La comunidad universitaria volvió a pronunciarse contra el ajuste del Gobierno de Javier Milei en la educación superior y reclamó la recomposición salarial para trabajadores y trabajadoras docentes y nodocentes, quienes han perdido un 50 % de su poder adquisitivo desde que asumió el libertario.
Reunidos en la sede del Consejo Interuniversitario Nacional (CIN), rectores y representantes de todas las federaciones docentes, nodocentes y estudiantiles del país (FATUN, FEDUN, CONADU, CONADU Histórica, UDA, CTERA, FAGDUT y FUA) manifestaron su «profunda preocupación por la situación salarial crítica e inadmisible» que están atravesando, mediante un comunicado conjunto titulado «Sin salarios dignos no hay universidad».
En el caso de los estudiantes, reclamaron por la «falta de actualización de los programas de asistencia a estudiantes de las universidades, sustanciales y muchas veces definitorios para la continuidad de su carrera». En particular, en la Universidad Nacional de La Plata, la FULP había pedido un 270 % de aumento para las becas, el mismo porcentaje de incremento que dio el Gobierno para gastos de funcionamiento tras recibir el golpe de la marcha universitaria.
Justamente a esa masiva movilización contra el Gobierno del pasado 23 de abril se refirieron al sostener que «la sociedad argentina se manifestó en todo el país señalando con contundencia y precisión el rol estratégico que la educación pública, la universidad y la ciencia deben tener para la Nación».
La histórica movilización generó que el Gobierno cediera y otorgase 240 % de aumento para los gastos de funcionamiento de las casas de estudio, que se habían encontrado en dificultades incluso para pagar las tarifas de servicios. Los gremios reclaman ahora que el Ministerio de Capital Humano, a cargo de la negociación, también tienda la cuestión salarial, que representa el 90 % del presupuesto de las universidades.
Los sindicatos habían entregado la semana pasado un petitorio a la Secretaría de Educación donde pidieron la reapertura de la paritaria y señalaron que los salarios perdieron el 50 % desde que asumió Milei. En el caso de los docentes, CONADU denunció que cada vez más profesores se encuentran bajo la línea de pobreza debido a la falta de recomposición salarial acorde al proceso inflacionario.
Los rectores y gremios añadieron que «ese rol estratégico» de la educación «solo puede ser asumido si se jerarquiza la cuestión educativa como política pública y, consecuentemente, se prioriza la inversión presupuestaria que garantice su normal funcionamiento. La no resolución del conjunto de los problemas enunciados a lo largo de este año somete a nuestro sistema a una situación de emergencia que requiere atención y resolución con celeridad».
Y concluyeron: «Reclamamos urgente recomposición salarial para las y los trabajadoras y trabajadores docentes y nodocentes del sistema universitario público nacional, la reactivación de los programas y de los dispositivos de asistencia estudiantil y la actualización del monto asignado para las becas».