«Luego de intensas negociaciones, el Gobierno nacional logró cerrar con el FMI un acuerdo que permitirá al país refinanciar los compromisos asumidos en el fallido programa Stand By de 2018 que presentaba vencimientos concentrados principalmente en los años 2022 y 2023″, anunció en la tarde del jueves el Gobierno nacional a través de un comunicado en el que dio algunos detalles de la norma que enviará al Congreso para comenzar el debate la semana que viene.
El Fondo Monetario Internacional, por su parte, emitió un comunicado y realizó una conferencia de prensa con la participación del director del Departamento Occidental del Fondo, Ilan Goldfajn; la vicedirectora, Julie Kozack; y el director de la misión argentina, Luis Cubbedu. «El personal técnico del FMI y las autoridades argentinas han llegado a un acuerdo sobre un programa económico pragmático y realista», sostuvieron desde el organismo.
Según detalló el Gobierno argentino, el programa de Facilidades Extendidas incluye diez revisiones trimestrales en los próximos dos años y medio, con un primer desembolso luego de aprobado el proyecto en el Congreso. El resto de los desembolsos se realizará una vez completada cada revisión. Cada uno tendrá un período de repago de diez años, con un plazo de cuatro años de gracia, por lo que comenzará a pagarse en 2026.
«Durante los meses de negociaciones se ha logrado llegar a entendimientos con el staff del FMI acerca de la importancia de alcanzar un programa acorde a las necesidades y desafíos de la Argentina y que no implique una inhibición en la recuperación económica», sostuvieron desde el Ministerio de Economía, y brindaron detalles sobre los consensos alcanzados en materia de inflación y tarifas.
«En este sentido, hay coincidencia en que la inflación es un fenómeno multicausal -siendo uno de los principales desafíos de la política macroeconómica- que debe ser abordado desde un enfoque integral. La condición necesaria para consolidar la desinflación es mantener un proceso de acumulación de reservas que le otorgará al Estado mayor autonomía en la ejecución de políticas públicas», expresa el comunicado. Como ya se había informado, el acuerdo busca bajar gradualmente el financiamiento del déficit a través del Banco Central, una política de tasa de interés real positiva para otorgar mayor atractivo a los activos en pesos y una política de control de precios para anclar expectativas inflacionarias.
Por el lado de las tarifas, anunciaron que se trabajará en un esquema de segmentación tarifario que eliminará los subsidios a los sectores de mayores ingresos, e implementará el esquema que se había votado en el Congreso durante el macrismo pero fue vetado, que implica indexar la variación de las tarifas al coeficiente de variación salarial (CVS). En el caso de quienes tienen tarifa social, el aumento será del 40 % del CVS, mientras que para el resto de los usuarios residenciales será del 80 % del CVS.
Durante el mediodía, el presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Massa, se reunió con los presidentes de los principales bloques opositores para diagramar el cronograma que seguirá el debate parlamentario. Si bien el proyecto general ya está en manos de los diputados que participaron de la reunión, los anexos con los distintos memorándums que detallan los lineamientos del acuerdo se conocerán más tarde.
El lunes comenzarán las exposiciones en la Comisión de Presupuesto y Hacienda, que preside el oficialista Carlos Heller, y los primeros oradores serán el ministro de Economía, Martín Guzmán, el enviado argentino ante el Fondo, Sergio Chodos; el presidente del Banco Central, Miguel Pesce; y el secretario de Hacienda, Raúl Rigo.