociales exigen que las autoridades se hagan responsables. «Hacemos un llamado al intendente Garro para que se haga cargo, volvemos a plantear que con el hambre de nuestros pibes no se jode y que necesitamos que se resuelva ya la situación: que brinde una respuesta urgente de acá a diciembre, que le toca gobernar, para poder paliar la enorme crisis que ellos mismos han generado con sus políticas económicas», concluyó Jalil.