En una carta dirigida al intendente Julio Garro y al delegado de Arana, Darío Donadia, desde el Comité Popular y el Comité de Crisis solicitaron al Municipio refuerzos en la cantidad y calidad de los alimentos que se entregan a los nuevos comedores y merenderos de esta localidad y advirtieron que en las últimas entregas «se evidencia un deterioro de los mismos».
La carta entregada esta semana pone el foco en la tarea que llevan a cabo los nueve merenderos, comedores y ollas populares de Arana, que desde que comenzó el aislamiento social preventivo y obligatorio (ASPO) hasta la fecha, se detalla, recibieron en total «5 entregas de alimentos frescos, de 3 bolsas de papas, cebolla, zapallo y zanahoria, y 21 pollos».
«En las últimas entregas se evidencia el deterioro del estado de los mismos, lo que ha incrementado el descarte e intensificado las tareas de recuperación parcial de vegetales para su aprovechamiento. Esta situación disminuyó notablemente el rendimiento de los insumos entregados para la elaboración de viandas, así como su período de conservación», advirtieron en la misiva entregada al delegado y al intendente.
Francisca Ledesma, de la organización Barrios de Pie-Libres del Sur, explicó a Contexto que «los frescos no están viniendo en buen estado. Entiendo que no son compras que está haciendo la Municipalidad, sino que son donaciones que a ellos les llegan, pero medianamente deberíamos chequearlo y fijarnos. Lo que no sirve hay que tirarlo. A nosotros, que sabemos lo que es, no nos gusta tirar. No podés estar tirando».
«Cuando vienen las cosas feas hago que mis compañeras lo limpien, saquen todo y cocinamos con eso. Pero no podemos esta así. Nos sentimos que estamos mendigando para resolver problemas que tendrían que resolver ellos», sostuvo Ledesma, quien destacó que hoy se encuentran «haciendo el trabajo del Estado».
Vale destacar que, al igual que muchas organizaciones, durante estos últimos meses Barrios de Pie-Libres del Sur vio un gran aumento de la demanda, producto de la agudización de la crisis social. «Durante la pandemia todos nuestros comedores se multiplicaron, hay el doble y en algunos comedores hasta el triple de gente que vienen a buscar merienda, almuerzo y cena», explicó Ledesma.
La concejala del Frente de Todos Yanina Lamberti, que forma parte de varios Comités de Crisis, entre ellos el de Arana, explicó a Contexto que en todos estos espacios «se está sintiendo una gran cantidad de familias que obviamente están en una situación complicada producto de la pandemia, que ha agravado la situación económica. Hay una situación social que ha llevado a que se necesite hacer un refuerzo en la alimentación a la población».
«Las ollas populares vienen cumpliendo un rol fundamental en esto», destacó la concejala, quien explicó que hoy «están teniendo muchas dificultades para poder sostener las ollas porque la ayuda del municipio es muy escasa».
«La gota que rebalsó el vaso es que las verduras vinieron con muy mala calidad. Prácticamente inutilizable», puntualizó Lamberti. «Se necesita hacer un refuerzo alimentario. Más cantidad de comida, mejor calidad nutricional -incluyendo huevos y carne- y mayor cantidad de secos, obviamente con la calidad que tienen que tener», agregó.
La referente de Barrios de Pie-Libres del Sur coincidió en esa línea. «El Municipio o el Estado debería hacer más partícipe a las organizaciones, porque si no ellos no nos hacen un favor trayéndonos estas cosas. Nosotros hacemos el favor de hacer el trabajo que deberían estar haciendo ellos. Estamos a la cabeza de la pandemia exponiéndonos para dar un plato de comida a los que menos tienen y somos los menos reconocidos», sostuvo Ledesma. «No pretendo que nos den una medalla en honor a la cocinera o en honor al trabajo, pero por lo menos que manden las cosas como tienen que mandar, como tiene que ser», destacó.
«El Municipio debería estar mucho más presente. No con propagandas, diciendo que van a duplicar la cantidad de alimentos a los comedores. Yo quisiera que me digan en qué comedor fue eso, porque en este comedor y en la organización no multiplicaron nada de lo que es la mercadería», reiteró Ledesma.
Lamberti explicó que esta realidad no se vive exclusivamente en Arana. «En el Comité de Villa Elvira, por ejemplo, una localidad más poblada, se está recibiendo solamente un pollo por olla. Verdaderamente la situación es muy complicada».
Contexto viene siguiendo de cerca la problemática. La semana pasada, referentes de comités y ollas populares de la región también advirtieron que lo que se entrega «no alcanza ni para quince días».