En medio de una fuerte emergencia económica, sanitaria y social, el gobierno bonaerense busca afianzar el diálogo con las organizaciones sociales que ya comenzaron a hacer oír sus demandas ante el fuerte impacto de la crisis por COVID-19 en los sectores más vulnerables. Durante la jornada de ayer –que incluyó manifestaciones en varios puntos del país–, la gestión de Kicillof logró concretar una instancia de conversación con representantes del sector.
En concreto, fue el ministro de Desarrollo de la Comunidad de la provincia, Andrés Larroque, quien recibió a referentes de diversos movimientos populares para trazar un diálogo y coordinar el trabajo de asistencia en los territorios más relegados del distrito. Allí se ubicaron voceros del Frente de Organizaciones en Lucha (FOL), MTD Aníbal Verón, Frente Popular Darío Santillán, entre otros.
«Las organizaciones plantearon la situación de emergencia en los territorios por el crecimiento de la demanda de los comedores y la necesidad urgente de trabajo, entre otras cosas», comunicaron desde el ministerio bonaerense. La urgencia sobre la distribución de comida para instituciones, como también la necesidad de reactivar el trabajo, son puntos que los movimientos barriales han reclamado desde las primeras semanas de la cuarentena.
Cabe señalar que el propio Larroque, apenas llegado a la cartera de Desarrollo de la Comunidad, había mantenido un primer acercamiento con referentes de las organizaciones populares, como Juan Grabois (UTEP), Daniel Menéndez (Barrios de Pie) y Emilio Pérsico (Movimiento Evita). En tanto, ante la advertencia de una manifestación de reclamo a nivel provincial, el ministro decidió abrir el diálogo para llegar a un consenso general de cara a las próximas semanas.
«Hay un faltante muy importante de comida en comedores y merenderos y necesitamos una respuesta urgente del gobierno. Todo esto conlleva a un malestar muy grande para llevar adelante esta pandemia», dijo a Contexto Walter Córdoba, referente de Somos-Barrios De Pie, organización que en los últimos días estuvo llevando adelante ollas populares en distintos puntos de la provincia de Buenos Aires para visibilizar la delicada situación que atraviesan múltiples barrios.
«Entendemos que esta es una situación difícil y excepcional, pero necesitamos que el gobierno de provincia y nación nos garantice fideos, arroz, aceite. Lo básico para cubrir la demanda de los barrios. La gente no tiene trabajo, no tiene changas, miles de familias necesita asistir a los merenderos, siempre manteniendo el distanciamiento social, obviamente», agregó Córdoba.
La parálisis del aparato productivo provocada por la cuarentena generó un especial impacto en el sector del trabajo informal, predominante en los barrios populares del Gran Buenos Aires. La falta de ingresos se combina con la necesidad de cada territorio de atender las urgencias sanitarias y las tareas de prevención que, dependiendo de cada municipio, tienen distinta complejidad.
Además de las organizaciones mencionadas, el ministro Larroque concretó ayer un diálogo con referentes del Frente Popular Darío Santillán Corriente Nacional, Izquierda Latinoamericana Socialista, MULCS-Movimiento por la Unidad Latinoamericana y el Cambio Social, Movimiento 8 de Abril, Igualdad Social, Frente Arde Rojo/COPA.