Los abogados de Cristina Fernández de Kirchner denunciaron este lunes al diputado Gerardo Milman por presentar al Poder Judicial un celular que adquirió luego del atentado. Además advirtieron que posee otros dispositivos telefónicos que no fueron entregados y apuntaron contra la jueza Eugenia Capuchetti.
En un escrito dirigido a la magistrada y al fiscal Carlos Rivolo, la querella de la vicepresidenta advirtió que Milman «entregó un celular [que adquirió] posterior al atentado y que tiene, al menos, tres celulares más, de los que no dio noticia».
«Lógicamente, Milman, como imputado, no tiene obligación de entregar sus teléfonos. Aun así, su maniobra de entregar un celular sin relevancia e inexpugnable es un claro intento más de desviar la investigación. Quien sí tiene obligación de buscar la verdad es la jueza, a pesar de que hasta ahora sólo la ha estorbado», señalaron los abogados.
El dato se desprende al dar cuenta de que el modelo de celular que presentó el diputado salió al mercado posteriormente al atentado contra Fernández de Kirchner, ocurrido el 1° de septiembre del año pasado.
Vale recordar que el dirigente del PRO es investigado en lo que se conoce como la «Pista Milman», a raíz de una denuncia de un testigo que habría escuchado al diputado decirle a sus asesoras en un bar de Congreso, el mismo día del ataque, «cuando la maten yo ya voy a estar en la Costa». A esto se le suma un proyecto presentado en la Cámara donde hablaba de la posibilidad un «falso atentado» contra la figura vicepresidencial.
«Esta circunstancia es concordante, también, con el relato de Ivana Bohdziewicz [ex secretaria de Milman] respecto a lo sucedido en las oficinas de Patricia Bullrich, cuando le dijeron a [la asesora, Carolina] Gómez Mónaco que compre un nuevo celular: ahora sabemos que también era un iPhone 14 Pro y que, tal como le dijeron en esa reunión, el celular no pudo ser abierto por los peritos», aseveraron.
«Es evidente que tanto a Milman como a su círculo se los puso en conocimiento de que deberían comprar los últimos aparatos disponibles para preservar su contenido, más allá de los procesos de borrado», concluyeron los abogados.
Asimismo, insistieron que el iPhone 14 Pro entregado no es el único dispositivo de Milman. «La demora de vuestra señoría en actuar ha hecho que, luego de un año, solo tengamos un celular de Gerardo Milman que ahora sabemos que no tiene relevancia y que es sólo uno de cuatro dispositivos que tiene el diputado nacional», destacaron.
En este marco, cuestionaron también la celeridad con la que se está llevando adelante la investigación, al recordar que «el recurso en trámite por la defensa de Milman ante la Cámara de Casación [para bloquear la apertura de su teléfono celular] no obsta al secuestro de los dispositivos», y señalaron que, «como máximo, podría quedar pendiente su análisis, pero es inadmisible seguir perdiendo el tiempo». En ese sentido, le reclamaron a Capuchetti que «ponga a disposición de las partes la información en su poder relativa a las llamadas y mensajes entrantes y salientes de Milman».
«Insistimos en que se trata de información cuyo estándar de revelación es menor que el de analizar un dispositivo secuestrado, por lo que no es una medida que requiera esperar la determinación respecto del celular de Milman que adopte la Cámara de Casación. Por lo tanto, debe ser inmediatamente puesta a disposición de las partes para avanzar con la investigación», señalaron los abogados.
«Rogamos que, por una vez, la jueza siga lo que marca la prueba y el ordenamiento jurídico, y no intereses políticos o animadversiones personales. Lo que ha hecho Milman al entregar un celular posterior al atentado y ocultar la existencia de otros tres dispositivos es una burla a la jueza, al fiscal y a la víctima. La única respuesta posible es la que se deriva del rigor de la ley», concluyeron.