El caso de «tentativa de homicidio doble» que involucra a Carolina Píparo y su marido, Juan Ignacio Buzali, vuelve a complicar a la diputada provincial de Juntos por el Cambio, con la declaración de una de las víctimas que ratificó este jueves el intento de soborno por parte de la legisladora. El joven de diecisiete años que destapó el escándalo por el ofrecimiento de dos mil pesos, zapatillas y un celular, declaró ante la fiscal María Eugenia Di Lorenzo y reafirmó los hechos que denunció la semana pasada.
Identificado como IC, por las iniciales de su nombre, el damnificado se presentó ante la fiscal a cargo del caso acompañado de su representante, Pablo Cuomo, y sostuvo que hubo un acuerdo de dinero entre la actual funcionaria municipal del intendente platense Julio Garro y los entonces abogados defensores, ahora apartados de la causa.
«Ese día me llamó Juan Beluardo a mi casa, donde vivo con mis abuelos, y me dijo que íbamos a tener una reunión para hablar del caso. En ese entonces, me comenta mi mamá también de una reunión, porque hablaron con ella, que no vive conmigo. Me dice que nos íbamos a reunir en una cafetería para comentarme lo que estaba pasando», expresó el joven en su relato.
«Los abogados anteriores arreglaron una suma de dos millones de pesos con Carolina Píparo y a mí me dieron 2.000 pesos. Estoy cansado de todo esto, quiero hacer mi vida normal, todos los días me pregunto antes de irme a dormir cuándo va a ser el día que termine todo esto», agregó en la declaración que tomó trascendencia pública durante la tarde del jueves.
El damnificado ratificó además que sus anteriores abogados, Juan Beluardo y Juan Ignacio Fontana, organizaron el mentado encuentro de «mediación» sin su consentimiento. Vale recordar que, la semana pasada, Píparo reconoció haber hecho el ofrecimiento del dinero, las zapatillas y el celular, pero que lo hizo «de corazón».
En tanto, con el revuelo ocasionado por el presunto soborno, se reanudaron los pedidos de renuncia a su cargo como titular de la Secretaría de Asistencia a la Víctima de la Municipalidad de La Plata. El abogado Martín De Vargas, representante de la otra víctima, es uno de los principales impulsores del pedido, como también de la solicitud de revocamiento del beneficio de arresto domiciliario que tiene Juan Ignacio Buzali.
«Lo que hizo Píparo es, como mínimo, ilegítimo. Incluso si quería hacer esta clase de ofrecimientos, tenía marcos institucionales para hacerlo. En estos casos se puede avanzar de manera judicial o extrajudicial. Ella podría haber hecho una citación privada en el Colegio de Abogados de manera extrajudicial, se puede llegar a un acuerdo o no, pero no hacer una reunión a escondidas y clandestina», dijo De Vargas en diálogo con Contexto.
Buzali, marido de Píparo, enfrenta la acusación de «tentativa de homicidio doble» en base al hecho ocurrido durante la madrugada de Año Nuevo, cuando atropelló a dos jóvenes de manera intencional y luego huyó a bordo de su Fiat 500L, donde también se encontraba la diputada bonaerense. Buzali embistió la moto y la arrastró varios metros, en la intersección de 31 y 28 de la ciudad de La Plata.
