La vicepresidente de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner, y el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, realizarán una exposición este jueves de manera remota ante la Sala I de la Cámara de Casación, donde pedirán su sobreseimiento en la denominada «causa dólar futuro», iniciada por el macrismo en 2015 y que implicó el primer procesamiento de la exmandataria a comienzos de 2016.
En la causa también está procesado el ex titular del Banco Central, Alejandro Vanoli, y el actual presidente de esa entidad, Miguel Pesce, que también expondrán sus razones este jueves.
La presentación se hará de manera remota y será transmitida por distintos medios luego de que el abogado de Cristina Fernández, Carlos Beraldi, esta semana pidiera que la audiencia se realizase de manera presencial y también se transmitiera para que el público pudiera acceder a los alegatos de los acusados.
El pedido, que también fue acompañado por la defensa de Kicillof, fue rechazado por la Cámara, pero accedieron a que se realice una transmisión que comenzará a las 10:30. El rechazo de la presencialidad y de la retransmisión de la audiencia virtual lo realizaron los integrantes de ese tribunal (Ana María Figueroa, Daniel Petrone y Diego Barroetaveña), amparados en las acordadas de la Corte Suprema dictadas en el marco de la pandemia.
«Es imperativo que la gente pueda ver de primera mano y sin intermediarios en qué consisten los conflictos que se someten ante los Tribunales, cuáles son los argumentos que presentan las partes y de qué manera tales litigios son resueltos por los jueces», había dicho Beraldi en el escrito que presentó y al que accedieron, finalmente, los jueces.
La causa dólar futuro fue iniciada por una denuncia que realizaron los legisladores macristas Mario Negri y Federico Pinedo contra la entonces presidenta de la Nación, su ministro de Economía y el directorio del Banco Central, por administración infiel en perjuicio del Estado.
Los denunciantes sostenían que los contratos de dólar en el mercado de futuros que pactó aquel gobierno se realizaron a sabiendas de que el tipo de cambio eventualmente se devaluaría, situación que se concretó finalmente en diciembre de ese mismo año pero con Mauricio Macri en el poder.
El 13 de abril de 2016, en el marco de esta causa, Cristina se presentó por primera vez en los tribunales de Comodoro Py acompañada por una multitudinaria marcha ante el juez Bonadio, luego del procesamiento que dictó el magistrado contra los acusados.
«Según la denuncia efectuada por los legisladores oficialistas Negri y Pinedo, concretamente se habla de la existencia de un grupo de funcionarios que, de manera organizada, sistemática y concertada, llevamos a cabo acciones de carácter político, técnico y administrativo con supuestos propósitos delictivos. Se habla en la denuncia de Negri y Pinedo de ‘beneficios indebidos para terceros inescrupulosos’», expresó la exmandataria en una carta que publicó en sus redes pocos días después de esa indagatoria, en la que señalaba la responsabilidad (nunca investigada) de funcionarios y empresarios allegados a Macri, incluidas las empresas del propio presidente.
Además de la insólita denuncia donde los beneficiarios del supuesto perjuicio contra el Estado son los mismos que ordenaron la devaluación, el propio gobierno de Cambiemos comenzó a operar en el mercado de futuros a partir de la crisis cambiaria de 2018 para contener las expectativas devaluatorias del momento, pero no fueron juzgados.