En el marco del Día Internacional de las Mujeres Trabajadoras, el Gobierno de la provincia de Buenos Aires realizó la conmemoración de la fecha que este año se presenta en un escenario de suma complejidad para las conquistas en materia de derechos. La avanzada libertaria, colonial y antifeminista de La Libertad Avanza, con Javier Milei a la cabeza, fue un punto central de reflexiones por parte de las referentes dentro de la esfera política y, en particular, del Gobierno bonaerense.
Fueron la vicegobernadora Verónica Magario y la ministra de Mujeres y Diversidad Estela Díaz (con el acompañamiento del propio Axel Kicillof) quienes encabezaron este viernes el acto por el 8M en la Gobernación, actividad que reunió también al conjunto de funcionarias bonaerenses para poner en discusión los desafíos venideros de cara al futuro.
«En primera instancia, para nosotras las mujeres, que en realidad somos las que siempre hemos dado las luchas por más derechos, por que nuestras familias puedan tener un salario digno, puedan acceder a la educación, por sostener la salud de nuestras familias, nos vemos muy avasalladas en las medidas que toma el presidente de la Nación», sostuvo Magario frente a la concurrencia de figuras como la jefa de Asesores del Gobernador, Cristina Álvarez Rodríguez; la ministra de Ambiente, Daniela Vilar; la presidenta del Instituto Cultural, Florencia Saintout; y la secretaria general de la Gobernación, Agustina Vila.
«La verdad es que la violencia que está engendrando este presidente es una violencia que se ve reflejada en el ajuste, en el hambre, en la pérdida salarial, por supuesto, en la tristeza, en la depresión de nuestras familias», agregó la vicegobernadora.
«Todos los días es una cuestión distinta y una provocación distinta, lo decía claramente Estela, pero no es una provocación al mundo de la política y a las mujeres, es una provocación a todos los argentinos y todas las argentinas. Cuando uno somete a ajuste y hambre, lo único que está haciendo es destruir la nación y el funcionamiento de una nación», dijo, y añadió: «Eso no lo queremos ver más ni para nuestros hijos ni para nuestros nietos que vendrán en algún momento, pero mucho menos para nuestros abuelos. Y cuando se ataca a cada una de las mujeres, se ataca a las familias argentinas».
Quien también dejó sus definiciones fue Estela Díaz, ministra de las Mujeres, Políticas de Género y Diversidad Sexual de la provincia de Buenos Aires, una de las áreas que más ha sido atacada por el actual oficialismo, no solo desde su llegada al poder sino como eje mismo de la campaña de 2023. En ese marco, las políticas públicas vinculadas al movimiento de mujeres y el colectivo de diversidad se convirtieron en blanco central de mentado «plan motosierra».
«En este contexto de ajuste, en el que han provocado pobreza y hambre, y además el ataque que manifiesta en contra de los derechos que las mujeres han conquistado a lo largo de estos cuarenta años de democracia, en una lucha pacífica organizativa, territorial, amorosa, de cuidado, de pensar una sociedad mejor, no solo para las mujeres sino para el Gobierno», expresó la titular de la cartera ministerial.
Díaz señaló a la gestión de Milei y dijo: «No para de provocarnos, el Ministerio tiene discontinuadas la inmensa mayoría de las políticas y hoy, en una provocación mayor, el vocero presidencial dice que va a eliminar el Salón de las Mujeres para hacerlo el de los próceres, están haciendo disposiciones que obligan a nombrar a los cargos con o. Por ejemplo, yo pasaría a ser ahora el ministro de las mujeres».
En tanto, Magario concluyó: «Desde acá, desde la provincia, con un gobernador dispuesto a sostener los derechos y las conquistas que hemos tenido a lo largo de todos estos años, vamos las mujeres a seguir trabajando en pos de eso y de sostenerlo. Hoy es sostenerlo frente a un presidente que quiere derrumbar todo, destrozar todo».