Por Gabriela Calotti
La Red Internacional por la Libertad de Milagro Sala, que integran desde principios de 2021 ciudadanos de Argentina, Brasil, Canadá, España, Estados Unidos, Finlandia, Francia, Italia, Reino Unido, Suecia y Suiza, aunque los comités en cada país se crearon en 2016, respaldaron esta semana un proyecto de ley para promover la intervención federal del Poder Judicial de la provincia de Jujuy presentado por legisladores y dirigentes del Frente de Todos.
Ese reclamo es una «petición fundacional» de la red ante la «total dependencia de los tribunales jujeños al poder político provincial», según una carta de apoyo a esa iniciativa a la que tuvo acceso Contexto.
La red se armó formalmente en marzo de 2021, pero los diversos comités por la libertad de Milagro Sala nacieron como respuesta inmediata a su detención, el 16 de enero de 2016, dispuesta por el gobernador radical Gerardo Morales poco después de asumir el cargo, en complicidad con el entonces presidente argentino Mauricio Macri, con el objetivo de convertir Jujuy en el laboratorio del disciplinamiento social y político que el neoliberalismo necesita para aplicar sus planes económicos de ajuste y beneficiar a los grupos económicos y las trasnacionales.
«Desde la asunción del gobernador Gerardo Morales no existe independencia del Poder Judicial en la provincia de Jujuy», afirma la red internacional en su carta.
Baste recordar que, cinco días después de asumir la gobernación, el Congreso jujeño, con mayoría de diputados que responden a Morales, aumentó el número de jueces del Superior Tribunal de Justicia de cinco a nueve. Y tres días más tarde juraron como jueces dos de los diputados que habían votado esa decisión.
Al convertirse en presidente de la nación, en diciembre de 2019, muchos recordaron la visita que tres años antes, exactamente el 31 de diciembre de 2016, Alberto Fernández, por entonces dirigente del Frente Renovador, le había hecho a Milagro Sala en la cárcel de Alto Comedero. Muchos pensábamos que una de sus primeras decisiones desde la Casa Rosada sería otorgarle la libertad. No fue así. «Entre Milagro Sala y Gerardo Morales, el presidente eligió a Morales», dijo en estos días sin ambigüedad el periodista Fernando Borroni.
«Si se pide la intervención, no es por Milagro Sala, es por muchos sectores que no pueden salir a pedir un pedazo de pan porque tienen hambre o pedir comida o pedir por femicidios porque les arman una contravención. Hay complicidad muy fuerte» entre los poderes del Estado en Jujuy, denunció Milagro Sala el lunes por videoconferencia al participar en la presentación del proyecto de ley del que participaron la legisladora porteña Ofelia Fernández, el diputado nacional Itaí Hagman, el dirigente social Juan Grabois, la titular de CTERA, Sonia Alesso, y Sergio Maldonado.
Más de 2.000 compañeras y compañeros de diferentes gremios, estatales, docentes, del ingenio Ledesma, de la Corriente Clasista y Combativa (CCC), del Partido Socialista de los Trabajadores (PTS), del Consejo de Pueblos Originarios y de la Unión de Trabajadores de la Economía Popular (UTEP) están siendo sometidos a un código contravencional, un «manual» hecho a medida por la Justicia jujeña considerado «anticonstitucional», sostuvo la dirigente social jujeña.
«Nos llama la atención de que no haya nadie que responda por Jujuy», sentenció Sala, que abogó porque «vuelva a funcionar la democracia real en Jujuy» y porque «se reabra cada causa y pueda defenderme, porque nunca me pude defender».
«Parece que Jujuy no es parte del país», sentenció Milagro Sala, otrora secretaria gremial de ATE Jujuy que al frente de la organización barrial Tupac Amaru llevó adelante entre 2004 y 2014 la construcción de doce barrios con más de 8.000 viviendas, escuelas primarias, secundarias, terciarias, centros de salud, guarderías y centros recreativos con piletas de natación que Morales se encargó de destruir en una clara muestra de odio y desprecio de clase. Es más, la propia Milagro Sala denunció el lunes que Morales está echando familias de esas viviendas que levantaron con sus propias manos para dárselas a sus seguidores.
Como refiere un documento de la Red Internacional, «la guerra jurídica que desató el gobernador Morales con la complicidad de Macri y el mutismo del presidente Fernández, es la herramienta para garantizar el orden neoliberal en Jujuy», provincia que alberga riquezas en sus entrañas.
Además de la industria azucarera, Jujuy es parte del llamado «triángulo del litio» que forman el norte de nuestro país, el norte de Chile y Bolivia. La plantación de cannabis para uso medicinal será otra fuente de ingresos para el empresariado jujeño y para la familia del gobernador, que en abril puso en marcha la plantación de 35 hectáreas. La minería alberga otra de las codiciadas riquezas. Según la organización canadiense MiningWatch, de los 359 sitios mineros localizados en la Argentina, 26 están en la provincia de Jujuy, advirtió el Comité de Toronto.
«De todo lo que están explotando, litio, cannabis, minerales, en Jujuy no queda nada. Sigue siendo una provincia pobre», lamentó Milagro Sala.
Justamente, la Red Internacional se pregunta en uno de sus documentos: «¿Morales tuvo temor […] a la capacidad de movilización de Milagro Sala? ¿Su detención fue acaso ‘una medida preventiva’ para que ‘esa india bochinchera no se meta en los negocios’?».
Las respuestas. En el marco de las numerosas actividades que lleva adelante la Red Internacional por la Libertad de Milagro Sala, cada día 16, sus integrantes presentan en consulados o embajadas argentinas una carta en la cual reclaman «una vez más» la «libertad inmediata» de la dirigente jujeña. «Al día de hoy, Milagro Sala lleva seis años y cuatro meses de detención arbitraria», señala la misiva dirigida al presidente Fernández.
«Como cada mes, al cumplirse un mes más de la detención arbitraria de Milagro Sala, le estamos escribiendo para solicitarle su intervención. Creemos sobran pruebas que el poder judicial en la provincia de Jujuy no es la institución independiente que usted pregona. Usted no puede seguir escondiéndose en una falacia jurídica sino utilizar las herramientas a su alcance para obtener la libertad inmediata y definitiva de Milagro Sala y las otras personas detenidas en Jujuy», reclamó la Red.
La Red Internacional por la Libertad de Milagro Sala también reclama por la inmediata libertad de Patricia Cabana (Pachila), Iván Altamirano, Javier Nievas, Cacho Sibila, Andrea Condori, María Condori y Graciela López.
Y aunque este 16 de mayo ya tenían acordado entregarla al cónsul argentino en Barcelona, Alejandro Saínz, a último momento el diplomático no los recibió. Luego supieron que estaba reunido con el gobernador Morales, que en medio de sus aspiraciones presidenciales para 2023 había viajado a la ciudad condal para participar en una conferencia sobre hidrógeno verde.
