El sábado 30 de marzo se cumplió el primer aniversario de la Gran Marcha del Retorno. Miles de palestinos se manifestaron en la Franja de Gaza contra las políticas de ocupación del Estado de Israel.
La protesta que desde hace un año se realiza todos los viernes suele ser brutalmente reprimida por el Ejército de Israel y ha dejado numerosos muertos y heridos.
¿Qué es la Gran Marcha del Retorno?
En 2018 comenzó la Gran Marcha del Retorno que conmemoraba los setenta años de la ocupación de Palestina en el año 1948. Comenzó el 30 de marzo por ser el Día de la Tierra y la idea era culminar en el mes de mayo, sin embargo, hoy conmemoramos un año de marchas.
El Día de la Tierra Palestina se conmemora el 30 de marzo porque en esa fecha, hace 43 años, en 1976, los ciudadanos palestinos de Israel se levantaron en contra de la confiscación de sus tierras y como de costumbre el Estado israelí los reprimió a sangre y fuego.
Hay que entender que en 1948, cuando Israel se implanta en Palestina, los inmigrantes judíos poseían apenas el 6% de la tierra de Palestina y el pueblo autóctono, el pueblo palestino, poseía el 94% restante. Hoy, lamentablemente, los palestinos de Israel poseen sólo el 2,5% de la tierra. Los palestinos en Israel representan el 20% de la población y apenas posee el 2,5% de la tierra. Esto es el producto de una política sistemática de confiscación de la tierra de los palestinos.
Han sido numerosas las víctimas de la represión durante todo el año que ha trascurrido de la Gran Marcha del Retorno.
Las cifras son alarmantes, y lamento decirlo así porque, en nuestro caso, las víctimas se vuelven cifras. La realidad es que más de 260 palestinos han perdido la vida. Más de 10 mil fueron heridos y un alto porcentaje de ellos han quedado discapacitados de por vida.
¿Qué rol ha jugado el gobierno norteamericano de Donald Trump en ese contexto?
El gobierno de Donald Trump ha avalado y protegido a Israel en estas políticas, y el gobierno de Netanyahu ha extremado su represión. Ya no se conforman con la ocupación del territorio de Palestina. Trump, además de reconocer de manera unilateral y arbitraria a Jerusalén como capital de Israel y trasladar su embajada a esa ciudad, la semana pasada también reconoció la soberanía del Estado israelí sobre los Altos del Golán, que es territorio sirio ocupado.
¿Cómo ha reaccionado la comunidad internacional frente a estos hechos?
La comunidad internacional actúa de una forma inoperante y las fuerzas del mal, lideradas por Estados Unidos, se sienten impunes y con las manos libres. ¿Quién sabe qué pasará en otros sitios con este cambio de doctrina en la política internacional, al reconocer arbitrariamente un territorio ocupado, el territorio de los Altos del Golán que es sirio, como perteneciente al ocupante Israel? ¿Qué pasará con las Malvinas, por ejemplo?
Esta legitimación de la ocupación de los poderosos nos devuelve a la Ley de la selva. Parece que la comunidad internacional no se da cuenta de que este cambio amenaza a toda la humanidad, amenaza la convivencia entre las naciones, entre los Estados.
Ayer fue Jerusalén, hoy son los Altos del Golán, mañana pueden ser las Malvinas o Venezuela. ¿Cuántas tragedias más debemos sufrir para que el mundo entienda que esta política es criminal?
El gobierno de Netanyahu ha declarado que Israel es un Estado judío. ¿Cómo hay que interpretar esta decisión?
Si fuera otro país el que dictara este tipo de leyes, produciría un escándalo a nivel mundial y la condena sería unánime. Israel ha legalizado el apartheid y la comunidad internacional no reacciona. La Ley de Estado Nación afirma que “Israel es el Estado exclusivo de los judíos” y también que el derecho a la autodeterminación es “exclusivo de los judíos”. Durante la campaña electoral, Netanyahu ha reiterado que “Israel es sólo para los judíos”. Imaginen si un político de aquí dijera que Argentina es un Estado católico y sólo para los católicos, ¿cuál sería la reacción del mundo?
Todo ciudadano de este país es argentino, independientemente de su credo, incluyendo a los judíos. ¿Qué pasa con los judíos no israelíes, cuando Netanyahu define a Israel como el Estado judío? ¿Quiere decir que Argentina no es el Estado de los judíos argentinos?
Afortunadamente hubo algunas voces de los judíos argentinos que denunciaron esto y que manifestaron que su Estado es donde viven, donde han nacido.
En los últimos años, Israel ha promulgado más de cincuenta leyes que consagran la discriminación, el apartheid. Aun así, nos quieren hacer creer que es la única democracia en Medio Oriente.
¿Por qué esto no trasciende a nivel mundial?
Israel es sostenido por las grandes potencias y el poder mediático. Tienen todos los grandes medios a su servicio, de esa manera imponen un discurso en el que se justifica todo lo que hace el Estado israelí y de condena a todo lo que hacen los palestinos. Ven el mundo desde una sola perspectiva. Para ellos, el mundo es Israel y lo que ese Estado dicta.
En los años treinta la comunidad internacional le consintió muchas de sus políticas. Hoy el mundo consiente muchas de las políticas de Donald Trump y de Benjamín Netanyahu. La historia juzgó a Hitler y juzgará a Trump y a Netanyahu.