El financiamiento de las pymes a través de líneas de crédito del Estado nacional se multiplicó entre 2020 y 2021 unas 244 veces con respecto a los últimos dos años de Gobierno de Mauricio Macri, y esta semana, a través de una línea del Fondo Nacional de Desarrollo Productivo (FONDEP), el Gobierno entregó el crédito un millón.
Los datos surgen de la Secretaría de la Pequeña y Mediana Empresa y los Emprendedores (SEPYME), que alcanzó el millón de créditos por un monto superior a los 216.000 millones de pesos. De esa forma, el financiamiento otorgado a empresas superó en 244 veces el otorgado por la gestión anterior, que, en el bienio 2018-2019, alcanzó solo a unas 4.086 firmas.
«Nos llena de orgullo entregar este crédito número un millón. Cuando llegamos al Ministerio de Desarrollo Productivo, las pymes estaban muy endeudadas, pagando tasas anuales que superaban el 80, el 90 y hasta el 100 % del monto en algunos casos», expresó el titular de la SEPYME, Gustavo Meredíz, y añadió: «Nosotros desde el principio definimos la necesidad de recuperar el crédito a tasas razonables, por lo que establecimos un esquema de subsidios de tasas a través del Fondo Nacional de Desarrollo Productivo (FONDEP). Por eso, ampliamos su presupuesto 28 veces: pasó de 2.200 millones de pesos en 2019 a 65.800 millones de pesos en 2021».
En cifras, la diferencia de inversión a través de la Secretaría PYME es notoria: frente a los 216.000 millones que se otorgaron hasta la fecha, los dos años anteriores habían sido solo 7.500 millones de pesos.
Según explicaron desde la cartera de Desarrollo Productivo, de los créditos otorgados a pequeñas y medianas empresas «el 33 % correspondió a firmas del sector servicios; el 25 % a industria; el 19 % a comercio; el 18 % al sector agropecuario; y el porcentaje restante se repartió entre construcción y la minería».
Entre el año pasado y este, la Secretaría lanzó 36 líneas de financiamiento en todo el país «con un monto global para créditos por más de $ 324.000 millones», según señalaron desde el organismo. De ese grupo, veintiún líneas de crédito fueron para proyectos de inversión; tres para capital de trabajo e inversión productiva para sectores específicos que se pusieron en marcha antes del inicio de la pandemia; y doce líneas destinadas a la asistencia de la covid-19, la producción de los insumos necesarios por la emergencia sanitaria y el apoyo a los sectores más afectados.
Por otro lado, el viernes se conoció el decreto que firmó Alberto Fernández que exime del pago de retenciones a las exportaciones de pequeñas y medianas empresas que vendan sus productos en el exterior a través del programa Exporta Simple, una plataforma de exportación simplificada que fue relanzada a comienzos de este mes.
El programa ayuda a pequeñas empresas y emprendedores a colocar sus productos en otros países, con un tope de exportación de 600.000 dólares anuales, y el tributo por Derecho de Exportación fue llevado con la firma del decreto a 0 %.