La Cámara de Diputados evalúa sesionar el sábado por primera vez de modo digital, según afirmó ayer su presidente, Sergio Massa. Entre hoy y mañana, el cuerpo afinará la capacitación en el uso de la plataforma virtual de votación, que registró algunas complicaciones. Esto debía ser refrendado en una reunión de labor parlamentaria que se desarrollaba anoche al cierre de esta edición, en la que también Massa y los presidentes de los bloques deberían ajustar el temario de la sesión.
Estas definiciones se plasmaron ayer al finalizar el simulacro de sesión mixta –presencial y telemática– que hizo la Cámara Baja en base a una capacitación vinculada a la denominada «Ley Micaela», que establece la capacitación obligatoria en género y violencia de género para todas las personas que se desempeñan en la función pública de los tres poderes del Estado.
Quien impartió la capacitación fue la ministra de las Mujeres, Géneros y Diversidad, Elizabeth Gómez Alcorta. La iniciativa había sido suspendida antes de la pandemia. Fue también con el fin de poner a prueba el sistema digital en la previa a la primera sesión virtual de la historia del Congreso, que antes de los problemas registrados ayer estaba prevista para este jueves al mediodía.
En el recinto participaron bajo estrictas medidas sanitarias cerca de cincuenta diputados y diputadas. Los demás –del total de 257– lo hicieron a través de conexiones telemáticas desde sus casas o desde legislaturas provinciales.
Según indicó Massa, los problemas estuvieron vinculados a la hora de la votación, debido a que el sistema permite un tiempo determinado para hacerlo y muchos diputados no pudieron ingresar o fueron bloqueados ante los constantes reseteos.
Entre los más de cuarenta legisladores que participaron en el recinto estuvieron el jefe del bloque del Frente de Todos, Máximo Kirchner; el jefe del interbloque Juntos por el Cambio, Mario Negri; el titular del Bloque del PRO, Cristian Ritondo; el jefe del interbloque Federal, Eduardo Bucca; el presidente del interbloque Unidad Federal para el Desarrollo, José Luis Ramón, y los legisladores de los monobloques de izquierda, Romina del Plá y Nicolás del Caño. Asimismo, los diputados oficialistas Cecilia Moreau, Leopoldo Moreau, Eduardo Valdés. Por la oposición, las radicales Karina Banfi, Brenda Austin y Miguel Bazze.
En cuanto al temario que analizaban anoche, la mayoría de las bancadas apuntan a consensuar un texto que exima del pago del impuesto a las ganancias a los trabajadores considerados esenciales, con la idea de que ese gravamen no incluya las horas extras. También se prevé incluir algunas iniciativas relacionadas con las situaciones generadas por los efectos de la pandemia en pymes y monotributistas, y regular un sistema para facilitar la presentación de recetas médicas.
En los días anteriores, en la reunión de Labor Parlamentaria, Massa junto a los presidentes de los distintos bloques coordinó la metodología para llevar adelante las primeras sesiones digitales. El sistema a utilizar había sido aprobado la semana anterior por la comisión de Modernización. La Cámara de Diputados fue acondicionada con pantallas y un sistema de sonido especial.
No entrará en debate por el momento el proyecto que preparó el oficialismo para gravar por única vez a las grandes riquezas para hacer frente al impacto económico de la pandemia, aunque su redacción ya finalizó. Desde el oficialismo en Diputados señalaron que el impuesto alcanza a 12.000 personas físicas que hayan declarado un patrimonio superior a los 200 millones de pesos (cerca de 3 millones de dólares, al tipo de cambio oficial).
A su vez, está definido que en esta sesión jurarán en el recinto los tres diputados que se suman al cuerpo. Ellos son Claudia Bernazza, en reemplazo del embajador en Brasil Daniel Scioli; Lisandro Bormioli, que ocupará la banca que dejó vacante el nuevo ministro de Desarrollo de Comunidad bonaerense, Andrés «Cuervo» Larroque; y José Luis Patiño, de Cambiemos, que reemplazará a Elisa Carrió, quien renunció a su banca el pasado 1° de marzo.
