Tras la promulgación de la la Ley de Góndolas en marzo de este año, el Gobierno dispuso un nuevo alcance de la normativa para los sitios web de supermercados y comercios. A través de la Secretaría de Comercio Interior, los portales digitales de los negocios ahora deberán implementar medidas similares a las que rigen para los comercios físicos.
A través de la Resolución 926/2021, publicada este viernes en el Boletín Oficial, fue reglamentado este nuevo esquema que exhorta a los sitios digitales a disponer sus productos de menor a mayor precio para facilitar la visibilidad de los más accesibles.
Al mismo tiempo, deberá distribuirse la oferta de stock con productos elaborados por mipymes, agricultura familiar, campesina e indígena, economía popular, cooperativas y asociaciones mutuales, también con señalética específica aprobada por la Secretaría. Esta sección deberá ser destacada en el sitio web del comercio.
«Continuamos avanzando en la implementación y reglamentación de la Ley de Góndolas. En este sentido, incorporamos también el canal virtual, que hoy en día se convirtió en una manera frecuente en la modalidad de compra de las y los argentinos», destacó a Télam la secretaria de Comercio Interior, Paula Español.
En tanto, los sujetos alcanzados por la nueva disposición tienen un plazo de sesenta días corridos para adecuar sus locaciones virtuales a las obligaciones que dicta la presente medida. Cabe recordar que la Ley de Góndolas se enfoca en la comercialización de alimentos, bebidas, productos de higiene personal y artículos de limpieza del hogar.
«A los fines de esta ley se entiende por góndola todo espacio físico, mueble, estantería, en los que se ofrecen productos de similares características, incluidos las puntas de góndola», expresa el texto de la ley, propuesta que fue impulsada y reclamada con fuerza durante los años de macrismo y que se convirtió en normativa con la llegada del Frente de Todos al Gobierno de la Nación.
Su principal objetivo es garantizar una oferta amplia de precios basada en el reparto de espacio a productos de diferentes sectores, tanto de las grandes firmas como de medianas y pequeñas empresas. De esa manera, se apunta a generar tanto una gama amplia de precios como una competencia equitativa, sin que las grandes corporaciones acaparen toda la oferta.
Según la normativa, tanto en lugares de exhibición física como en locaciones virtuales, la participación de empresas y operadores comerciales deberá involucrar a no menos de cinco proveedores o grupos empresarios, con un mínimo del 50 % de productos elaborados por pymes.