Por Pablo Pellegrino
El INDEC difundió este jueves el Índice de Precios al Consumidor de septiembre, que saltó casi dos puntos porcentuales con respecto al mes anterior y se ubicó en 5,9%. En lo que va del año, el índice acumula un 37,7% y se ubicaría al final de 2019 por encima de los 55 puntos porcentuales.
Aunque no deja de sorprender, la cifra era previsible después de la megadevaluación de la semana posterior a las PASO, constituyéndose como la más alta medición mensual desde septiembre del año pasado, cuando alcanzó el 6,5%, y la tercera más alta durante el gobierno de Mauricio Macri.
Prendas de vestir y calzado y Salud, que se dispararon 9,5% y 8,3%, respectivamente, fueron los rubros que mayores aumentos registraron, seguidos por Bienes y servicios varios (8,2%), Recreación y cultura (7,6%), Equipamiento y mantenimiento del hogar (7,2%) y Comunicación (6,7%).
Prendas de vestir y calzado y Salud, que se dispararon 9,5% y 8,3%, respectivamente, fueron los rubros que mayores aumentos registraron.
Alimentos y bebidas, uno de los tres bloques que mayores incrementos registran en términos interanuales y de los que más pesan sobre los sectores más empobrecidos, registró un salto de 5,7%, por debajo del promedio general. Sin embargo, según el órgano estadístico, fue el que mayor incidencia tuvo en el salto inflacionario de septiembre en todas las regiones.
Un relevamiento realizado por la consultora Proyecto Económico, que dirige la economista Fernanda Vallejos, sostuvo que en 46 meses de gestión el gobierno de Mauricio Macri acumula un alza del Índice de Precios al Consumidor del 267,5%, «con inflaciones interanuales por arriba de 50% durante casi todo el año 2019, consolidando niveles de alrededor de 55%».
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«A la cabeza de esta variación estuvieron los servicios regulados, a los que el gobierno dio lugar, permitiendo aumentos abusivos, favoreciendo la rentabilidad de esos sectores. En primer lugar, los englobados en el capítulo Vivienda (electricidad, gas y luz), aunque también autorizó aumentos permanentes en comunicaciones (por ejemplo, telefonía celular), salud (medicina prepaga y medicamentos) y transporte», indicaron.
«Como en el acumulado sobresalen los incrementos en bienes más inelásticos como son los alimentos, el transporte o la electricidad, mientras que los de menor variación son bienes más elásticos y de los cuales es posible prescindir (recreación y cultura o vestimenta), el efecto de la variación de precios relativos de la inflación, al igual que el de los ingresos, también fue regresivo», explicaron desde Proyecto Económico.
Luego de la publicación de la cifra difundida por el INDEC, el Colectivo Nacional Hipotecados UVA Autoconvocados advirtió que en la práctica para ellos implica un aumento del 6% tanto en las cuotas que deben abonar como en el capital adeudado, y expresaron que “no existe ingreso familiar que pueda absorber un incremento de tal magnitud, en un contexto de suba generalizada de todos los precios de la economía”.
«Los maltrechos ingresos de las familias hipotecadas, no resisten más aumentos. El congelamiento en las cuotas dispuesto por el Gobierno Nacional llega a su fin en el mes de Diciembre, con el agravante de que miles de familias quedaron afuera de esa medida», señalaron desde el colectivo que desde hace por lo menos un año, cuando comenzaron los sucesivos saltos del tipo de cambio y la inflación, viene reclamando respuestas del gobierno.
«Desde este colectivo impulsamos un inmediato congelamiento que suspenda la indexación de la UVA con alcance general a todas las hipotecas sin exclusiones, y hasta tanto se sancione una ley que modifique de raíz los créditos hipotecarios indexados por inflación», reclamaron.
