Por Andrés López*
«El deporte tiene una característica que lo configura como impostergable para el normal desarrollo del Hombre, por lo que debe ser organizado y científicamente programado para que su práctica se haga efectiva a partir de los 5 (cinco) años de edad. Por ello, el Estado debe asumir la responsabilidad de orientar, promover, asistir, ordenar y fiscalizar la actividad deportiva, posibilitando el acceso del Pueblo a la práctica del deporte, para que éste deje de ser un privilegio de pocos para ser un derecho de todos”, escribió en 1973 Juan Domingo Perón. Lo hizo en una carta que envió al Congreso de la Nación junto con un proyecto que un año después se transformó en la Ley 20.655.
Desde entonces, esa norma regula la actividad del deporte en la Argentina. Pero, a más de cuatro décadas de su sanción, se hizo necesario trabajar en su actualización, para ponerla a tono de los nuevos derechos que el pueblo supo ganar en doce años de kirchnerismo.
Por primera vez en la historia, las normas de la actividad deportiva no se iban a discutir en Buenos Aires. Desde febrero, los foros comenzaron a recorrer la Argentina.
Como ocurrió con la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual, la propuesta de una nueva Ley del Deporte se discutió a todo lo ancho y largo del país. Fue a través de los foros, que recorrieron todas y cada una de las provincias, para poder discutir con los actores de la comunidad deportiva de cada región cuáles eran las problemáticas y cuáles debían ser los alcances de la nueva norma.
Por primera vez en la historia, las normas de la actividad deportiva no se iban a discutir en Buenos Aires. Desde febrero, los foros comenzaron a recorrer la Argentina (en abril llegaron a La Plata por iniciativa de la Facultad de Periodismo y Comunicación Social) para poder escuchar a todos. Y le dieron forma a una ley que tiene todo para ser una auténtica revolución en el deporte nacional.
Asignación Universal por Hijo en el Deporte
Dentro del paquete de medidas figura nada menos que la creación de una Asignación Universal por Hijo en el Deporte. Esto es, que los beneficiarios de la Asignación Universal por Hijo reciban un monto para solventar la cuota de una institución deportiva, generando una doble mejoría. Por un lado, dos millones de niños, niñas y adolescentes que hoy no tienen acceso a la práctica deportiva van a poder hacer realidad ese derecho. Por el otro, los clubes van a recibir una fuerte inyección de recursos para sostener sus actividades.
Para poder recibir este beneficio, las instituciones tendrán que modificar sus comisiones directivas, incluyendo reformas para hacerlas más democráticas. Así, los clubes estarán obligados a incluir representación femenina y cupo de jóvenes dirigentes. También se eliminan las reelecciones indefinidas: desde ahora sólo será posible una reelección. Se busca incluir miradas renovadoras y nuevas ideas, que los espacios deportivos sean accesibles a todos, y no exista margen para que los viejos dirigentes se perpetúen en el poder.
La nueva Asignación al Deporte la va a administrar el ENADED (Ente Nacional de Desarrollo Deportivo), un nuevo organismo que tendrá a su cargo el Observatorio Nacional del Deporte y la Actividad Física y distintos programas para desarrollar la infraestructura deportiva.
Infraestructura de alto rendimiento
El fomento de la infraestructura es uno de los elementos claves de la nueva ley. Lo que se busca es generar centros de alto rendimiento en cada una de las regiones del país. En la actualidad, los deportistas que llegan a un nivel de excelencia están obligados a mudarse a Buenos Aires para entrenar en el Cenard. Lo que ahora se busca es evitar el centralismo y generar polos de desarrollo deportivo en el NOA, NEA, Cuyo, Patagonia y centro del país.
El ENADED además tendrá a su cargo la formación de médicos, dirigentes, docentes y técnicos del deporte, el empoderamiento de la mujer en la actividad deportiva y el desarrollo de un Programa de Becas Sociales Deportivas. También se buscará que los deportistas, entrenadores y árbitros tengan voz y voto en las decisiones de sus federaciones, generando instituciones más democráticas y participativas.
Aquella prédica de Perón para que el deporte sea un derecho de todos (“y todas”, es inevitable agregar) encuentra su punto máximo en esta ley, que lejos estuvo de ser el trabajo de unos pocos. Para hacerla realidad trabajaron la Comisión de Deportes de la Cámara de Diputados, la Secretaría de Deportes de la Nación, el ONDAF, el Comité Olímpico Argentino, la Confederación Argentina de Deportes, la Comisión Nacional para la Integración de las Personas con Discapacidad, la AFIP y el Movimiento Social del Deporte, junto con todas las instituciones que se sumaron en los diferentes foros.
El fomento de la infraestructura es uno de los elementos claves de la nueva ley. Lo que se busca es generar centros de alto rendimiento en cada una de las regiones del país.
Los frutos comenzaron a recogerse el 8 de octubre de 2015, en el aniversario Nº 120 del nacimiento de Perón, cuando la ley recibió media sanción en la Cámara de Diputados, con 130 votos a favor y 40 en contra. Y terminaron de madurar anoche, cuando el Senado nacional la aprobó definitivamente, en una votación que terminó 33 a 16. Como siempre, es imposible evitar que aparezcan las voces (y los legisladores) que ponen palos en la rueda. Pero una vez más, como tantas en estos años, los derechos del pueblo se terminan imponiendo con una fuerza imparable.
Para el cierre va una reflexión de Víctor Lupo en su libro Historia política del deporte argentino: “Las leyes no cambian el pensamiento y actitudes de una sociedad, pero ayudan a cambiarlas y a la vez incorporan nuevas ideas”, decía quien supo ser secretario de Deportes de la Nación y fue uno de los principales impulsores de este proyecto junto con el diputado Mauricio Gómez Bull, Claudio Morresi, Rodolfo Paverini y tantos otros. Ahora tienen por delante la tarea para que la ley sea reglamentada y se ponga en marcha. El deporte argentino se los va a agradecer.
* Director de la Tecnicatura Superior Universitaria en Periodismo Deportivo del Facultad de Periodismo y Comunicación de La Plata, UNLP.