Por Ailén Ruiz
El gobierno de Horacio Rodríguez Larreta lanzó la semana pasada el decreto 585/16 que otorga a la Dirección general de Ferias y Mercado, que pertenece al Ministerio de Ambiente y Espacio Público, la autoridad de regular y decidir sobre las ferias, sus cupos, su organización y sus artesanos, sin dialogar y acordar las decisiones con los delegados del Sistema de Ferias Artesanales (SFA). Los artesanos y trabajadores de las ferias artesanales consideran que la nueva normativa es “arbitraria e inconstitucional” porque anula la función del SFA. Por eso, con la consigna “Artesanía es cultura y cultura es identidad”, los artesanos, artistas callejeros e integrantes de la cultura urbana porteña marcharon a la sede del Ministerio conducido por Eduardo Macchiavelli para reclamar la marcha atrás del decreto.
El SFA funciona como una red que nuclea las diferentes ferias en la ciudad de Buenas Aires. El organismo daba la posibilidad de que los artesanos participen de la organización y legislación de las ferias a través de un sistema de delegados y fiscales. El sistema funcionaba desde hace 47 años y contiene a las ferias ubicadas en Plaza Francia, General Belgrano, Houssay, Centenario, Santa Fe, Lezama y Vuelta de Rocha 1 y 2.
El SFA está amparado por la Ordenanza 46075/92, sancionada en 1992, que declara a la actividad artesanal de interés municipal en la ciudad de Buenos Aires. También el artículo 32 de la Constitución de la Ciudad, que distingue y promueve las actividades artísticas, asegura la libre expresión artística y prohíbe todo tipo de censura,facilita el acceso a los bienes culturales y protege y difunde las manifestaciones de la cultura.
La red funciona mediante un sistema de delegados y fiscales. Los fiscales son los encargados de evaluar a los artesanos que desean entrar en el SFA. Los delegados tienen el trabajo de acordar y negociar con el Ministerio las habilitaciones, los cupos y los espacios donde se levantan las ferias. Ambos roles son elegidos por todos los miembros de la red a través del voto secreto, de forma democrática y horizontal.
Damian Piazza, delegado de la red, explicó a la prensa los objetivos del Decreto: “Yo creo que hay dos grandes motivos por los que el Gobierno avanza en contra de las ferias. El primero es que quieren disponer del espacio público para privatizarlo, como hacen con todo. No por nada nos sacan de algunas plazas, como la Houssay, para poner bares. El segundo objetivo es desarmar la organización social y cultural que suponen nuestras ferias. No toleran que su función sea únicamente la de firmar los permisos que otorgan nuestros fiscales, porque de ese modo no pueden meter a sus amigos”.
Piazza, en la declaración, hace referencia a una serie de hechos que tuvieron lugar en septiembre de este año. El jueves 15 y viernes 16 de ese mes, los artesanos de ciudad de Buenos Aires realizaron una actividad de “resistencia cultural” en la Plaza Bernardo Houssay, advirtiendo que el Gobierno del PRO pretendía erradicar las ferias artesanales para poder construir un Polo Gastronómico en la plaza. Esto demuestra el tiempo que lleva la lucha de los artesanos con el Gobierno de la Ciudad. Antes de la gestión del PRO en la ciudad, el número de familias de artesanos que formaban parte de la red llegaba a 1.600, hoy son menos de 600.
El Sindicato Unido de Artesanos de la República Argentina expresó en un comunicado: “Somos parte de la cultura del pueblo… A partir del año 2008 el Gobierno de la Ciudad saco a las Ferias Artesanales del Ministerio de Cultura y las transfirió al de Espacios públicos. Este Ministerio vacía nuestras ferias para quedarse con los espacios rentables, como ya lo hizo con Plaza Italia. Cerró la Feria de Belgrano por ‘obras’, sin consulta ni aviso, violando así la ley. Planea un polo gastronómico en Pza. Houssay, no garantizando el lugar de la feria. Proyecta un bar en Parque Centenario. Y una megaobra en La Boca, que no solo afecta a la Feria, a la gente del barrio (desalojos), y a los pibes del Playón (donde ensaya la murga). Toda esta obra genera cambio en el paisaje urbano. Entre ellos desaparece la Plazoleta de los Suspiros, perdiendo el barrio su identidad”.
Afirman también que el Decreto 585/16 publicado el 21/11/16 viola la ley y “la Constitución, eliminando el diálogo, y le permite erradicar las Ferias Artesanales del Sistema”. Afirman su rechazo al Decreto “que viola la Ordenanza 46075/92 y su decreto reglamentario 535/02 y la Constitución de la Ciudad (art. 32 de cultura)”. Exigen la derogación del decreto por considerarlo “Inconstitucional y Autoritario”. Al final del comunicado firmaron “La Artesanía es un hecho cultural”.