La falta de dispositivos tecnológicos y de conectividad –o su baja calidad– es una de las principales problemáticas que la educación virtual puso de manifiesto durante el aislamiento social. Los programas de educación a distancia que lanzaron los gobiernos nacional y bonaerense –en cuyas plataformas web se puede navegar gratuitamente–permitieron parcialmente la continuidad de las clases. Por eso, la docencia pide la liberación de datos para poder darle mejor calidad a los estudios en línea.
En la provincia, los referentes del Frente de Unidad Docente Bonaerense (SUTEBA, UDOCBA, AMET, FEB y SADOP) mantuvieron el miércoles una reunión con autoridades de la Dirección General de Cultura y Educación donde, entre otras demandas, pidieron «recursos adecuados para solucionar los inconvenientes que se registran en el acceso a la conectividad y los recursos tecnológicos tanto de los alumnos y sus familias como también de los docentes».
«Solicitamos datos subsidiados para docentes y estudiantes. El gobierno tomó el tema y seguramente habrá una respuesta la semana que viene», afirmó a Contexto Gustavo Salcedo, secretario gremial de UDOCBA.
El pedido se sustenta en que al menos en los próximos dos meses proseguirán las clases virtuales. Según el ministro Nicolás Trotta, las clases podrían volver en agosto o septiembre a través de un modelo mixto (virtual y presencial), aunque no está confirmado. Todo esto de acuerdo a cómo avancen los contagios de COVID-19 en el país. Lo que sí es una certeza es que las clases no volverán a ser iguales hasta tanto no haya una vacuna.
En el plano nacional, otra vía para darle respuesta a esta demanda fueron los contactos entre el Ente Nacional de Comunicaciones (Enacom) y el Ministerio de Educación. El titular del Enacom, Claudio Ambrosini, afirmó que ese organismo se encuentra trabajando junto con la cartera educativa para garantizar mejor conexión con las escuelas.
«El ministro Nicolás Trotta nos pidió que identifiquemos las cuentas de los maestros para que les liberen los datos», señaló. Y añadió que desde ese organismo y el Ministerio buscarán negociar con las empresas que brinda el servicio de Internet para alcanzar la liberación de datos y permitir de este modo que los docentes puedan realizar las clases de modo virtual.
«La comunicación es un servicio esencial, y la decisión del gobierno es que, mientras transcurre la pandemia, no haya un sobresalto a los bolsillos», sostuvo en declaraciones radiales.
Desde el ámbito de los colegios privados, el gremio SADOP consultó a docentes de todo el país y publicó un informe donde indicó que la mayoría (un 63%) de los que se desempeñan en escuelas privadas no cuenta con una computadora personal para seguir enseñando a distancia.