Los sectores de la cultura y el turismo de la región han sido de los más golpeados por la pandemia y los últimos en volver a la actividad este año gracias a la baja sostenida de casos en la provincia de Buenos Aires y el avance en el plan de vacunación.
En La Plata, desde la oposición y las entidades que nuclean los espacios culturales denuncian la falta de una política para sostener las actividades y el sustento de sus trabajadoras y trabajadores. «El municipio ha tenido una política sostenida, especialmente entre 2015 y 2019, para intentar clausurar y horadar los espacios culturales», dijo a Contexto Ana Negrete, precandidata a concejal por una de las listas del Frente de Todos en la ciudad.
Desde septiembre del año pasado, los espacios y centros culturales reclaman que se declare la emergencia en el sector, demanda que también impulsó el bloque del Frente de Todos en el Concejo Deliberante y que el Gobierno de Julio Garro no atendió.
La concejal Ana Castagneto había presentado un proyecto en agosto de 2020 para declarar la emergencia cultural y otro más reciente para la creación de un registro de trabajadores del sector que permita avanzar en políticas de apoyo. El primero apuntaba a que el Municipio dispusiera líneas de asistencia económica a personas, colectivos y espacios relacionados con el arte y la cultura local.
Estos espacios en la mayoría de los casos son autogestivos y antes de la pandemia habían sufrido el impacto de la política económica del macrismo a nivel nacional y provincial, con los tarifazos y la caída del poder adquisitivo. En el plano local, la Comuna se ensañó con clausuras y ausencia de estímulo para su funcionamiento. La pandemia complicó aún más el panorama.
«El intendente Garro y su Gobierno municipal no han implementado políticas que fortalezcan al sector, sino, por el contrario, trataron de horadar las acciones y especialmente de los espacios culturales», advirtió Negrete, quien fue la articuladora principal de las discusiones que llevaron a la concreción de la histórica ordenanza de centros culturales que se sancionó por iniciativa de la por entonces concejal Florencia Saintout en el año 2014, hoy diputada bonaerense.
La falta de políticas para la cultura en La Plata contrasta con programas de los Gobiernos nacional y bonaerense. En el caso provincial, el Fondo Provincial para la Cultura y el Turismo que lanzó en septiembre del año pasado el Ministerio de Producción, Ciencia e Innovación Tecnológica avanza con la tercera etapa de entrega de estos subsidios. Hasta el momento se desembolsaron 1.300 millones en toda la provincia. Está destinado a los 135 municipios bonaerenses para impulsar la recuperación de museos, teatros, centros culturales, salas de exhibición, espacios de música, bibliotecas, archivos históricos, ferias artesanales y agencias de viajes.
En tanto, el Gobierno nacional anunció el pasado 10 de agosto una serie de medidas a implementar a lo largo del segundo semestre que representan una inversión de más 5.300 millones de pesos, dirigidas a diversos sectores de la cultura, como festivales, artesanías, editorial, artes escénicas, audiovisual, patrimonio, música y cultura comunitaria.
«Vemos cómo los Gobiernos nacional y provincial han impulsado diferentes políticas de incentivo y de sostenimiento de este sector golpeado. Ha habido políticas activas de fomento en ambos niveles de Estado», destacó Negrete, y lo contrastó con el escenario local. «Pero el Municipio no tiene receptividad y no tiene un presupuesto ni iniciativas particulares que ayuden a fortalecer el sector».
Por último, la precandidata del Frente de Todos, quien también integra el colectivo Cultura Cumbia, alertó que el sector del turismo tampoco cuenta con un plan que permita su desarrollo en la capital bonaerense.
«Esta ciudad ha perdido parte de su mística fundacional, que tiene que ver con su planificación. Es una ciudad que ha crecido exponencialmente, pero sin planificarse. Y eso impacta en muchas cosas, como la idea de un proyecto turístico», señaló Negrete.
«La ciudad tiene muchísimo capital en términos patrimoniales y culturales, tiene más de treinta museos y cientos de espacios culturales. Sin embargo, eso no está anudado en un proyecto turístico. Y eso lo vemos con mucha preocupación», planteó Negrete.
Y concluyó: «Las cuestiones más bellas de ver en la ciudad están olvidadas, derruidas y no hay una política de Estado municipal pensada para mostrarles a los platenses y a otros y otras de qué se trata nuestra ciudad, cuál es su identidad».
