Por José Welschinger
Durante el acto, transmitido por cadena nacional, Cristina también remarcó la importancia del recambio político: “La política no puede ser una calesita donde siempre giran los mismos caballitos”, afirmó.
“Hoy, cuando cantamos el himno, cuando las mujeres, los hombres y los jóvenes de este país cantan con el pecho henchido de orgullo el himno, no solamente es porque hemos hecho un buen gobierno, sino porque hemos recuperado la patria, que es mucho más importante”, sostuvo la mandataria desde La Pampa, mientras anunciaba la inauguración de obras de infraestructura para el desarrollo del país. Antes de dar repaso a los anuncios oficiales, Cristina Fernández aprovechó para fundamentar la importancia de las cadenas nacionales y las teleconferencias dentro de su gestión: “Esto, que parece una conexión de imágenes o de transmisiones, es algo más profundo, más subterráneo, más arraigado en la comprensión de un país que necesita desarrollo igualitario e integral, desde La Quiaca hasta Tierra del Fuego y desde Los Andes hasta el Atlántico”.
“Creemos que la Argentina es una sola, y que los 40 millones de argentinos pueden tener distintas historias y venir de distintas identidades, pero concebimos a la patria como un todo, en el cual no puede haber nadie que se caiga y quede afuera”, continuó Cristina, desde la sede del Club Estudiantes de Santa Rosa.
Luego de anunciar la inauguración del Instituto Regional de Planificación, Control y Servicios Ambientales en La Rioja, junto al nuevo laboratorio químico de Fabricaciones Militares en Villa María, Córdoba, con una inversión de 45 millones de pesos, Cristina recordó que el Parlamento nacional sancionó por ley la imposibilidad de privatizar “a tiro de decreto” las instalaciones de Fabricaciones Militares, ni sus desarrollos científicos. “Porque cuando se pone en juego el corazón de la ciencia y la tecnología, el corazón del desarrollo del país, el progreso y adelanto, no pueden estar a tiro de decreto, tienen que pasar por el Congreso para que sea discutido por todas las fuerzas políticas con representación parlamentaria”, y agregó: “No hay Fuerzas Armadas grandes si no hay un país industrializado”.
A su vez, la conductora del proyecto nacional se refirió a los diagnósticos pesimistas que los organismos transnacionales auguraban para el final de su gestión: “En esta Argentina, en la que hace apenas unos meses atrás, el año pasado, algunos diagnosticaban calamidades y las diez plagas de Egipto, hoy podemos decir que estamos volviendo a crecer. Hoy podemos decir, y lo dice un estudio privado, que hemos crecido en inversión privada un 2,1% respecto de mayo del año pasado, llegando al 10% del PIB. Y hasta los pronósticos internacionales de algunos que no nos quieren mucho, como Merril Lynch, dicen que va a haber un crecimiento del 1,4% este año del PBI”. “Le juego a Merril Lynch –continuó Cristina– que vamos a crecer más de 1,4%”.
“Por eso –prosiguió–, cuando anoche escuchaba alguno de estos debates que se hacen en las elecciones y veía que nos querían dar algunas lecciones, sobre todo alguno que me costó sangre, sudor y lágrimas… No voy a decir nombres porque yo no hablo mal de ningún colaborador o ex colaborador de mi gobierno… Eso lo dejo para los desagradecidos y los que no quieren reconocer, yo no soy así, pero la gente sabe, los compatriotas saben qué fue lo que pasó en 2008 con la 125, y cómo casi nos hacen volcar por haber calculado mal los números, y ahora nos vienen a dar lecciones”. “No importa –sentenció la Presidenta–, nosotros no vamos a ofender ni agraviar a nadie, pero ¿saben qué?, nos gusta la gente que se hace cargo de las cosas; porque nosotros nos hemos hecho cargo de todo, de lo que hemos hecho mal y de lo que otros han hecho mal también”.
Para finalizar, Cristina dedicó unas palabras de agradecimiento al gobernador de La Pampa, Oscar Jorge, por presentarse a las elecciones como candidato municipal de la capital pampeana. “Yo quiero agradecerle a un hombre, que es el gran protagonista de esto que significa que la política no puede ser una calesita donde siempre giran los mismos caballitos, que la política debe ser recambio, renovación, formación de cuadros, de nuevos dirigentes. Nuestro movimiento, no solamente el Frente para la Victoria, el peronismo, la política del país, necesita de la formación de nuevos cuadros nacionales, populares y democráticos, que estén a la altura de la historia”, sostuvo. “Y yo quiero decirle a este gran gobernador, a este gran pampeano, a Oscar Jorge, este hombre que ha ocupado las más altas jerarquías de esta provincia, que hoy contribuye, ayuda y coopera como candidato a intendente de Santa Rosa, La Pampa, a que esa renovación, a que ese trasvasamiento generacional, a que ese cambio dirigencial, se haga sin egoísmos, sin estar siempre él mismo en primera línea. Vengo viendo a algunos desde 1983. Es necesario, por todos, pampeanos y pampeanas, por ustedes que peinan canas, por sus hijos, por sus nietos, dar esta lucha, que es por la patria y por la Argentina”, redondeó. “Por eso vine hoy a La Pampa. Que nadie se confunda. No vine solamente a inaugurar obras, no vine solamente a entregar subsidios: vengo a agradecer a los argentinos que creen que otra patria, otro país y otra La Pampa es posible”. “Gracias a todos –se despidió Cristina, con la voz emocionada–. Los quiero mucho”.