Ante la crisis que atraviesa el Teatro Argentino, los trabajadores de la institución iniciaron un plan de lucha para hacer visible el estado de abandono y malversación del presupuesto en que se encuentra el espacio cultural de La Plata. Como parte de esa lucha, ayer realizaron una intervención en el frente del edificio en la que declararon que «el teatro no es sólo una fachada», en referencia a las obras superficiales que desarrolló la gestión de María Eugenia Vidal mientras la infraestructura está a la deriva.
«Al teatro le han hecho una simple renovación de su fachada, pero por dentro está totalmente abandonado. No hay calefacción, no hay limpieza en los talleres, hay zonas que están desde hace más de dos años abandonadas. Sigue entrando agua desde el quinto hasta cuarto subsuelo. Hay un anuncio de ‘una puesta en valor del teatro’ cuando lo que hay es subejecución de presupuesto», dijo a Contexto Julio Riciardi, vocero de los trabajadores del área de talleres de producción del teatro.
Riciardi: «Al teatro le han hecho una simple renovación de su fachada, pero por dentro está totalmente abandonado. Hay un anuncio de ‘una puesta en valor del teatro’ cuando lo que hay es subejecución de presupuesto».
Tanto Riciardi como representantes de las áreas de maquinaria, limpieza y mantenimiento se hicieron presentes ayer al mediodía en las inmediaciones del teatro para realizar la actividad y dar testimonio de la situación que afecta no sólo en términos laborales, sino también a la calidad misma de un espacio que supo ser el gran exponente de la producción artística de la provincia.
«La Administración de Alejandro Gómez –titular de Gestión Cultural Provincial– no está dando la atención necesaria para que este teatro funcione. Somos cerca de mil personas trabajando y la situación está llegando a un límite. Mientras el edificio está abandonado y las paredes filtran agua», dijo a Contexto Carlos Poblete, delegado de ATE y representante de los talleres de herrería del cuarto subsuelo.
Según informaron, uno de los últimos períodos de plena actividad del teatro fue en 2011, cuando el espacio ofrecía hasta siete obras por año. Hoy llegan a una obra a duras penas. «Desarmaron la sala lírica, se podría haber buscado una solución eficaz y económica, y sacaron las butacas que estaban y las cambiaron por unas carísimas que no sirven. Sólo eso costó un presupuesto de 39 millones de pesos».
Poblete indicó que, a causa de la falta de mantenimiento, el trabajo de maquinaria debe hacerse a mano por el propio personal, lo que conlleva un enorme riesgo. Durante el último apagón –que tuvo alcance nacional– el personal debió entrar al teatro a hacer funcionar el grupo electrógeno.
«El año pasado pedimos una reunión con Gómez y no nos atiende. Su política es hacer gestión pero con programas como el ‘Acercarte’, el ‘Ciudad Emergente’. No estamos en desacuerdo, pero que no abandone el Teatro Argentino, que es uno de los principales núcleos del arte en la provincia», agregó Poblete.
Cabe recordar que la semana pasada el grupo de delegados gremiales plantearon su discusión en el Anexo de la Cámara de Diputados, donde realizaron una conferencia de prensa que fue acompañada por la diputada provincial y actual precandidata a intendenta platense Florencia Saintout. En esa ocasión, los trabajadores lograron que el bloque de Unidad Ciudadana, presidido por la legisladora, elaborara un pedido de informe para tratar en tablas y ser luego elevado a la Gobernación.
«El pedido de informe es una herramienta que tenemos. El gobierno debe dar respuesta a cada uno de los puntos que presentamos. Tienen que dar la cara y darse cuenta de lo que estamos pasando. El pedido se centra sobre las licitaciones de las obras realizadas, montos del mobiliario, las tareas realizadas, las condiciones en oficinas y espacios de trabajo, ascensores y baños. El Teatro Argentino es un patrimonio de todos los y las bonaerenses», había manifestado Saintout en diálogo con los trabajadores.