La inversión volvió mostrar signos de recuperación en marzo, de acuerdo con un informe del Instituto de Trabajo y Economía (ITE) de la Fundación Germán Abdala que señala un crecimiento del 6 % desestacionalizado respecto del mes anterior.
Según el ITE, en marzo de 2021 «el Indicador Mensual de Inversión registró un crecimiento de 89,6 por ciento anual», aunque ese crecimiento se debe fundamentalmente a la baja base de comparación frente a los meses más duros de la pandemia en 2020.
En ese período de mayores restricciones, mientras regía el aislamiento social preventivo y obligatorio (ASPO), los niveles de inversión tuvieron derrumbes que fueron desde -22 % en febrero hasta -68 % en abril, el peor registro del año pasado y el peor desde la salida de la convertibilidad en 2002.
Según los datos del Instituto, el primer trimestre del año registró un crecimiento del 39,4 % anual, donde «más de la mitad se explica por el fuerte dinamismo de la Construcción, seguido por los Bienes de Capital importados». En esa línea, detallaron que «la Construcción tuvo un aumento de 51,1 por ciento anual, presentando 5 incrementos consecutivos anuales», mientras que «Equipo Durable de Producción (EDP) presentó un incremento de 38,6 por ciento».
Dentro de esta última categoría, los equipos de origen nacional tuvieron un repunte del 17,4 %, volviendo a ubicarse en niveles previos a la pandemia. Los importados, por su parte, tuvieron un aumento de 21,1 % anual, «acelerándose nuevamente respecto a los meses previos», destacaron.
De esta manera, la inversión recuperó terreno y se ubica en el nivel más alto desde agosto de 2018. A fines de abril de ese año, la llegada de la crisis cambiaria durante el gobierno de Mauricio Macri aceleró la caída, que se mantuvo durante todo 2019 y, con la llegada de la pandemia, afectó a la mayor parte de 2020.
En la medición anual con estacionalidad, el indicador registró variaciones negativas consecutivas desde mayo de 2018 hasta octubre de 2020, cuando comenzó la recuperación, que hoy ya superó el terreno perdido durante la crisis sanitaria del año pasado y el último año de gobierno de Cambiemos. Sin embargo, todavía se ubica casi 13 % por debajo de los niveles previos al estallido de aquella crisis cambiaria.