Este lunes por la madrugada, en una pensión ubicada en el barrio porteño de Barracas, dos parejas de lesbianas fueron atacadas por un vecino que provocó un incendio con una bomba casera en la habitación que compartían, hiriendo de gravedad a las cuatro mujeres, una de las cuales falleció al día siguiente.
Pamela Cobos falleció en el Hospital del Quemado, adonde fue traslada con Mercedes Figueroa, quien se encuentra en grave estado, con el 90 % del cuerpo quemado, al igual que Andrea Amarante, que fue trasladada al Hospital Penna con quemaduras que afectan el 75 % de su cuerpo. Allí también llegó Sofía Castro Riglos, con quemaduras de menor grado.
El atacante es Justo Fernando Barrientos, que, después de un paso por el Penna, donde llegó tras autolesionarse luego del ataque, ya se encuentra detenido e imputado por el Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional Nº 14, a cargo de Edmundo Rabbione. Según testigos, se trata de un vecino del lugar que venía teniendo problemas con las mujeres.
La Federación Argentina de Lesbianas, Gays, Bisexuales, Transexuales (FALGBT) se encuentra acompañando a las víctimas, sin aún lograr contacto con sus familias y allegados. Mientras tanto, se presentaron ante la Justicia y advirtieron sobre el crecimiento de los crímenes de odio, que año a año aumentan en Argentina, teniendo en 2023 133 crímenes donde se destacan como factores la orientación sexual, la identidad y la expresión de género.
«Vamos a acompañarlas, poniéndonos a disposición de lo que necesiten ellas y sus familias, y vamos a seguir de cerca la causa judicial para que sea justicia. Pero no podemos dejar de señalar que los crímenes de odio son el resultado de una cultura de violencia y discriminación que se sostiene sobre discursos de odio que hoy se encuentran avalados por varios funcionarios y referentes del Gobierno Nacional. Y los únicos espacios a los que podemos recurrir quienes somos víctimas de estos ataques, están siendo vaciados o eliminados por el actual gobierno como, por ejemplo, el INADI», denunciaron desde la FALGBT.
«Señalamos esto con preocupación y exigimos políticas públicas contundentes contra los discursos y los crímenes de odio en Argentina. Así como el fortalecimiento del INADI, único organismo encargado de generar políticas públicas para prevenirlos», cuestionaron.
Un grupo de organizaciones lésbicas de todo el país conformó el grupo «Autoconvocadxs lesbianxs de Barracas». «El ataque nos produce profundo dolor y enojo: no fue un hecho cualquiera, fue un acto de odio hacia las lesbianas. El crimen ocurrió en un contexto de extrema precariedad de la vida, donde las cuatro vivían hacinadas en una habitación, y donde diariamente las identidades LGTBQI+ somos foco del aumento de la violencia», indicaron.
Este colectivo, que nuclea referentes del país, indicó que este atentado «se enmarca en la desigualdad históca cis-hetero-patriarcal, actualmente acentuada por los discursos de odio promovidos por la extrema derecha, que hoy tiene como principal referente en nuestro país al presidente Javier Milei. Otro factor que consideramos determinante es la falta y destrucción de las políticas públicas destinadas a promover la igualdad en la diversidad, como la eliminación del INADI y el Ministerio de las Mujeres, Géneros y Diversidad».
«De esta manera, la violencia hacia nuestra comunidad es un hecho político que encuentra tierra fértil cuando los gobiernos fundan imaginarios colectivos que se basan en el desprecio a los derechos humanos, el quebrantamiento de los lazos sociales y la cultura, la sujeción a doctrinas económicas salvajes y el fomento de ideas misóginas y odiantes de las diversidades», denunciaron.
Por su parte, el diputado socialista Esteban Paulon, integrante de la FALGBT, también cuestionó estos discursos. «Los discursos de odio agitan la violencia hacia los colectivos que históricamente hemos sido estigmatizados y vulnerados. Hoy se multiplican de manera imparable. Ninguna sociedad puede desarrollarse en base al odio. Combatirlo debe ser un compromiso colectivo», señaló en sus redes.