En la última sesión, la Cámara de diputados de la provincia de Buenos Aires aprobó el proyecto de fomento para la industria audiovisual bonaerense enviado por el Ejecutivo provincial e impulsado por el Instituto Cultural que preside Florencia Saintout. Para acompañar el proyecto estuvo presente un grupo de actores, encabezados por Pablo Echarri.
La iniciativa fue aprobada por más de dos tercios y pasó a la Cámara de Senadores, en donde estiman será tratada en la sesión de diciembre, según informaron fuentes legislativas a Contexto.
El proyecto apunta a proteger el trabajo y reconocer el valor simbólico e identitario, como así también el aporte al desarrollo económico de esta industria cultural, declarándola como una “actividad productiva de interés público, valor estratégico” y “patrimonio invaluable”.
Asimismo, tiene por objetivo “estimular, fomentar, promover y proteger la creación, producción, distribución y exhibición nacional e internacional de contenidos audiovisuales bonaerenses, en su cadena de valor, en su dimensión social, laboral, cultural e industrial, telecomunicacional y comercial, así como su difusión y conservación como parte del patrimonio cultural de la provincia, como aporte a la soberanía nacional, al fortalecimiento de la memoria, a la diversidad de la identidad, al desarrollo de las culturas (sic) y la educación”, según expresa el texto.
“La producción audiovisual es una industria y como toda industria, genera y promueve el empleo, genera y promueve el desarrollo de la economía. Quiero que pensemos en el simple hecho de ir a ver una película al cine, en esa simple acción, qué es lo que se mueve: trabajadores y trabajadoras, musicalizadores, guionistas, actores, actrices, maquilladores, vestuaristas, distribuidores, hasta la persona que nos vende una entrada o ese día la persona que nos acompaña a la butaca que nos corresponde. Con esta industria no sólo generamos empleo a nivel local, sino que también generamos divisas a través del impacto de nuestras maravillosas producciones que nos representan también a nivel internacional”, justificó la diputada de Unión por la Patria, Margarita Recalde.
En su justificación, Recalde se detuvo en una nota publicada por el diario Clarín que se titula poca producción nacional y una baja histórica en el consumo, el complejo panorama del cine de la Argentina: “Qué es lo que nos está diciendo el grupo Clarín, que en el año 2024, las entradas de cine cayeron un 31% en comparación del 2023, 14 millones menos de espectadores tienen hoy el cine en la Argentina. Qué es lo importante de esta discusión, que si la baja del consumo cae en bienes y servicios en los hogares de la Argentina, cómo no va a caer la del consumo cultural, cae muchísimo más y sobre todo en un contexto donde hay un Gobierno nacional que para ellos ir al cine, tener salidas recreativas, ir a la cancha, justamente no es una necesidad, pero para nosotros y para nosotras que defendemos esta ley, sí es una necesidad y también es un derecho de los trabajadores y las trabajadoras tener la posibilidad de disfrutar de esa salida”.
Como novedad del proyecto, la legisladora oficialista recalcó la creación del fondo estratégico, que entre otras cosas, “se va a dotar del consumo de los trabajadores y de las trabajadoras, porque va a proyectarse también en función de la venta de entradas”.
En este punto, “creo que los legisladores y las legisladoras de nuestros bloques que también tienen representatividad en las fuerzas políticas a nivel nacional, tenemos una tarea que es trabajar para defender y para volver a darle dignidad al salario de los trabajadores, para mejorar los ingresos en nuestros hogares, porque de esa forma es la única forma que tenemos para reactivar el consumo en la Argentina que es el que hace grandes a nuestras industrias y sobre todo a la industria cultural”.
“Promover la industria cultural para nosotros es un mandato, promover la identidad bonaerense siempre y trabajar también para que en el futuro todas las producciones que se generen a partir de esta iniciativa, puedan verse reflejadas nuestra identidad, sean un espejo de nuestra identidad bonaerenses y que sea también esta ley la contracara de los discursos antinacionales, antidemocráticos, antipopulares y anti soberanos que promueven desde el Gobierno Nacional y también parece de algunos legisladores”, concluyó recalde.
Por su parte la diputada del bloque de UCR+GEN y presidenta de la Comisión de Asuntos Culturales, Viviana Dirolli, advirtió que “no es muy difícil explicar lo que implica el audiovisual en términos de promoción de nuestra propia cultura, pero muchas veces se soslaya o subestima el impacto en términos económicos”.
En esa línea, remarcó que “por cada mil pesos invertidos se generan entre 600 y 900 en el resto de la cadena de valor” y que “por cada 100 empleos directos, se crean entre 50 y 70 en otros sectores económicos”. Y tras denunciar “una enorme campaña de desprestigio del cine nacional por parte del gobierno nacional”, ponderó que el proyecto sancionado, “que tenía un esquema de fomento a nivel local, incorpore un esquema para atraer inversiones”. En este marco, sostuvo que “la provincia de Buenos Aires tiene una oportunidad muy importante por su extensión territorial, por las locaciones; es una provincia que tiene ciudades, campos, sierras, salinas, puertos, mar; que tiene recursos artísticos y técnicos calificados, que tiene infraestructura adecuada. Resulta difícil pensar que cualquier producción que tenga como destino la Argentina no elija la provincia para hacer algunos de los proceso”.
Tras la aprobación del proyecto, la presidenta del Instituto Cultural, Florencia Saintout, expresó: “Agradecemos a todos los legisladores que acompañaron la propuesta, entendiendo que se trata de un impulso a una industria que pasa por un momento difícil. Una oportunidad que se abre en un contexto de ataque y persecución de la cultura nacional y de nuestros artistas”.
“Una política pública que se construyó desde abajo, junto a asociaciones de directores, productores, actores y actrices, sindicatos, universidades, y diferentes organismos que integran el sector audiovisual bonaerense. Un reclamo histórico que hoy es una realidad”.
