Con la llegada del nuevo Gobierno, la Justicia comienza a jugar sus cartas para acomodarse al nuevo panorama político y, tal como sucedió con la llegada de Mauricio Macri al poder en 2015, comienzan a limpiarse los expedientes de funcionarios del flamante equipo de Javier Milei.
La confirmación de Santiago Bausili, socio de Luis «Toto» Caputo y ex secretario de Finanzas durante el macrismo, llegó el mismo día en el que Comodoro Py revocó un procesamiento que tenía por negociaciones incompatibles con la función pública, ya que durante su paso por la Administración pública había favorecido a su exempleador, el Deutsche Bank, en una millonaria operación de emisión de deuda para el pago a los fondos buitre.
La denuncia original había sido presentada por el constitucionalista Eduardo Barcesat, que además alcanzaba a otros funcionarios. En 2021, el procesamiento había sido revocado, pero, luego de sumar más elementos probatorios, el juez Sebastián Casanello había insistido con el procesamiento.
El fallo de la Sala II de Casación Penal, con las firmas de Martín Irurzun y Eduardo Farah y la disidencia de Roberto Boico, llega en el momento justo para que el flamante funcionario ingrese al Estado sin pendientes en la Justicia, tal como sucedió con Mauricio Macri en 2015.
Bausili fue empleado del banco en cuestión entre 2007 y 2016, año en que ingresó a finanzas de la mano de Caputo. Pero en la investigación no solo consta que durante un breve período fue al mismo tiempo funcionario y empleado de la banca privada, sino que también era accionista de Deutsche Bank, que ofició de intermediario (a cambio de una millonaria comisión) entre el Estado argentino y el grupo de fondos buitre liderado por Paul Singer que litigaban contra el país.
Según la Procuraduría de Investigaciones Administrativas (PIA), Bausili mantuvo sus vínculos con el Deutsche Bank e incluso cobró dinero de la entidad cuando ya era funcionario.
Similares son las acusaciones que le valieron al flamante ministro de Economía, Caputo, con negocios que lo encontraron de los dos lados del mostrador cuando estuvo al frente del proceso de endeudamiento durante la Administración de Mauricio Macri.
Según trascendidos, durante las reuniones preparatorias que mantuvo Milei con el ex funcionario macrista, una de las condiciones de volver a ejercer un cargo público fue la de no tener expedientes tramitándose en Comodoro Py.
Apuntando a la vereda de enfrente, con la reapertura de la causa contra Cristina Fernández de Kirchner conocida como «Ruta del dinero K» (que fue cerrada luego de que el fiscal Marijuan admitiera que en diez años de investigación no pudo probar el supuesto lazo societario entre la exmandataria y el empresario Lázaro Báez), el Poder Judicial comienza nuevamente a posicionarse como un actor clave de los tiempos políticos por venir.
