La secretaria de Legal y Técnica, Vilma Ibarra; el ministro de Salud, Ginés González García; y la ministra de Mujeres, Géneros y Diversidad Sexual, Elizabeth Gómez Alcorta, presentaron ante el plenario de comisiones el proyecto de Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE) del Ejecutivo nacional. «Tenemos que estar a la altura de la responsabilidad histórica para que nunca más una mujer en Argentina muera por un aborto clandestino», manifestaron.
El proyecto comenzó formalmente su recorrido en el Congreso de la Nación en el plenario de comisiones de Legislación General, con Cecilia Moreau a la cabeza; Mujeres y Diversidad, presidida por Mónica Macha; Legislación Penal, a cargo de Carolina Gaillard, y Acción Social y Salud, conducida por Pablo Yedlin.
Vilma Ibarra dio el puntapié inicial y celebró «la decisión del presidente Alberto Fernández de enviar los dos proyectos del Poder Ejecutivo, el de IVE y el Plan de los Mil Días, al destacar la voluntad del Estado de acompañar los proyectos de maternidad».
La funcionaria nacional afirmó que «ninguna mujer está esperando que se apruebe el proyecto para abortar», remarcó que el Poder Ejecutivo busca que el Estado «acompañe la maternidad», y expresó la necesidad de terminar también «con el enorme negocio de los abortos clandestinos».
«No va a alcanzar solo con esta ley, sino que hay que reforzar la educación sexual integral y formar una política respecto a la prevención de la violencia de género y el abuso sexual», expresó Ibarra, quien rechazó «la política de penalizar a la mujer».
«Hoy les ofrecemos amenazas de cárcel a las mujeres, hay un nivel de crueldad enorme. Entonces les decimos que es a esa mujer a quien queremos atender, la queremos cuidar y que sepa que tiene el derecho de ser atendida», sostuvo una de las autoras del proyecto.
«No va a alcanzar solo con esta ley, sino que hay que reforzar la educación sexual integral»
Vilma Ibarra
«Cada persona podrá seguir viviendo y decidiendo según sus convicciones, pero algo habrá cambiado: vamos a disminuir los embarazos no deseados, las muertes, evitado infecciones intrauterinas y muertes», aseveró Ibarra.
Por su parte, González García manifestó que el aborto clandestino «tiene solución» y que se «trata de un problema serio», por lo que la legalización «elimina una causa de muerte». «Si el aborto fuera para varones, ya sería ley hace mucho», resaltó, y destacó que «se trata de justicia social, porque la que puede abortar en un lugar seguro lo hace, con dolor pero lo resuelve, mientras que las más débiles no lo resuelven o a veces lo hacen con muerte».
Acompañado por filminas, el titular de la cartera sanitaria informó que en 2017 se registraron 38.599 egresos hospitalarios por aborto, con la provincia de Buenos Aires registrando el mayor número de casos (15.198), seguida por Salta (3.172), Mendoza (2.475) y Tucumán (2.426).
«Hay demasiada evidencia de que esto tiene solución. Nadie quiere los aprietes, no tiene que haber violencia. Piensen cuando tengan que decidir lo que sufren estas mujeres. Es un tema histórico, que tiene muchos años y que tenemos la posibilidad de resolverlo bien», dijo González García al cerrar con un mensaje para legisladores y legisladoras.
«Si el aborto fuera para varones, ya sería ley hace mucho»
Ginés González García
Por su parte, Gómez Alcorta aseguró que la iniciativa «viene a dar una respuesta concreta a un problema de salud pública» y que la legalización de la interrupción del embarazo disminuye la mortalidad materna, salva vidas de mujeres y elimina riesgos para la salud y consecuencias para la capacidad reproductiva futura.
«La legalización disminuye los abortos, que es algo que deseamos todos y todas. Por otro lado, como explicó el ministro de Salud, no estresa al sistema de salud sino que, por el contrario, lo desestresa. La legalización no implica más costos, sino un ahorro para el Estado», manifestó la ministra.
«Tenemos que estar a la altura de la responsabilidad histórica para que nunca más muera una mujer en Argentina por un aborto clandestino», concluyó.
«Tenemos que estar a la altura de la responsabilidad histórica para que nunca más muera una mujer en Argentina por un aborto clandestino»
Elizabeth Gómez Alcorta
Previo a la intervención de los funcionarios nacionales, Moreau, responsable de la conducción del plenario, permitió a diputados y diputadas de las comisiones presentes brindar algunas palabras, entre ellos, quienes encabezan las comisiones. «Es un día histórico», celebró Carolina Gaillard. «Aquí el debate va a ser si el aborto es legal o si el aborto es inseguro. Los abortos por estar penalizados arrojan a las mujeres a la clandestinidad y es un riesgo para su vida», manifestó.
En la misma línea, Macha manifestó que «los abortos ocurren y lo que es clandestino va a persistir si no hay una regulación por parte del Estado. Y esto es lo que estamos buscando con este proyecto».
Por su parte, Yedlin pidió «expresar las garantías para un buen nivel de debate sin caer en chicanas, que sea equilibrado y que podamos discutir los temas, porque todos tienen parte de una verdad que nunca es absoluta».
También hablaron las vicepresidentas de Salud y Legislación Penal, Carmen Polledo y Marcela Campagnoli, respectivamente, dos voces en contra de la iniciativa pero que celebraron el diálogo y el debate. «Yo no estoy de acuerdo con la postura que se está presentando en el día de hoy, pero eso no va a ser nunca un obstáculo para impulsar el respeto entre nosotros», manifestó Polledo.
«Estamos ampliando derechos»
Luego de la presentación del Poder Ejecutivo, las comisiones continuaron con una ronda de exposiciones de voces a favor y en contra de la iniciativa, jornada que continuará el día de mañana. En total, son cincuenta las personas que expondrán.
Entre las voces a favor, se destacó la de la abogada feminista y pionera de la Campaña por el Aborto Legal, Seguro y Gratuito, Nelly Minyersky. «Estamos ampliando derechos. No obligamos a nadie, pero no queremos que nadie nos obligue a nada. Estamos legislando para millones», manifestó.
Otra de las voces a favor fue la de la ministra bonaerense de Mujeres, Géneros y Diversidad Sexual, Estela Díaz, quien destacó que «pocas leyes brindan la oportunidad de hacer un cambio tan significativo en la vida y la salud de las mujeres de manera inmediata. Este proyecto salva vidas. Tienen la oportunidad de dejar atrás la injusta y humillante clandestinidad del aborto. Y como vivimos en una sociedad desigual, resulta ineludible ligar esta experiencia a las condiciones sociales, reales y concretas de posibilidad de su ejercicio. Aquí es donde cobra un papel central el rol de Estado, de las políticas públicas y, por supuesto, de la justicia social».
La ex intendenta de Rosario, Mónica Fein, explicó las experiencias sanitarias de su ciudad. «En estos diez años solo lamentamos dos muertes maternas. Ampliar derechos siempre es el camino. Nuestras maternidades públicas son ejemplo de parto respetado», explicó.
«Vamos a garantizar el derecho a la salud garantizando una práctica como el acceso al aborto», manifestó por su parte Silvia Oizerovich, médica ginecóloga del Programa de Salud Sexual y Reproductiva.