Una trabajadora de una cooperativa del barrio El Retiro de La Plata perdió su embarazo de cinco meses mientras hacía tareas pasivas, luego de descomponerse y no recibir atención médica municipal ni del Sistema de Atención Médica de Emergencias (SAME) de la provincia de Buenos Aires que estrenó hace poco la gobernadora María Eugenia Vidal.
El miércoles por la mañana, la cooperativista municipal –cuyo nombre fue resguardado por intimidad– trabajaba en el Centro Comunitario Crecer en Unidad (423 y 226), perteneciente a la organización MUP en Lucha que nuclea a la cooperadora, quienes ayer publicaron en las redes sociales lo sucedido. Tras descomponerse, sus compañeros la trasladaron a la dependencia de Bomberos Voluntarios más cercana, ubicada a cinco cuadras, para solicitar la ambulancia del SAME.
Allí les informaron que la ambulancia no podía circular porque no contaba con médico a cargo. Luego asistieron al Centro de Salud Nº 24 dependiente del municipio, pero estaba cerrado. Ante estas adversidades, los vecinos llamaron un remís y acudieron al Hospital de Romero, a 20 km de El Peligro. Cuando llegaron, la atendieron y le informaron que había perdido el embarazo.
En el barrio El Peligro, además de no contar con agua potable, cloacas y gas, sus vecinos y vecinas no cuentan con servicio de salud. En un comunicado denunciaron “el abandono” en el que los tiene sumidos el municipio de Julio Garro, que “se refleja en tragedias totalmente evitables”. Afirmaron que la salita barrial fue inaugurada sin médicos y médicas y permanece cerrada. “Envían una ambulancia al barrio sin médico/a a cargo ni orden de ponerse en funciones”, protestaron.
Los pedidos de los vecinos y vecinas al municipio fueron reiterados, pero no hubo respuesta. “Venimos reclamando desde el año pasado para que haya un médico las 24 hs en la salita, porque la gente se descompone y no tenemos cómo socorrerlos; sólo nos queda salir al Hospital de Melchor Romero”, dijo a Contexto Karina Sebastián, vecina del barrio.
Desde que asumió Julio Garro, los vecinos y vecinas se organizaron y le enviaron el reclamo formal. “Hasta el momento, sólo nos han respondido con evasivas y promesas incumplidas”.
La ausencia del Estado en El Peligro también se hace sentir en otras zonas del Gran La Plata. Mariel Chiara, enfermera de una salita en San Carlos, dijo a Contexto que “la cantidad de profesionales para cumplir con lo que se necesita no alcanza”.
El cierre del programa Remediar por decisión del Gobierno nacional, programa sanitario creado por el kirchnerismo que permitía el acceso a medicamentos y recursos de salud pública, sobre todo para sectores que no tienen obra social, “genera que haya faltantes, lo que implica que la gente venga por un control, se diagnostique y vaya a un hospital a buscar los remedios”, dijo Mariel Chiara.
Los vecinos y vecinas de El Peligro también responsabilizaron a la gestión de la gobernadora María Eugenia Vidal, por el deficiente funcionamiento del SAME.
En marzo, acompañada por el presidente Mauricio Macri, el jefe de Gobierno porteño Horacio Rodríguez Larreta y veinte intendentes entre los que se encontraba Julio Garro, Vidal inauguró con altas dosis de entusiasmo la llegada del SAME a la provincia. Para su ejecución se anunció la entrega de 150 ambulancias para toda la provincia, y quince para La Plata. Los recursos humanos hablaban de 2.500 personas para abarcar veinte municipios.
Sin embargo, desde el gremio CICOP, que mantiene medidas de fuerza por la apertura de paritarias y contra el vaciamiento del área, y que se encuentra en una feroz disputa con la gobernadora al igual que los gremios docentes, advirtieron que la inauguración del SAME trajo una mayor precarización para el personal, a la vez que no aporta insumos fundamentales.
En su comunicado, los vecinos y vecinas de El Peligro sostuvieron que “las inversiones en el servicio del SAME, al igual que con el nuevo centro de salud, no han tenido una contrapartida en cuanto a la inversión en recursos humanos, y el mismo Consejo Deliberante de la Municipalidad de La Plata reconoce que los sueldos que se ofrecen son miserables. Razón por la cual es prácticamente imposible conseguir profesionales para trabajar en los centros sanitarios”.
Cuando se inauguró el SAME, en diálogo con este medio, Nicolás Kreplak, presidente de la Fundación Soberanía Sanitaria y ex viceministro de Salud de la Nación, advirtió que “hablamos de ambulancias, pero estamos dejando todos los centros de salud sin insumos. Hacen una cuestión de emergencia, que no está mal, pero aislada del sistema de contención”.
