Una vez más el intendente negó la seguridad para la marcha provincial del orgullo. Sin garantías, la organización decidió suspenderla y cargó duro contra el jefe comunal.
Al igual que el año pasado, el intendente Julio Garro negó los mecanismos de seguridad para la «6° Marcha del Orgullo TLGBI de la Provincia de Buenos», que se desarrolla año a año en La Plata. En este marco, las organizaciones convocantes debieron suspender el evento, al entender que podría suponer un riesgo para quienes participen.
Vale recordar que el año pasado fue similar. Priorizando el recital de Roger Waters y una feria gastronómica en la República de los Niños, el intendente rechazó la realización de la marcha alegando una falta de personal de seguridad. A pesar de ello, la Comisión Organizadora decidió salir a la calle y responsabilizó al Ejecutivo municipal de cualquier hecho de violencia. Este año, con el recrudecimiento de la violencia a feriantes y a la comunidad trans/travesti, decidieron suspenderla.
«Nos vemos obligades a suspender la marcha debido a la falta de respuesta por parte del Intendente de La Plata Julio Garro, quien no brinda la seguridad para quienes marchamos, como tampoco las garantías para la feria que se iba a realizar en el marco de la marcha», anunciaron a través de un comunicado.
Hace dos semanas, desde la Comisión Organizadora presentaron una nota informando de la movilización y el recorrido, cumpliendo así en tiempo y forma con las vías administrativas. Sin embargo, otra vez se toparon con la negativa, que, según denuncian, va en sintonía con la falta de políticas públicas del Municipio de Julio Garro a la comunidad.
«La ciudad de La Plata, capital de la Provincia de Buenos Aires, es el laboratorio del accionar policial desmetido hacia el colectivo TLGBI, particularmente al colectivo trans y travesti. Esta negativa no es un hecho aislado, sino que responde a un contexto represivo del actual gobierno de Mauricio Macri, Vidal y Garro», apuntaron desde OTRANS, quienes velaron por la necesidad de un nuevo gobierno «inclusivo, que la diversidad esté en sus agendas y que promueva políticas públicas para nuestro colectivo».
La titular de OTRANS Argentina y del Frente de Organización TLGBI La Plata, Berisso y Ensenada, Claudia Vásquez Haro, se pronunció también al respecto. «Estas prácticas no son desconocidas por parte del gobierno de turno. Desde que asumieron como gobierno vivimos un retroceso exponencial en relación a nuestros derechos básicos. Recordamos que en la campaña pasada Julio Garro dijo que no daría trabajo a una travesti porque sería como avalar la delincuencia, y fue por más, nos trató de enfermas», recordó en Agencia Sudaka.
En este marco, Vásquez Haro consideró que esas declaraciones fueron «la antesala a lo que vendría después» y denunció el intento de censura y prohibición de expresar los reclamos del colectivo. «Exhortamos a toda la sociedad a acompañar nuestro reclamo a poder marchar libremente y sin ningún tipo de amenazas que pongan en peligro la integridad de quienes participamos año a año en las marchas, con profunda alegría pero sobre todo con un reclamo profundamente político, de exigirle al Estado y decirle Basta de Violar los Derechos Humanos del Colectivo TLGBI de la provincia de Buenos Aires y en su capital que es La Plata», concluyó.
El oportunismo de Garro
En plena campaña electoral, el jefe comunal prometió que sumará a su Gabinete a una persona trans, una maniobra política en busca de sumar votos de un sector al que siempre le dio la espalda. Al respecto, desde OTRANS cuestionaron la decisión.
«Denunciamos al intendente Julio Garro por el uso de nuestras identidades con fines políticos», sostuvieron, al tiempo que recordaron que el jefe comunal afirmó que no les daría trabajo, pero sí asistencia psicológica, «patologizando nuestras identidades».
«Ayer cuando anunciaba esto para acumular más votos en su campaña, en el Municipio nos decían que la marcha no estaba autorizada y que no contábamos con la seguridad correspondiente», apuntaron.