Desde el Astillero Río Santiago de Ensenada rechazan una iniciativa del gobierno nacional para importar un buque antártico de 125 metros de eslora por un costo de 195.500.000 dólares. Sostienen que esa embarcación se podría construir en los astilleros nacionales y por menor valor.
Se trata del Decreto 668/2019 publicado el 27 de septiembre de 2019. «Es menester autorizar al Estado mayor general de la Armada, dependiente del Ministerio de Defensa, a realizar una operación de crédito público en los términos del artículo 60 de la Ley N° 24.156 y sus modificaciones para la adquisición de un Buque Logístico Polar, a los fines de contar con eficientes medios de apoyo a la actividad antártica», afirma el decreto.
El Astillero Río Santiago, el Astillero Tandanor, la Comisión Nacional de Energía Atómica (CONEA), el Sindicato de Trabajadores de Talleres y Astilleros Navales y el Departamento Ingeniería Naval de la UTN de Buenos Aires expresaron su repudio a la decisión de la gestión de Mauricio Macri y a su política en materia industrial de los últimos años. Fue en una charla en la Vieja Estación de Ensenada días atrás. Allí también propusieron construir el buque con proyectos y mano de obra nacionales.
«Desde que asumió, Macri tuvo una actitud de entrega nacional con respecto a la industrial naval. Compró patrulleras a Francia y lanchas a Israel. Eso se pudo haber producido en Argentina. Ahora pasa lo mismo pero con el buque polar», dijo a Contexto Martín Ezquerra, delegado de ATE Ensenada en el Astillero Río Santiago.
Desde la empresa estatal argumentan su posición de acuerdo con el artículo 15 de la Ley 27.418 de promoción de la industria naval, sancionada en 2017. Esa normativa fomenta la construcción de buques y embarcaciones en el país para la provisión del Estado.
La semana próxima, desde el gremio planean realizar una movilización a La Plata para pedir una reunión con autoridades provinciales y nacionales. «El tema del buque es el centro del reclamo, pero también tenemos problemas de insumos para terminar las construcciones que tenemos», dijo Ezquerra.
Tras la profundización del conflicto del gobierno con el sindicato ATE Ensenada durante el año pasado, que incluyó una feroz represión en Plaza San Martín y la posterior toma del Ministerio de Economía, por la jugada de Cambiemos para avanzar en la privatización o el cierre de la empresa, este año el clima se calmó. La provincia abasteció de trabajo al Astillero, sobre todo a partir de la construcción de puentes metálicos en distintas localidades bonaerenses. Sin embargo, piden mayor trabajo en la construcción de buques.