En pleno marco de avance en la aplicación de segundas dosis en todo el territorio nacional, Argentina dispondrá durante el mes de agosto de unas 3.000.000 de segundas dosis de Sputnik V, un paso clave para el cronograma de inmunización. Se trata del lote de elaboración local producido por Laboratorios Richmond, que ya recibió la aprobación del Instituto Gamaleya.
La noticia fue divulgada este martes por el Fondo Ruso de Inversión Directa (RDIF), que prevé la disponibilidad de unas 3 millones de unidades de Sputnik V para Argentina en el transcurso del mes, y que iniciará esta semana con unas 150.000 unidades correspondientes al segundo componente.
Según ratificaron desde el RDIF y la firma farmacéutica radicada en Buenos Aires, las muestras de la vacuna producidas en la Argentina “han superado con éxito el control de calidad en el Centro Gamaleya el 3 de agosto”.
“El exitoso comienzo de la producción del segundo componente de la vacuna Sputnik V es un ejemplo importante de cooperación tecnológica entre Rusia y la Argentina para la localización de la producción de una de las mejores vacunas del mundo contra el coronavirus”, expresaron a través de un comunicado del RDIF que fue replicado luego en la plataforma oficial de Sputnik V. “Se ha alcanzado un hito muy importante que nos impulsa a trabajar aún más duro para producir más vacunas para más personas”, fueron las palabras del responsable de la firma Richmond en el país, Marcelo Figueiras.
La vacunación con el inoculante ruso comenzó en Argentina el 29 de diciembre del 2020, lo que la convirtió en el primer país de la región en utilizar este tipo de vacuna. En tanto, en abril de este año se selló el acuerdo para que Richmond elabore el químico de base para la producción propia. Esto se logró tras la aprobación del Fondo Ruso para la transferencia de tecnología hacia la farmacéutica regional de capitales argentinos.
Cabe recordar que el miércoles pasado, Argentina recibió un nuevo lote del componente para la elaboración nacional de la vacuna Sputnik V. Se trata de 500 litros de la sustancia activa que, según se calcula, servirá para producir unas 800.000 dosis del inoculante.
Las vacunas producidas por Laboratorios Richmond son elaboradas con el antígeno que es importado por la Argentina desde Rusia. Localmente se lleva a cabo la formulación, filtrado y envasado con el fin de fortalecer el Plan Estratégico de Vacunación.
En su primera producción, Laboratorios Richmond lanzó 140.625 vacunas que obtuvieron la aprobación rusa. Marcelo Figueiras, responsable de la firma farmacéutica regional de capitales argentinos, sostuvo que la producción será “para el Estado argentino”.
Asimismo, esa misma semana se difundió a nivel internacional un estudio argentino que reveló que la misma Sputnik V genera un alto nivel de anticuerpos con una sola dosis en aquellas personas que ya tuvieron covid-19. El diagnóstico fue resultado del trabajo liderado por Andrea Gamarnik, jefa del Laboratorio de Virología Molecular de la Fundación Instituto Leloir (FIL) e investigadora superior del CONICET.