Luego de que la Corte Suprema de Justicia fallara en favor del Gobierno porteño y las clases presenciales, el Gobierno de la Nación envió al Congreso un proyecto de ley que establece «parámetros objetivos» para la toma de medidas para gestionar la pandemia. «Vamos a debatirlo y discutirlo, y esperamos que se comprenda que esta pandemia no se enfrenta con situaciones de rispidez y agresión, sino juntando voluntades para hacerlo», sostuvo la secretaria de Legal y Técnica, Vilma Ibarra.
El proyecto había sido anunciado por Alberto Fernández el 30 de abril en medio de la disputa judicial con el Gobierno porteño, y viene sufriendo sistemáticas operaciones por parte de los medios dominantes que acusan al oficialismo de pretender otorgarse superpoderes para actuar con discrecionalidad. En ese momento, el presidente explicó que la intención es «facultar al Ejecutivo nacional y a los gobernadores «a tomar restricciones y medidas de cuidado durante esta situación excepcional» con «criterios científicos claros y precisos».
La iniciativa recupera el esquema de zonas de riesgo epidemiológico que fueron utilizadas por el Ejecutivo en los últimos decretos para realizar la segmentación correspondiente a la situación sanitaria.
«Es una obligación del Estado resguardar la salud y la vida. Queremos sentar bases en el Congreso sobre cómo abordamos una pandemia que pone en riesgo ambos derechos. Creemos que es un proyecto equilibrado», señalaron esta tarde fuentes gubernamentales.
La iniciativa «no distingue entre zonas geográficas, sino que establece criterios estrictos, parámetros epidemiológicos conforme a los cuales las jurisdicciones y el Gobierno federal, según las competencias de cada uno, adoptarán medidas para mitigar la propagación del virus».
En ese sentido, propone «reglas generales para todo el país, en las que se incluyen medidas de prevención, como uso obligatorio de barbijo, ventilación; y luego, la segmentación por riesgo epidemiológico».
Al respecto, Vilma Ibarra detalló que la iniciativa «propone un esquema general con parámetros epidemiológicos y sanitarios muy precisos que establecen inmediatamente si se está en un bajo riesgo epidemiológico, y en ese caso solo rigen las medidas de prevención general; o riesgo medio, en cuyo caso rigen las prevenciones generales y se espera que los gobernadores puedan adoptar las medidas necesarias para no pasar a un riesgo epidemiológico más alto».
«En los lugares de alto riesgo epidemiológico, los gobernadores tienen que tomar medias adicionales para mejorar la curva de contagios, y los resultados de estas medidas deben testearse antes de prorrogarlas, suspenderlas, morigerarlas o reemplazarlas por otras», dijo la funcionaria nacional en C5N.
La secretaria de Legal y Técnica afirmó que el proyecto oficial propone «un sistema muy equilibrado con una forma escalonada» para adoptar restricciones, de modo tal que «ante una situación muy grave se toman medidas más gravosas por un tiempo pequeño, que se tienen que controlar y medir su eficacia para poder cuidar la vida y salud de nuestra gente».