El aumento de las jubilaciones, la Asignación Universal por Hijo y las asignaciones familiares anunciado por el presidente Alberto Fernández sigue dando que hablar.
Una de las promesas de campaña de Fernández fue la de avanzar con una recomposición en los haberes jubilatorios. «Nuestro compromiso es con los que menos tienen», sostuvo al anunciar el aumento del 13% que alcanzará al 86,8% de los beneficiarios del sistema de seguridad social: unos 13,6 millones de personas.
Alejandro Vanoli (titular de anses): «El Estado está haciendo el máximo esfuerzo en el sistema previsional y con un criterio de equidad».
En suma, este aumento se compone con una suma fija de 1.500 pesos más un extra del 2,3%, un incremento superior al 11,56% que hubiesen percibido por la reforma previsional impulsada por el gobierno de Mauricio Macri, que ya provocó una importante pérdida del 14% en el poder adquisitivo de los jubilados.
A pesar de ello, integrantes del anterior gobierno, acompañados por los medios hegemónicos, salieron a la carga: reclamaron la fórmula anterior y se animaron a hablar de «ajuste». La principal crítica realizada por la oposición es el corte. Mientras el 3,5% de jubilados y jubiladas que cobran la mínima van a percibir un aumento y alcanzarán un promedio de 15.890 pesos, los que perciben haberes medios y altos tendrán un incremento menor. En este marco, desde el gobierno salieron a remarcar que se trata de una emergencia y que justamente se empezó con «los que menos tienen».
El titular de ANSES, Alejandro Vanoli, resaltó que el incremento «va a ser positivo en términos reales», y destacó que «el Estado está haciendo el máximo esfuerzo en el sistema previsional y con un criterio de equidad», por lo que «el objetivo del cambio de movilidad jubilatoria» dispuesto por el gobierno «no era tener un ahorro fiscal absoluto, sino buscar un instrumento para poder beneficiar a los sectores más postergados».
Por su parte, el ministro de Trabajo, Empleo y Seguridad Social, Claudio Moroni, también salió a defender las cifras. «Estamos en emergencia, con lo cual lo que estamos tratando de hacer es redistribuir los recursos a los sectores de más abajo, y esto es solo por estos seis meses. Acá no es una política que ha venido para quedarse, es solo que en esta situación de emergencia estamos atendiendo a los sectores de más bajos recursos», destacó.
En ese sentido, Moroni adelantó que «a partir de junio va a haber una fórmula de movilidad bien hecha, no como la anterior», en referencia a la previsional impulsada por Cambiemos. «Estamos tomando estos seis meses en donde estamos realmente en una situación crítica. Yo no digo que los jubilados que reciben menos aumentos sean millonarios ni nada por el estilo, sino que estamos haciendo lo mejor que podemos dentro de las posibilidades», ratificó.
Luana Volnovich (titular del PAMI): «No hubo un solo día del gobierno de Cambiemos con alguna decisión favorable a los jubilados».
«El 86% de los beneficiarios de la seguridad social, que son los jubilados que menos cobran, tienen que ser prioridad», destacó por su parte la titular del PAMI, Luana Volnovich, y apuntó contra la oposición. «Ellos tienen una responsabilidad, porque la pérdida de poder adquisitivo y la situación de degradación de la sociedad argentina, y en particular de los jubilados, es producto de sus malas decisiones. No hubo un solo día del gobierno de Cambiemos con alguna decisión favorable a los jubilados», sostuvo.
Uno de los que se sumó a hablar al respecto y se refirió a las críticas de la oposición fue el economista Hernán Letcher. «Cuando uno mira el semestre diciembre-mayo encuentra que la actualización que se hizo en diciembre, con la movilidad anterior, y esta actualización alcanza a un aumento del 25%, mientras que si lo hubieras hecho con las dos movilidades anteriores hubieras alcanzado al 21%. No hay forma de hablar de ajuste», explicó el director del Centro de Economía Política Argentina (CEPA).